La discriminaci¨®n social detr¨¢s del estallido chileno
El malestar de la sociedad se explica en parte por la discriminaci¨®n clasista, algo que sufren cuatro de cada 10 ciudadanos
El descontento de Chile, que explot¨® en forma de protestas el pasado 18 de octubre, se explica no solo por la desigualdad en el acceso a servicios b¨¢sicos como la salud o la educaci¨®n, sino tambi¨¦n por el trato clasista que soportan una buena parte de los chilenos. Las manifestaciones muestran el hartazgo ante diversas situaciones, entra las que se encuentra esta discriminaci¨®n que ya no se tolera tanto como antes aunque cuatro de cada 10 chilenos sigan sufri¨¦ndola en los ¨²ltimos a?os por su clase social, el lugar en el que viven, su vestimenta o su trabajo, seg¨²n una investigaci¨®n reciente del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
En estas casi siete semanas de crisis pol¨ªtica y social, se ha puesto en evidencia el clasismo entre los chilenos. En un centro comercial de una zona acomodada de Santiago ¡ªun escenario hasta ahora poco com¨²n para las manifestaciones¡ª, un hombre enrabiado se enfrent¨® a uno de los manifestantes, mientras grababa el momento: ¡°?ndate a tu poblaci¨®n de mierda¡±, orden¨® en referencia a los lugares de la ciudad donde viven las clases m¨¢s bajas ¡ªcomo los poblados chabolistas en Espa?a o las villas miseria en Argentina¡ª. La frase la termin¨® llamando ¡°roto¡± al manifestante, una forma muy despectiva con la que todav¨ªa algunos chilenos se refieren a la pobreza urbana.
La escena se viraliz¨® en las redes sociales, como ocurri¨® tambi¨¦n con la que protagoniz¨® un conocido empresario en el sur de Chile en febrero, en pleno verano, y que se ha convertido en una imagen ic¨®nica del clasismo que existe en el pa¨ªs. Aunque en Chile las playas son p¨²blicas, el hombre ech¨® a un grupo de mujeres que tomaban el sol a orillas del lago Ranco, a unos metros de su vivienda de descanso: ¡°Es mi jard¨ªn (¡) Se van a ir y si no, voy a venir a sacarlas yo de manera no tan pac¨ªfica¡±, les amenaz¨®, seg¨²n se observa en un v¨ªdeo que en YouTube tiene m¨¢s de 40.000 visualizaciones. El caso provoc¨® tanta indignaci¨®n que grupos de vecinos hicieron llamamientos a ocupar la playa del ejecutivo. Un hombre mayor lleg¨® con su nieta y con una bandera chilena en la mano. ¡°Estoy aqu¨ª por el futuro de la ni?a. Cuando sea mayor, espero que tenga derecho a disfrutar tambi¨¦n de este lugar junto a su familia¡±, se?al¨® el abuelo.
Antonio Benvenuto, el Gerente de Scotiabank que dijo "¨¢ndate a tu poblaci¨®n de mierda, roto ctm" en una manifestaci¨®n en un mall de La Dehesa, fue desvinculado tras instrucci¨®n emitida desde la casa matriz en Canad¨¢.
— RADIO PAULINA (@radiopaulina) November 29, 2019
Benvenuto agredi¨® a una mujer, a quien le tir¨® el pelo. pic.twitter.com/1DJeVwMOWH
El astr¨®nomo Jos¨¦ Maza, popular divulgador cient¨ªfico y agudo observador de la realidad chilena, asegura que el episodio de hace nueve meses en la localidad de Ranco, a unos mil kil¨®metros al sur de la capital, fue uno de los elementos que contribuy¨® a la explosi¨®n del 18 de octubre: ¡°El evento donde un se?or ech¨® a tres mujeres del borde de lo que ¨¦l supon¨ªa que era su playa personal ¡ªcosa que en Chile no existe¡ª y que era de su lago personal ¡ªcosa que tampoco existe¡ª es un acto de prepotencia extrema de un hombre de mucho dinero y es, para m¨ª, una de las im¨¢genes ic¨®nicas de la falta de respeto de los que tienen m¨¢s hacia los que tienen menos¡±, indica el cient¨ªfico. ¡°En Chile hay algunos que consideran que los que no tienen plata tampoco tienen dignidad y el malestar que se ha incubado durante muchos a?os es lo que est¨¢ causando este estallido social¡±.
Para la investigadora Maya Zilveti del PNUD ¡ªel organismo que ha elaborado el pionero informe Desiguales?publicado en 2017¡ª, ¡°este tipo de situaciones" en la que alguien discrimina o estigmatiza a otra persona por su origen social "son experiencias comunes en Chile, no an¨¦cdotas¡±. ¡°Esto significa que las desigualdades de trato son un problema estructural de nuestra sociedad¡±.
¡°Chile no solo es un pa¨ªs clasista, sino tambi¨¦n el clasismo est¨¢ en la base de gran parte de las experiencias de maltrato¡±, explica Zilveti. La desigualdad de trato no afecta a todos por igual, seg¨²n este estudio: las personas que pertenecen a los grupos de menor nivel socioecon¨®mico reportan mayoritariamente un trato indigno y, a su vez, ser parte de los grupos m¨¢s acomodados reduce considerablemente las posibilidades de sufrir alg¨²n tipo de discriminaci¨®n. ¡°En otras palabras¡±, explica Zilveti, ¡°vivir experiencias de maltrato en Chile no es el resultado de la suerte, sino que depende en gran medida de la posici¨®n de las personas en la estructura social¡±.
Los lugares donde m¨¢s se experimenta la discriminaci¨®n son los puestos de trabajo, la calle, los servicios de salud, el transporte, las oficinas del servicio p¨²blico y en los comercios. Las personas que comenten los abusos son desconocidos, funcionarios, jefes, trabajadores de empresas privadas, vecinos y compa?eros de trabajo o de estudios. Quienes reportaron tratos indignos relatan haber sido visto atropellados sus derechos (30%), "ofendidos o mirados en menos" (29%), "tratados injustamente" (27%), "discriminados" (21%) e, incluso, "tratados violentamente" (14%).
En paralelo, se ha producido en Chile un cambio cultural. ¡°Hoy, las violaciones al principio de igualdad en dignidad, que se perciben como tratos injustos o discriminatorios, provocan emociones intensas de frustraci¨®n e incluso de indignaci¨®n¡±, se?ala la investigaci¨®n. Lo cuenta un obrero de la ciudad de Valpara¨ªso, citado en el informe del PNUD. ¡°Te miran con desprecio o te miran como un delincuente¡±, relataba el chileno sobre su experiencia de vestir con ropa de trabajo en un espacio comercial. ¡°Creen que por tener plata pueden pisotear a los dem¨¢s y a la gente. Y eso duele. Eso molesta¡¡±.
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