Veredicto imposible: la jurado se enamor¨® del testigo
La condena contra un pandillero del barrio neoyorquino de Harlem queda revocada por el romance que surgi¨® en el juicio entre una miembro del jurado y un cooperante de la acusaci¨®n
Tysheem McGregor se sent¨® hace dos a?os en el banquillo, acusado de haber participado en una guerra entre pandillas en el barrio neoyorquino de Harlem. El joven, un supuesto soldado del Ej¨¦rcito Este, fue sentenciado a 15 a?os de prisi¨®n tras un juicio por intento de asesinato, asalto, posesi¨®n de arma de fuego y conspiraci¨®n. La condena, sin embargo, acaba de ser revocada por el romance que floreci¨® durante el proceso entre una miembro del jurado y un testigo de la acusaci¨®n.
El violento enfrentamiento de las bandas tuvo lugar entre mayo y diciembre de 2015. El juicio se celebr¨® en junio de 2017. La fiscal¨ªa llam¨® al declarar a Xavier Classen como parte del acuerdo de cooperaci¨®n. Era un pandillero rival. La acusaci¨®n le utiliz¨® para identificar al acusado en un v¨ªdeo de vigilancia de uno de los tiroteos. La reacci¨®n de la jurado n¨²mero 6 al verle fue inesperada.
La mujer, de la que no se revel¨® su identidad, se sinti¨® de inmediato atra¨ªda por el testigo cooperante. Le escribi¨® una primera carta justo al comenzar las deliberaciones en la que se identific¨® como ¡°la del cabello rubio con el mo?o¡± y le facilit¨® su tel¨¦fono para que la contactara, de acuerdo con los documentos judiciales. Classen, que se encontraba tambi¨¦n en prisi¨®n por otros cargos que no estaban relacionados con el caso, la reconoci¨® ¡°de inmediato¡±.
El testigo inform¨® a los fiscales antes de conocerse la sentencia de que hab¨ªa recibido medio centenar de cartas rom¨¢nticas de la jurado n¨²mero 6. Hablaron por tel¨¦fono hasta cuatro veces al d¨ªa y ella fue a visitarle a la c¨¢rcel. No qued¨® ah¨ª la cosa. Los sentimientos fueron creciendo y el testigo de la acusaci¨®n escribi¨® al juez para que le ayudara a obtener un permiso de matrimonio. Ella, por su parte, reclam¨® a la Fiscal¨ªa que le redujera la pena por su cooperaci¨®n.
Las alarmas se activaron en ese momento. Era evidente que ni el testigo ni la jurado quer¨ªan ocultar su relaci¨®n. Pero el momento de la sentencia se acercaba. La Fiscal¨ªa entr¨® en contacto con la defensa y se inici¨® una investigaci¨®n del romance. El juez Robert Stolz celebr¨® una audiencia, durante la que la mujer dijo que era ¡°simplemente un ser humano que hab¨ªa cometido un error¡±.
Atracci¨®n f¨ªsica
El juicio dur¨® seis semanas y por el estrado pasaron cerca de un centenar de testigos. El jurado declar¨® culpable a McGregor por haber participado en uno de los cuatro tiroteos que se le acusaban. Posteriormente fue condenado a 15 a?os de prisi¨®n por sus cr¨ªmenes. La conducta imprudente de la jurado no fue suficiente en un primer momento para que se aceptara la moci¨®n de anulaci¨®n presentada por la defensa y se mantuvo la condena.
La mujer declar¨® que era plenamente consciente de que no deb¨ªa haber entrado en contacto con ninguna de las personas que participaron en el juicio y asegur¨® que no habl¨® con los miembros del jurado sobre su relaci¨®n con el testigo de la acusaci¨®n. ¡°Me sent¨ª mal por alguien que realmente intent¨® cambiar su vida¡±, explic¨® al magistrado, al tiempo que se?al¨® que ¡°obviamente hab¨ªa una atracci¨®n f¨ªsica¡±.
Al mismo tiempo, durante el interrogatorio, declar¨® que consider¨® el testimonio de Classen contra McGregor ¡°irrelevante para el juicio¡±. El juez Stolz concluy¨® que el incidente amoroso no era del tipo que pod¨ªa haber afectado a la imparcialidad del procedimiento y las evidencias contra el acusado eran abrumadoras. La corte de apelaciones, sin embargo, est¨¢ en desacuerdo y en una decisi¨®n un¨¢nime ha concluido que la mala conducta de la jurado fue ¡°flagrante¡± y ¡°deliberada¡±.
Planes de boda
Eso, a?ade el panel de cuatro magistrados, priv¨® al acusado de su derecho a tener un juicio justo. ¡°Aunque la jurado niega que sus sentimientos hacia el testigo afectaran a su manera de pensar sobre el acusado¡±, opina la juez Dianne Renwick, ¡°pudo haber intentado inconscientemente ayudar al lado con el que el testigo estaba alineado¡±. Tysheem McGregor tendr¨¢ que someterse as¨ª a un nuevo juicio.
La opini¨®n de Renwick, por cierto, incluye una nota en la que confirma que la relaci¨®n sentimental entre el testigo y la jurado es ¡°muy seria¡± y la pareja sigue tratando de poder casarse. La boda, en todo caso, no ser¨¢ posible hasta que Classen cumpla condena y sea liberado en marzo de 2021, de acuerdo con la fecha que aparece en los registros del Departamento de Prisiones de la ciudad de Nueva York.
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