Un jefe del Pent¨¢gono, siete meses despu¨¦s
Mark Esper, de 55 a?os, veterano de guerra y de la lucha de poder en Washington, afronta su audiencia de confirmaci¨®n en el Senado
Despu¨¦s de siete meses en situaci¨®n de interinidad, Estados Unidos se dispone a nombrar al fin a un jefe del Pent¨¢gono. Mark Esper, un militar retirado con experiencia en el Congreso y como lobista, afrontaba este martes la primera audiencia de confirmaci¨®n en el Senado tratando de no salirse ni un mil¨ªmetro del guion oficial del Departamento de Defensa, cantando las prioridades establecidas por la estrategia nacional: China y Rusia como rivales, Ir¨¢n y Corea del Norte como amenazas y Al-Qaeda y el ISIS como objetivos sobre los que mantener la presi¨®n. Ya bastantes sorpresas hab¨ªan surgido hasta su llegada al Capitolio esta calurosa ma?ana de julio en Washington.
La plaza de jefe del Pent¨¢gono qued¨® libre el pasado diciembre tras la sonada dimisi¨®n de Jim Mattis, a ra¨ªz de la pol¨¦mica retirada de tropas de Siria anunciada por Donald Trump sin contar con los aliados ni el apoyo del responsable de Defensa, que ya llevaba tiempo distanciado del mandatario. Este opt¨® entonces por el subsecretario del Departamento, un veterano ingeniero de Boeing llamado Patrick Shanahan, como sustituto interino. En mayo, Trump decidi¨® confirmarle en el puesto de forma permanente, pero un mes despu¨¦s Shanahan tuvo que renunciar por sorpresa al salir a la luz un esc¨¢ndalo de violencia familiar sucedido a?os atr¨¢s.
Es entonces cuando aparece en escena Mark Esper (Uniontown, Pensilvania, 55 a?os), llegado a la Administraci¨®n de Trump en noviembre de 2017 para hacerse cargo del Ej¨¦rcito de Tierra. Compa?ero de clase del actual secretario de Estado, Mike Pompeo, en la academia militar de West Point, Esper pas¨® una d¨¦cada en servicio activo y 11 a?os en la Guardia Nacional. Se retir¨® en 2007, condecorado, como veterano de la Guerra del Golfo (1990-1991), entre otras misiones, y comenz¨® su etapa en la jungla de poder de Washington. Trabaj¨® como jefe de gabinete de un conocido think tank conservador, The Heritage Foundation, asesor¨® en la campa?a presidencial del senador republicano Fred Thompson en 2008 y particip¨® de la Comisi¨®n de Revisi¨®n de econom¨ªa y Seguridad Estados Unidos-China del Senado.
El pasado que le provocar¨¢ los primeros recelos en el Capitolio, sin embargo, ser¨¢ el de su trabajo como lobista de la compa?¨ªa Raytheon, un importante contratista del Departamento de Defensa. La senadora dem¨®crata Elizabeth Warren, precandidata presidencial, hizo p¨²blico este martes que la semana pasada le pregunt¨® si cre¨ªa que pod¨ªa servir como secretario de Estado, al hilo de la pol¨¦mica por la compra de misiles S-400 a Rusia por parte de Turqu¨ªa. Trump dijo precisamente este martes que, en respuesta, Estados Unidos no vender¨¢ los jets F-35 al Gobierno de Recep Tayyip Erdogan por el riesgo de que la nueva tecnolog¨ªa de estas aeronaves sea accesible al sistema S-400. La alternativa a los S-400 es un sistema desarrollado por Raytheon, de ah¨ª las suspicacias por posible conflicto de intereses.
Este martes, no obstante, Esper recibi¨® buenas palabras del senador dem¨®crata Tim Kaine, que valor¨® su gesti¨®n de los problemas de vivienda de los militares. En su declaraci¨®n inicial en el Senado, se comprometi¨® a mantener los objetivos estrat¨¦gicos de sus predecesores. ¡°Debemos estar preparados para responder a las amenazas regionales como Ir¨¢n o Corea del Norte, al mismo tiempo que mantenemos la presi¨®n contra grupos terroristas como el ISIS [siglas en ingl¨¦s del Estado Isl¨¢mico] y Al-Qaeda¡±, recalc¨®. Algunos de los asuntos a los que se enfrenta ¡ªya lleva semanas haci¨¦ndolo como secretario interino¡ª es la escalada de tensi¨®n con Teher¨¢n y la incertidumbre sobre Venezuela, donde Nicol¨¢s Madura sigue aferrado al poder.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.