La dimisi¨®n del ministro de Exteriores de Ir¨¢n revela las tensiones internas
Zarif, cuya renuncia no ha sido aceptada por el presidete, no estuvo presente en ninguno de los dos encuentros de El Asad en Teher¨¢n
¡°Pido disculpas sinceramente por la incapacidad para continuar sirviendo y por todas las deficiencias durante el servicio¡±. As¨ª anunci¨® su dimisi¨®n el lunes Mohammad Javad Zarif, ministro de Exteriores de Ir¨¢n, a trav¨¦s de Instagram. El mensaje?provoc¨® especulaciones sobre las razones de su renuncia e incluso acerca de la autenticidad de la noticia, pero unas horas m¨¢s tarde el jefe de la diplomacia iran¨ª reiter¨® su decisi¨®n: "Tras la publicaci¨®n de las fotos de los encuentros de hoy [por el lunes], Mohammad Javad Zarif, como ministro de Exteriores ya no tiene ning¨²n prestigio en el mundo.¡±
Aunque Zarif no estuvo presente en ninguno de los dos encuentros de El Asad en Teher¨¢n, en las fotos de Hassan Rohani con su hom¨®logo sirio puede apreciarse la presencia de Qasem Soleimani, jefe de la Fuerza Qods (cuerpo de ¨¦lite de operaciones externas de la Guardia Revolucionaria) y en la otra reuni¨®n con el ayatol¨¢ Jamenei se ve al excanciller conservador Aliakbar Velayati y actual asesor del l¨ªder iran¨ª.
El diario Jomhuri-e-Eslami public¨® este martes una entrevista con Mohammad Javad Zarif, realizada d¨ªas antes de su dimisi¨®n, en la que el canciller iran¨ª critica duramente la falta de cohesi¨®n pol¨ªtica en materia diplom¨¢tica. ¡°Algunos consideran las negociaciones como un antivalor y las presentan como concesi¨®n o incluso traici¨®n¡±, explic¨® Zarif en referencia a las cr¨ªticas de la l¨ªnea dura del sistema al acuerdo nuclear. ¡°?Por qu¨¦ no condenan a Trump en vez de condenar al presidente electo y al aparato diplom¨¢tico?¡±, se quej¨® el principal art¨ªfice del acuerdo nuclear.
Horas despu¨¦s, el presidente Hasan Rohani, rechaz¨® la dimisi¨®n de Zarif. No es la primera vez que ¨¦ste intenta dejar el cargo como protesta por la injerencia de los sectores ultraconservadores de la Rep¨²blica Isl¨¢mica en la diplomacia del pa¨ªs, aunque el actual es un momento sumamente cr¨ªtico para el Gobierno. El Ejecutivo afronta el creciente peso de una oposici¨®n que aboga por el enfrentamiento en vez de la negociaci¨®n y que ha venido reforz¨¢ndose desde la retirada de Washington del pacto nuclear en mayo pasado y el posterior restablecimiento de sus sanciones unilaterales.?
Por otro lado, la popularidad de Zarif se ha desplomado por sus frustrados intentos para justificar la mala gesti¨®n econ¨®mica del pa¨ªs atribuy¨¦ndola a las sanciones norteamericanas y a la propia actitud de los iran¨ªes. El ¨²ltimo ejemplo han sido unas declaraciones de hace dos semanas en las que sostuvo que los iran¨ªes se enorgullecen ¡°de estar bajo presi¨®n por defender al pueblo palestino¡±, que provocaron una ola de protestas y cr¨ªticas en su contra en las redes sociales, lo que le oblig¨® a rectificar sus dichos.
Las estrecheces econ¨®micas que acosan a la sociedad iran¨ª han generado insatisfacci¨®n en las capas sociales m¨¢s vulnerables, como la clase obrera. Los sectores reacios al acercamiento a Occidente acusan a Rohani y a Zarif de haber apostado todo al acuerdo nuclear, en el que Ir¨¢n ha cumplido con sus obligaciones sin beneficiarse de sus supuestas ventajas. Tras la firma del pacto, los sectores cercanos al l¨ªder supremo pusieron todo tipo de pegas con el objetivo de frenar la creciente popularidad de o Zarif, calificado en su d¨ªa por la opini¨®n p¨²blica como el ¡°h¨¦roe de la diplomacia pol¨ªtica¡±.
Aunque la presidencia no ha aceptado la dimisi¨®n de Zarif, seg¨²n un portavoz de Exteriores ¡ªque rechaz¨® por ¡°incorrectas¡± las diferentes interpretaciones sobre los motivos de la renuncia¡ª, la decisi¨®n sobre su continuidad depende ahora de Jamene¨ª, que siempre tiene la ¨²ltima palabra en el nombramiento del jefe de la diplomacia del complejo sistema isl¨¢mico que rige Ir¨¢n.
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