Corbyn abre la carrera por el liderazgo laborista tras la mayor derrota en d¨¦cadas
El l¨ªder del partido anuncia que no se presentar¨¢ en las pr¨®ximas elecciones como principal candidato
Jeremy Corbyn impuls¨® un giro a la izquierda del laborismo y prometi¨® un segundo refer¨¦ndum sobre el Brexit para convertirse en primer ministro. Pero su estrategia ha llevado al partido a su mayor derrota desde 1935. La formaci¨®n obtuvo 203 esca?os en las elecciones de este jueves, 59 menos que en 2017, un p¨¦simo resultado que ha llevado a su dirigente a anunciar que no volver¨¢ a presentarse a unos comicios como l¨ªder del partido y que abrir¨¢ un proceso interno para preparar su sucesi¨®n. ¡°He hecho lo que he podido para liderar el laborismo¡±, asegur¨® este viernes.
La larga pesadilla de la noche electoral dej¨® a los laboristas lami¨¦ndose las heridas y al borde de una nueva guerra interna entre moderados y radicales. Las encuestas hab¨ªan vaticinado a mitad de la campa?a una derrota sin paliativos, pero todo apuntaba a que el partido hab¨ªa conseguido recuperar terreno gracias al impulso de una amplia base de voluntarios que, puerta a puerta y en las redes sociales, se estaban dejando la piel para atraer a m¨¢s votantes. No fue as¨ª.
¡°Ha sido decepcionante¡±, admiti¨® un abatido Corbyn la madrugada de este viernes tras el anuncio de una victoria personal ¡ªcomo diputado en la circunscripci¨®n de Islington, en el norte de Londres¡ª que no ha conseguido trasladar al resto del pa¨ªs. ¡°No liderar¨¦ el partido en unas futuras elecciones generales¡±, anunci¨®. Preguntado horas despu¨¦s por la BBC si consideraba que ¨¦l era parte del problema, dijo que hab¨ªa hecho todo lo posible para liderar el partido, que se elegir¨¢ a un nuevo dirigente a principios del a?o que viene y que no cree que haya ¡°desacuerdos¡± internos.
La formaci¨®n ha perdido numerosos feudos hist¨®ricos, tanto en el norte como en el centro de Inglaterra (la llamada muralla roja), zonas de pasado industrial y minero que respaldan el Brexit. El ¡°partido de los ricos¡±, el conservador, ha arrebatado al partido laborista, el de ¡°la clase trabajadora¡±, lugares como Workington, donde ten¨ªa un diputado desde 1918, o Blyth Valley, una circunscripci¨®n dominada por este partido desde 1950. Simb¨®lica ha sido la p¨¦rdida de Sedgefield, el antiguo esca?o de Tony Blair. En Escocia, donde en el pasado sol¨ªa ser la fuerza dominante, el laborismo ha continuado su declive a favor del Partido Nacional Escoc¨¦s.
En el conjunto del Reino Unido, el laborista ha sido el ¨²nico partido que ha perdido votos: recibi¨® el apoyo de 10,2 millones de personas, un 32,2% del total, casi ocho puntos menos que en las anteriores elecciones.
Radicales y moderados
El laborismo lleva nueve a?os intentado volver al poder. Esta era la cuarta derrota consecutiva en unas elecciones generales. Corbyn tom¨® las riendas en 2015, tras el tercero de esos fracasos. En 2017 tambi¨¦n perdi¨®, pero recuper¨® mucho terreno y eso le consolid¨® como l¨ªder de una formaci¨®n que empez¨® a virar a la izquierda pese a las resistencias de los moderados socialdem¨®cratas.
El problema de liderazgo de Corbyn ayuda a explicar, seg¨²n sus cr¨ªticos, la debacle. El socialista lleg¨® a la campa?a con los niveles de popularidad m¨¢s bajos de un l¨ªder de la oposici¨®n desde finales de los setenta, seg¨²n la firma Ipsos Mori. Tampoco gustaba que en el pasado simpatizara con el movimiento republicano irland¨¦s, o que ahora haya sido tibio frente a las denuncias de antisemitismo que afrontan miembros del partido. ¡°Es Corbyn. Sab¨ªamos que era incapaz de liderar nada. Que carec¨ªa de las cualidades necesarias para dirigir un partido¡±, afirm¨® un furioso Alan Johnson, exministro con Blair, en una intervenci¨®n en la ITV.
La ambici¨®n del programa laborista tambi¨¦n puede haberse vuelto en su contra. Cargado de medidas que quer¨ªan llegar a todos, inclu¨ªa iniciativas como la banda ancha gratis que algunos votantes consideraban un capricho innecesario en un pa¨ªs lastrado por una d¨¦cada de austeridad que ha perjudicado a los servicios sociales m¨¢s esenciales.
Culpa del Brexit
Mientras, propuestas que parec¨ªan una vuelta al socialismo de los setenta, como la renacionalizaci¨®n de los servicios de agua y electricidad, han sido cuestionadas desde la parte moderada, que considera una mejor estrategia de campa?a reconducir al partido al centro para atraer a m¨¢s votantes.
La versi¨®n oficial del partido es que el culpable fue el Brexit, que eclips¨® debates m¨¢s importantes como las desigualdades y el cambio clim¨¢tico. Hay voces cr¨ªticas que lo cuestionan, como la del diputado moderado Phil Wilson, que afirm¨® la madrugada de este viernes que no ten¨ªa sentido seguir culpando al Brexit de los problemas del laborismo. Mientras, Caroline Flint, que ha perdido el esca?o de Doncaster, en el norte, culp¨® a Corbyn de su derrota por no haber tenido en cuenta la gran cantidad de votantes laboristas que abogan por dejar al UE.
A Corbyn siempre se le ha reprochado su estrategia ambigua ante el divorcio con la UE. Finalmente, ante las presiones del partido, que tem¨ªa perder a votantes que quer¨ªan seguir en la Uni¨®n, propuso en septiembre una renegociaci¨®n del Brexit para lograr una versi¨®n m¨¢s suave que permitiera seguir en la uni¨®n aduanera, y despu¨¦s someter el acuerdo a refer¨¦ndum en seis meses.
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