La derecha europea elude expulsar a Orb¨¢n y opta por una suspensi¨®n
El PPE decide suspender al partido del primer ministro h¨²ngaro, que seguir¨¢ apoyando la campa?a de Weber para el Parlamento Europeo
El PPE (Partido Popular Europeo) opt¨® este mi¨¦rcoles por evitar la posibilidad de un cisma en la derecha al eludir la expulsi¨®n de Viktor Orb¨¢n a dos meses de las elecciones a la Euroc¨¢mara. Al partido del primer ministro h¨²ngaro, Fidesz, se le aplicar¨¢ una suspensi¨®n parcial. Esta le priva de sus derechos de voto y de asistencia a los congresos del PPE ¡°hasta nuevo aviso¡±, despu¨¦s de que una docena de partidos de 10 pa¨ªses hubieran pedido la exclusi¨®n por sus ataques a la Comisi¨®n y deriva ultraderechista. Pese a haber amenazado con dejar la formaci¨®n, Orb¨¢n seguir¨¢ dentro para preservar, dijo, la ¡°unidad¡± de la derecha en Europa.
El PPE se enfrentaba a un dilema: seguir con Fidesz entre sus filas y poner en riesgo la colaboraci¨®n con otros partidos de cara a futuras alianzas poselectorales o bien expulsarlo y arriesgarse a una escisi¨®n en el partido a apenas dos meses de los comicios al Parlamento Europeo. La Asamblea Pol¨ªtica opt¨® finalmente por no echar a Orb¨¢n y suspenderlo sine die del seno del partido que preside Joseph Daul.
Fue precisamente el presidente del partido quien anunci¨® a trav¨¦s de su cuenta de Twitter lo que posteriormente Orb¨¢n calific¨® como una ¡°resoluci¨®n de compromiso¡± sugerida por la direcci¨®n del PPE ¡ªcon el apoyo de la CDU¡ª que sali¨® adelante por 190 votos a favor y solo tres en contra. A pesar de la presi¨®n de los partidos n¨®rdicos y del Benelux, Orb¨¢n seguir¨¢ siendo socio del PPE. Pero, ¡°hasta nuevo aviso¡±, la derecha europea decidi¨® despojar a los integrantes de Fidesz del derecho de voto, de asistencia a los congresos del PPE y de la posibilidad de proponer a candidatos para cargos del partido.
A pesar de haber amenazado con dejar el PPE si era expulsado, Orb¨¢n finalmente decidi¨® quedarse. Y lo hizo, dijo, porque ha alcanzado un compromiso para ¡°mantener la unidad¡± de la derecha europea pese a tener que renunciar a ¡°liderarla¡±. El primer ministro h¨²ngaro, que una vez m¨¢s decidi¨® plantar cara a sus correligionarios acudiendo a la asamblea a defenderse, compareci¨® tras la reuni¨®n del PPE y lament¨® que ¡°la l¨ªnea m¨¢s de izquierdas y liberal¡± se hubiera impuesto sobre el resto, como ya sucedi¨®, dijo, con el Partido Popular austriaco de Wolfgang Sch¨¹ssel por pactar con la ultraderecha a principios del a?o 2000.
El punto del d¨ªa sobre la expulsi¨®n de Fidesz tuvo que ser incluido a petici¨®n una docena de pa¨ªses despu¨¦s de la campa?a que el Gobierno h¨²ngaro hizo contra la Comisi¨®n Europea y, en particular, contra su presidente, Jean-Claude Juncker.
Posici¨®n del PP espa?ol
El candidato del PPE al Parlamento Europeo, Manfred Weber, sali¨® a dar cuenta de la resoluci¨®n adoptada. Los populares acordaron la constituci¨®n de un comit¨¦ de evaluaci¨®n para seguir la evoluci¨®n de Fidesz y, en un futuro, determinar si pueden restituirse todos sus derechos. El comit¨¦ estar¨¢ integrado por el expresidente del Parlamento Europeo Hans-Gert Pottering; el excanciller austriaco Wolfgang Sch¨¹ssel; el exprimer ministro belga y expresidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy.
Adem¨¢s de los ataques contra Bruselas, los partidos especialmente cr¨ªticos con el l¨ªder h¨²ngaro hab¨ªan solicitado la expulsi¨®n de Fidesz al considerar que sus posiciones eran incompatibles con el ideario democristiano de la principal familia pol¨ªtica conservadora del continente.
