El Congreso de Gandhi consuma su derrota con la p¨¦rdida del basti¨®n familiar
El principal partido de la oposici¨®n apenas logra medio centenar de esca?os en las elecciones
El Partido del Congreso ha vuelto a fracasar, pero esta vez por partida doble: por el resultado logrado en las elecciones y por la p¨¦rdida de su basti¨®n familiar, la circunscripci¨®n de Amethi, en Uttar Pradesh. ¡°La gente de Amethi ha decidido y espero que se les trate con amor¡±, ha dicho este jueves Rahul Gandhi, l¨ªder del Congreso, en la rueda de prensa en la que reconoci¨® el doble rev¨¦s: la segunda debacle consecutiva del hist¨®rico partido en unas elecciones generales y su derrota en el feudo de la dinast¨ªa Nehru-Gandhi. Desde 1980, los votantes de Amethi hab¨ªan dado su esca?o al t¨ªo de Rahul Gandhi, primero, as¨ª como a su padre, primer ministro del pa¨ªs hasta su asesinato en 1991, y a su madre, Sonia Gandhi, actual presidenta del partido. La p¨¦rdida de ese distrito simboliza el hundimiento y la desconexi¨®n popular de un partido que domin¨® durante d¨¦cadas la pol¨ªtica nacional en la India desde su independencia.
El escaso medio centenar esca?os obtenidos por el Congreso apenas si mejora los 44 de las de 2014, cuando cosech¨® los peores resultados de su historia. Pocos, en cualquier caso, frente a los 272 asientos necesarios para la mayor¨ªa absoluta en la Lok Sabha (C¨¢mara baja). Adem¨¢s, acaba con las aspiraciones de la coalici¨®n de partidos que lidera el Congreso, la Alianza Progresista Unida (UPA, en sus siglas inglesas), cuyos 90 esca?os son insignificantes para impedir gobernar a Narendra Modi, a¨²n m¨¢s reforzado tras la victoria implacable del BJP.
El desastre del Partido del Congreso en estas generales contrasta con su inesperada victoria en las regionales de diciembre del a?o pasado, cuando conquist¨® tres Estados basti¨®n del nacionalismo hind¨² del BJP. La derrota de Rahul Gandhi ahora en esas mismas regiones no solo se debe al empuje arrollador del primer ministro Modi en los comicios m¨¢s presidencialistas que se recuerdan en la mayor democracia parlamentaria del mundo. Tambi¨¦n demuestra el fallo estrat¨¦gico del Congreso, al querer agradar a las minor¨ªas musulmanas en el cintur¨®n hind¨² del pa¨ªs.
El naufragio del Congreso se confirma de este a oeste, incluyendo Delhi, la capital, donde el Congreso no lidera ninguno de los siete esca?os. El hundimiento, sin embargo, tampoco puede achacarse solo al hecho de que el partido de Modi haya acaparado el discurso p¨²blico a ra¨ªz de la ola de fervor nacionalista que sacudi¨® India en febrero, cuando un atentado terrorista en Pulwama (Cachemira) caus¨® m¨¢s de 40 muertos.
La campa?a electoral del Congreso solo empez¨® a aprovechar la p¨¦sima gesti¨®n econ¨®mica del gobierno, con cifras hist¨®ricas de desempleo y una honda crisis agraria, hacia finales de 2018. Desconocido durante la segunda mitad del a?o pasado, el Congreso solo mostr¨® su programa a pocos meses de las elecciones. Tiempo insuficiente para llevar a todos los rincones de la vasta geograf¨ªa india las promesas de beneficios para m¨¢s de 250 millones de personas, salario m¨ªnimo o la cuota del 33% de mujeres en partidos y gobiernos. M¨¢s a¨²n teniendo en cuenta la desventaja log¨ªstica y econ¨®mica con respecto al BJP, que duplica sus inversiones en la campa?a. La falta de nervio pol¨ªtico del Congreso se demuestra tambi¨¦n en el hecho de que Rahul Gandhi ha perdido Amethi porque su rival, Smriti Irani, ministra en funciones del BJP, ha prestado m¨¢s atenci¨®n a sus votantes que el l¨ªder de la oposici¨®n.
Con la derrota, empiezan los rumores sobre la alternativa de Priyanka, hermana de Rahul Gandhi, como futura l¨ªder del partido. Pero los votantes indios est¨¢n hastiados del nepotismo que ha regido la India durante d¨¦cadas. Un aspecto que el BJP tambi¨¦n ha entendido, de ah¨ª que negase la candidatura a la mujer de un antiguo ministro con el mensaje de que este partido no ofrece puestos por relaciones de sangre. Una clara alusi¨®n a las tradiciones imperantes en el partido de la dinast¨ªa Nehru-Gandhi.
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