Las encuestas reducen la ventaja de Johnson en la recta final de campa?a
La diferencia prevista no asegura una mayor¨ªa al Partido Conservador
Los votantes brit¨¢nicos acuden de nuevo a las urnas este jueves. Y la mayor¨ªa tomar¨¢ la decisi¨®n despu¨¦s de calibrar el peor de dos males. El candidato conservador, Boris Johnson, ha generado muchas m¨¢s dudas sobre su personalidad y su grado de confianza. Pero tiene un acuerdo del Brexit ¡°listo para meter al horno¡± y promete acabar con esa pesadilla. El candidato laborista, Jeremy Corbyn, vive las horas m¨¢s bajas de su popularidad y no genera entusiasmo. Pero ha presentado un programa revolucionario de medidas econ¨®micas y sociales con el que espera convencer al electorado de izquierdas m¨¢s remiso.
Ya lo advirtieron figuras pol¨ªticas relevantes como el ex primer ministro, Tony Blair. Intentar resolver el laberinto del Brexit con unas elecciones generales engendrar¨ªa mayor confusi¨®n, porque se mezclar¨ªan cuestiones ideol¨®gicas, econ¨®micas y hasta sentimentales con el asunto que m¨¢s ha polarizado al Reino Unido en las ¨²ltimas d¨¦cadas.
Y as¨ª ha sido. Aunque los sondeos siguen dando una clara ventaja al candidato conservador ¡ªel ¨²ltimo, de YouGov, le sit¨²a nueve puntos por delante de su rival¡ª, el margen se ha estrechado en las ¨²ltimas semanas. Johnson a¨²n corre el peligro de no alcanzar la mayor¨ªa absoluta (326 esca?os) y de enfrentarse de nuevo al peor escenario: otro Parlamento bloqueado, en el que la oposici¨®n volver¨ªa a impedir que saliera adelante el Brexit dise?ado por el Gobierno conservador.
La idea de adelantar elecciones, en un principio, era redonda. Johnson hab¨ªa sorprendido a propios y extra?os al alcanzar un acuerdo de salida de la UE con Bruselas. La culpa de que no saliera adelante, argumentaba, era exclusivamente de la C¨¢mara de los Comunes, empe?ada en ponerle obst¨¢culos. Su principal rival, Jeremy Corbyn, viv¨ªa los peores momentos de popularidad, por su ambig¨¹edad sobre el Brexit, los episodios internos de antisemitismo en el partido y una imagen de izquierda radical y trasnochada muy alejada del gusto del votante medio. Get Brexit done (Cumplamos ya con el Brexit) fue el lema escogido por el equipo de campa?a del candidato. Confiaban en mantener a todos los votantes que votaron al Partido Conservador en 2017, y sumar a un pu?ado suficiente de electores de tradici¨®n laborista pero partidarios de la salida de la UE e insatisfechos con la imagen de Corbyn.
Los laboristas aspiraban a repetir la carrera ascendente de hace dos a?os, en la que empezaron la campa?a muy alejados de sus rivales y lograron remontar hasta un empate t¨¦cnico y un honroso segundo puesto. No han transmitido esta vez el mismo entusiasmo con la f¨®rmula, pero han tenido tres ventajas. En primer lugar, las meteduras de pata de Johnson: esquivar las entrevistas, echarse atr¨¢s en algunas promesas, falta de concreci¨®n de su programa, y, la ¨²ltima, la m¨¢s hiriente, negarse a ver la foto de un ni?o enfermo en el suelo de una sala de emergencias. En segundo lugar, una presentaci¨®n sistem¨¢tica y persistente de sus propuestas econ¨®micas ¡ª¡°el programa m¨¢s radical de las ¨²ltimas d¨¦cadas¡±, seg¨²n Corbyn¡ª que ha logrado un protagonismo constante. A pesar de las descalificaciones desde el mundo empresarial y acad¨¦mico, los ciudadanos han podido enjuiciar por s¨ª mismos ideas como la renacionalizaci¨®n del agua, la electricidad y los ferrocarriles, la banda ancha de Internet gratuita para todos o la subida del Impuesto de sociedades para las grandes empresas.
Y no han dejado de repetir sus denuncias sobre las graves carencias del Sistema Nacional de Salud (NHS, en sus siglas en ingl¨¦s), que una vez m¨¢s, a pesar del Brexit, se ha convertido en el tema estrella de la campa?a.