El debate descoloc¨® a algunas de las delegaciones, en particular al PP espa?ol, que prefiri¨® mantenerse en gran parte al margen de la pol¨¦mica abierta por la deriva ultraderechista de Orb¨¢n. Fuentes del PP atribuyeron su relativo silencio al hecho de encontrarse en un periodo preelectoral de cara a las generales del 28 de abril.
Pero la figura de Orb¨¢n siempre ha contado con simpat¨ªas entre los conservadores espa?oles. En septiembre, cuando el Parlamento Europeo aprob¨® la apertura de un expediente contra Hungr¨ªa sobre la base al art¨ªculo 7 del Tratado por entender que hab¨ªa violado los valores fundamentales de la UE, ning¨²n eurodiputado espa?ol del PP vot¨® a favor. Se abstuvieron o votaron en contra.
La ofensiva de las formaciones de varios pa¨ªses de Europa contra la deriva de Orb¨¢n contrasta, adem¨¢s, con las posiciones m¨¢s conservadoras hacia las que ha virado el PP de Pablo Casado y a su disposici¨®n a pactar con la ultraderecha de Vox. La tolerancia de Casado hacia el partido de Santiago Abascal contrasta con el creciente rechazo del PPE hacia Orb¨¢n. El asunto seguramente estar¨¢ presente en la reuni¨®n de l¨ªderes populares de hoy, previa al Consejo Europeo. Pero en esta, aplicando la suspensi¨®n, Orb¨¢n ya no tendr¨¢ ni voz ni voto.
"Orb¨¢n siempre gana"
¡°La suspensi¨®n de Fidesz del PPE era el escenario m¨¢s plausible ya que ambos tienen una especie de dependencia mutua¡±, sostiene la analista h¨²ngara Editz Zgut. Si el PPE hubiera expulsado al partido de Orb¨¢n perder¨ªa 12 esca?os abriendo la puerta a la consolidaci¨®n de un bloque nuevo liderado por los populistas de extrema derecha. ¡°Y lo que est¨¢ en juego para Orb¨¢n es que sin el escudo protector del PPE cualquier cosa podr¨ªa pasarle a su Gobierno corrupto y antidemocr¨¢tica en la esfera pol¨ªtica europea¡±, a?ade Zgut, investigadora actualmente de la universidad de Varsovia.
¡°Pase lo que pase en Bruselas, Orb¨¢n dar¨¢ la vuelta a la situaci¨®n. ?l siempre gana. Para eso tiene el control de los medios¡±, reconoce por tel¨¦fono desde Budapest un activista h¨²ngaro que prefiere mantener el anonimato. ¡°Si le expulsan del PPE, dir¨¢ que toda Europa est¨¢ en contra de Fidesz. Y si los conservadores le apoyan lo usar¨¢ para reforzar sus medidas autoritarias¡±.
De sobra es conocido su rechazo hacia los inmigrantes, su discurso ultranacionalista y su defensa a ultranza de la Europa cristiana, una ideolog¨ªa que lo ha alejado de sus colegas de la derecha tradicional europea. Pero hasta ahora, su pol¨ªtica exterior y sus pol¨¦micas leyes antiinmigratorias -que le han valido varios expedientes de Bruselas- no han influido en las urnas ya que el primer ministro h¨²ngaro gobierna con mayor¨ªa absoluta el pa¨ªs centroeuropeo desde 2010.
"El l¨ªder de Fidesz ha pasado muchas veces el l¨ªmite, pero es llamativo que lo que ha provocado un aut¨¦ntico esc¨¢ndalo para el PPE es que Orb¨¢n se haya atrevido a atacar personalmente a Juncker", critica el analista h¨²ngaro Andr¨¢s Bir¨® Nagy. El polit¨®logo se refiere a los carteles de una campa?a del Gobierno de Budapest en los que aparece la imagen del presidente de la Comisi¨®n, Jean-Claude Juncker (miembro del PPE) junto al fil¨¢ntropo multimillonario George Soros (archienemigo de Orb¨¢n) y donde se sugiere que hay una supuesta conspiraci¨®n entre ambos para fomentar la inmigraci¨®n.
A pesar de ser un pa¨ªs de menos de 10 millones de habitantes que ha perdido el 10% de su poblaci¨®n en los ¨²ltimos 30 a?os y de no tener apenas poblaci¨®n extranjera, el tema migratorio despierta muchas susceptibilidades en Hungr¨ªa. Fidesz lo sabe y ha sacado partido de ello en clave interna. Al menos, hasta ahora.
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