Nueva exportaci¨®n de Brasil a India: c¨®mo hacer agronegocios
Peque?os agricultores brasile?os comparten con expertos indios sus experiencias sobre c¨®mo agregar valor a sus productos
En una peque?a hacienda de Ibi¨²na, los agricultores cosechan productos org¨¢nicos cuyo destino final son las mesas de los millones de habitantes del gran S?o Paulo en Brasil. Mientras tanto, desde la vecina Divinolandia se exporta caf¨¦ de alta calidad. Y en Serrana, el asentamiento ind¨ªgena Sep¨¦ Tiaraju utiliza un sistema agroforestal como forma de unir el agronegocio a la sustentabilidad.
Todas estas iniciativas tienen en com¨²n el poder de los agricultores, quienes como una comunidad lograron ir m¨¢s lejos y aumentar las ventas de sus productos en un 87 % y atraer la atenci¨®n de otro gigante: India.
La log¨ªstica y el trabajo detr¨¢s de la elaboraci¨®n de estos alimentos tard¨® casi una d¨¦cada en despegar y se bas¨® en mejorar el acceso de las organizaciones de los productores rurales a los mercados e incrementar, al mismo tiempo, los instrumentos y pol¨ªticas que contribuyen a la sostenibilidad ambiental de la agricultura familiar. Como resultado, las ventas de cientos de familias aumentaron en hasta 10 veces lo previsto.
Cada d¨ªa, se nota la transformaci¨®n de esos agricultores. Ahora, el desaf¨ªo es expandir sus mercados. "Tras siete a?os, hemos finalizado un ciclo de inversiones con m¨¢s de 300 asociaciones y cooperativas beneficiadas. Todas implementaron sus planes de negocio y ahora se enfrentar¨¢n el desaf¨ªo de gestionar sus nuevos emprendimientos de manera sostenible", cuenta Jo?o Brunelli, jefe de la Coordinaci¨®n de Asistencia T¨¦cnica Integral, organizaci¨®n de la Secretar¨ªa de Agricultura y Abasto del estado de Sao Paulo.
La uni¨®n hace la fuerza
La iniciativa Microbacias 2 -un esfuerzo conjunto de diferentes instituciones, entre ellas el Banco Mundial ¨C trabaj¨® en el fortalecimiento de asociaciones, cooperativas y otras organizaciones de agricultores para darles autonom¨ªa y poder de negociaci¨®n frente al mercado. Para esto, les brind¨® servicios de evaluaci¨®n, financiamiento y asistencia t¨¦cnica.
En la ciudad de Ibi¨²na, por ejemplo, todos los alimentos producidos y cosechados se env¨ªan a la Cooperativa Agropecuaria de Ibi¨²na, donde se limpian, procesan y empacan antes de transportarse diariamente hacia la gran urbe de S?o Paulo. Los traslados se realizan en camiones nuevos, equipados con congeladores, que hacen el trayecto de 80 kil¨®metros para abastecer redes de supermercados y otros comercios locales.
Con ello, ya no se necesitan intermediarios para transportar y comercializar los productos. Y, con la inversi¨®n en distintos tipos de equipos, se hizo posible contratar a m¨¢s gente para limpiar y empacar los productos, aumentando el valor agregado y el empleo. Las hortalizas plantadas en una peque?a finca de Ibi¨²na ahora se pueden encontrar en grandes cadenas de mercados del centro de una de las ciudades m¨¢s populosas de Latinoam¨¦rica.
El proyecto Microbacias 2 fue m¨¢s all¨¢ de la agricultura convencional. Busc¨® aliar el agronegocio a iniciativas sostenibles, como la agroforestaci¨®n, agricultura org¨¢nica e hidrop¨®nica.
Ant?nio Dias, agricultor de Ibi¨²na, empez¨® a utilizar t¨¦cnicas org¨¢nicas de cultivo hace algunos a?os y hoy obtiene los mismos niveles de ingreso que ten¨ªa con la agricultura convencional. "Decid¨ª adoptar el sistema org¨¢nico porque estaba trabajando con productos qu¨ªmicos muy da?inos. En el inicio me cost¨® mucho entender c¨®mo hacerlo, pero hoy en d¨ªa tengo buenos resultados", afirma Ant?nio.
El proyecto apoy¨® 358 propuestas de negocio de organizaciones rurales, que involucraron a 10.986 productores rurales. Adem¨¢s del apoyo financiero, se invirti¨® en asistencia t¨¦cnica a los agricultores y en la orientaci¨®n para que adoptaran pr¨¢cticas agr¨ªcolas sustentables.
Con los recursos recibidos por las entidades beneficiadas, los agricultores familiares tambi¨¦n pudieron invertir en sus fincas. Por ejemplo, compraron equipos y veh¨ªculos, construyeron galpones y contrataron a servicios t¨¦cnicos especializados, necesarios para incrementar sus emprendimientos.
Tambi¨¦n permiti¨® financiar hasta el 70 % de cada plan de negocio, limitado a un valor de R$ 800.000 (unos 208.000 d¨®lares) por asociaci¨®n de productores. Para organizaciones de comunidades tradicionales, como ind¨ªgenas y quilombolas (descendientes de esclavos liberados), la iniciativa apoy¨® hasta el 99 % del valor de los planes, brindando un m¨¢ximo de R$ 200.000 (aproximadamente 50.000 d¨®lares) por comunidad.
El objetivo era aumentar en un 8% el valor comercializado por las organizaciones rurales beneficiarias. Pero el resultado fue a¨²n mejor: un 87 % de incremento en las ventas.
Desde Brasil hacia India
Los buenos frutos cosechados por esta iniciativa atrajeron la atenci¨®n de expertos extranjeros. A finales del a?o pasado, una delegaci¨®n del gobierno de India visit¨® el ¨¢rea de producci¨®n. Ahora, buscan adaptar este modelo a la realidad local del gigante surasi¨¢tico.
"El poder de la colectividad es lo que hay que resaltar de esa iniciativa brasile?a. Cuando se pasa de la individualidad a la colectividad, se puede ir mucho m¨¢s all¨¢. Se hace posible vender a mercados diferentes, exportar, negociar mejores precios", subraya Priti Kumar, especialista senior de la Pr¨¢ctica Global de Agricultura del Banco Mundial. "Las modificaciones m¨¢s all¨¢ de la producci¨®n - embalaje, marca, marketing - es lo que queremos llevar a la experiencia india, para que los agricultores puedan aumentar el valor agregado de sus productos. Adem¨¢s, fue interesante ver las pol¨ªticas p¨²blicas que garantizan el acceso al mercado de esos agricultores. Jam¨¢s hab¨ªa visto algo semejante en otras partes del mundo", concluye.
Uno de los mayores desaf¨ªos se refiere a la escala: mientras que en Brasil se considera agricultura familiar la realizada en ¨¢reas entre 5 y 110 hect¨¢reas, en la India rara vez las peque?as propiedades superan 1 hect¨¢rea. Adem¨¢s, algunos factores culturales no permiten la implementaci¨®n del modelo brasile?o: no se permite, por ejemplo, que organizaciones de agricultores ocupen grandes ¨¢reas en el medio de la ciudad, como ocurre en S?o Paulo.
Sin embargo, Brasil da valiosas lecciones a la India sobre c¨®mo unir agronegocios a la sostenibilidad, financiamiento en el ¨¢rea agr¨ªcola y pol¨ªticas p¨²blicas efectivas que benefician tanto al gobierno como a los agricultores familiares.
Guilherme Martins es comunicador digital del Banco Mundial
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