Lady Brenda Hale: una ¡°feminista minimalista¡± al frente del Tribunal Supremo del Reino Unido
La presidenta de la Corte que ha fallado contra el cierre del Parlamento impulsado por Boris Johnson es experta en derecho de familia
La baronesa Brenda Hale (Yorkshire, Reino Unido, 74 a?os) lleg¨® hace ya a?os a la conclusi¨®n de que el derecho mejorar¨ªa si las juezas incorporaban a sus sentencias una perspectiva femenina y no se limitaban a aplicar la ley de un modo autom¨¢tico. Omnia feminae aequissimae (las mujeres son iguales en todo). Ese fue el lema escogido por Hale para su escudo de armas, cuando fue nombrada law lord?(juez lord). Un grupo de lores hac¨ªa las funciones de alto tribunal antes de que en 2005 se creara finalmente el Tribunal Supremo como ¨²ltima instancia de la justicia brit¨¢nica.
"Hay un tipo de feminismo que considera que la igualdad de sexos puede alcanzarse con la aplicaci¨®n estricta de los principios fundamentales de la ley", explicaba Hale hace ya 11 a?os en una conferencia ante la Academia Brit¨¢nica. "Pero la mayor¨ªa de las feministas van m¨¢s all¨¢ de la igualdad formal y analizan el contexto del caso. Entienden que para lograr una igualdad sustantiva hay que acomodar las diferencias, y tomar en consideraci¨®n una serie de desventajas sist¨¦micas e hist¨®ricas de las mujeres. Se trata de alcanzar una comprensi¨®n m¨¢s profunda de las complejidades que entra?a la igualdad".
Podr¨ªa parecer, de sus palabras, que esta diminuta mujer, suave en las formas, rigurosa en los argumentos, amable en las discusiones, habr¨ªa tomado partido por esa corriente del derecho anglosaj¨®n que se denomina "activismo judicial", y que pone los pelos de punta a los que tienen una visi¨®n m¨¢s conservadora. Pero el activismo de Hale, de existir, es m¨¢s sutil que todo eso.
Dio clases en la Facultad de Derecho de la Universidad de Manchester durante 18 a?os
Especialista en derecho de familia, su participaci¨®n en la elaboraci¨®n de textos como la ley del menor, o en el proyecto de ley de reforma del divorcio, le han permitido adquirir una sensibilidad, m¨¢s all¨¢ de los enunciados te¨®ricos, respecto a los usos y costumbres sociales y familiares del Reino Unido. Y su amor al derecho, al que ha dedicado m¨¢s a?os como profesora universitaria que como juez, le ha ayudado a hacerse una idea concreta de las reglas del juego. "En la mayor¨ªa de las ocasiones, resulta muy peligroso ir m¨¢s all¨¢ de aquello de lo que requiere el caso en cuesti¨®n. Y mucho m¨¢s peligroso si lo que se persigue con ello es hacer que avance una agenda pol¨ªtica concreta. Tener un punto de vista no es lo mismo que tener una agenda. Y si eso me convierte en una feminista minimalista, creo que estoy en buena compa?¨ªa. Como otros magistrados antes que yo, intento no estar demasiado segura de tener siempre raz¨®n", dec¨ªa Hale en esa misma conferencia.
Esa aproximaci¨®n a los retos, humilde pero decidida, le ha hecho ganar muchos admiradores, pero no ha evitado que la "caverna medi¨¢tica" del Reino Unido se ensa?ara con ella durante a?os. En especial, el tabloide The Daily Mail, que la convirti¨® en objetivo a batir durante los a?os en los que Hale fue fundamental en el redise?o del derecho de familia brit¨¢nico. La acus¨® constantemente de "subvertir los valores y principios familiares" de la naci¨®n. Su principal batalla la dio en el terreno del divorcio.
Es la primera mujer en acceder a la presidencia del Tribunal Supremo del Reino Unido
Los brit¨¢nicos pudieron romper legalmente sus matrimonios mucho antes que otros pa¨ªses, como Espa?a. Arrastran, sin embargo, un fundamento moralista en la ley del que Espa?a ya se ha desprendido. El divorcio en el Reino Unido a¨²n es causal. Debe demostrarse el adulterio, el comportamiento irracional o la falta de madurez de uno de los c¨®nyuges. El Gobierno de Theresa May ya ten¨ªa a punto la reforma de este anacronismo, en la que Hale contribuy¨® mucho, cuando Boris Johnson decidi¨® suspender el Parlamento. La consecuencia inmediata de esa medida era que todos los proyectos de ley en tr¨¢mite deca¨ªan. Reanudada la legislatura, habr¨ªa que comenzar de cero. Al frente del Tribunal Supremo, Hale ¡ªla primera mujer en acceder a ese cargo en el Reino Unido¡ª, disimul¨® en la medida de lo posible su m¨¢s que segura satisfacci¨®n interna cuando anunci¨® que la decisi¨®n de Johnson era "ilegal, nula, sin efecto, y deb¨ªa ser eliminada", y que por tanto el Parlamento nunca hab¨ªa sido suspendido.
Es suave en las formas, rigurosa en los argumentos y amable en las discusiones
Celosa de su vida privada, Hale dio clases en la Facultad de Derecho de la Universidad de Manchester durante 18 a?os. En ese tiempo, prepar¨® su examen para ingresar en el colegio de abogados y comenzar a ejercer. Obtuvo la nota m¨¢s alta en la prueba. Tambi¨¦n durante esos a?os se divorci¨® de su primer marido, con el que hab¨ªa tenido una hija, y comenz¨® una relaci¨®n con el decano de la facultad, Julian Farrand. Se casaron en 1992, despu¨¦s de divorciarse de modo amistoso de sus respectivas parejas. "Nos llev¨® 20 a?os enamorarnos a primera vista", ha dicho Farrand en alguna ocasi¨®n.
Hale es una fan¨¢tica de los broches. El d¨ªa en que ley¨® la sentencia en la que los 11 magistrados del Supremo establecieron por unanimidad que Boris Johnson hab¨ªa quebrado la ley, llevaba una ara?a plateada. Ser¨ªa interesante saber si se trataba de una tar¨¢ntula o de una viuda negra. Si su picadura es dolorosa pero raramente mortal, o si su veneno es capaz de acabar con la v¨ªctima. Aunque en el caso de las viudas negras, dicen los expertos, apenas muerden, no suelen ser agresivas, y solo atacan cuando realmente se sienten amenazadas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.