Y en tercer lugar, el desinflamiento del Partido Liberal Dem¨®crata, que con su promesa de dar marcha atr¨¢s al proceso de salida de la UE confiaba en agrupar el voto de las clases medias m¨¢s proeuropeas. La ¨²ltima encuesta otorga a sus candidatos un 13% de los apoyos. Una cifra relevante, pero insuficiente para dar la vuelta a la situaci¨®n. La promesa de Corbyn de celebrar un nuevo refer¨¦ndum si llega al poder ha podido tener el efecto de dejar tranquilos a los votantes de izquierdas m¨¢s reticentes.
El equipo de campa?a de Johnson, y el propio candidato, han comenzado a dar muestras de nerviosismo en las ¨²ltimas horas. Han concentrado todos los esfuerzos en aquellas regiones que hist¨®ricamente han votado laborismo, pero donde el Brexit sali¨® con mayor¨ªa en 2016. Son cerca de 50 circunscripciones, situadas en las llamadas Midlands (Tierras Medias) y en el norte de Inglaterra. De ellas depende que los conservadores alcancen la ansiada mayor¨ªa. ¡°No puede estar m¨¢s ajustado de lo que est¨¢ en estos momentos¡±, ha implorado Johnson este mi¨¦rcoles. ¡°Corremos un riesgo muy real de encaminaros hacia otro Parlamento bloqueado. Tenemos que luchar por cada voto¡±.
Jeremy Corbyn eligi¨® pasar gran parte de su ¨²ltimo d¨ªa de campa?a en Escocia. Los sondeos anticipan que el Partido Nacional Escoc¨¦s (SNP) obtendr¨¢ un gran resultado y mejorar¨¢ la cifra de 35 diputados que tiene actualmente en la C¨¢mara de los Comunes. Y gran parte de esa mejora la ara?ar¨¢ del campo laborista. El partido de Corbyn ha pasado de ser una fuerza fundamental en esta regi¨®n a convertirse casi en marginal. ¡°El ¨²nico modo de deshacernos de un Gobierno conservador es votar al laborismo por todo el pa¨ªs, y eso incluye aqu¨ª en Glasgow y en toda Escocia¡±, proclamaba el candidato de la oposici¨®n ante un notable n¨²mero de seguidores que la rama local del partido se hab¨ªa encargado de congregar. Es un juego de tira y afloja. Corbyn sabe que la remota posibilidad de alcanzar el poder implica alg¨²n tipo de coalici¨®n parlamentaria con los nacionalistas escoceses. Los necesita fuertes, pero no arrolladores. La l¨ªder del SNP, Nicola Sturgeon, exige como condici¨®n a cualquier apoyo que Downing Street d¨¦ luz verde, el a?o que viene, a un nuevo refer¨¦ndum sobre la independencia. ¡°Solo el SNP puede derrotar a los conservadores en Escocia. Votar al laborismo solo lograr¨¢ ayudarles¡±, replic¨® Sturgeon en su cuenta de la red social Twitter.
Nunca se hab¨ªa hablado tanto en unas elecciones de los ¡°esca?os marginales¡±: aquellos que se logran por una diferencia m¨ªnima. Si los liberales dem¨®cratas pueden hacer da?o a las aspiraciones laboristas, el Partido del Brexit del ultranacionalista Nigel Farage (3%, seg¨²n los sondeos) puede perjudicar a los conservadores en las circunscripciones donde ha decidido presentar candidato. La gran inc¨®gnita residir¨¢ en ver hasta qu¨¦ punto los brit¨¢nicos votan con la cabeza o con las tripas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
M¨¢s informaci¨®n
Archivado En
- Elecciones Reino Unido
- Elecciones europeas
- Uni¨®n pol¨ªtica europea
- Reino Unido
- Europa occidental
- Refer¨¦ndum
- Uni¨®n Europea
- Elecciones
- Ideolog¨ªas
- Partidos pol¨ªticos
- Brexit
- Europa
- Organizaciones internacionales
- Relaciones exteriores
- Partido Conservador
- Boris Johnson
- Partido Laborista
- Jeremy Corbyn
- Lib Dems
- SNP
- Refer¨¦ndum UE
- Euroescepticismo
- Pol¨ªtica