Atacada con c¨®cteles molotov una productora brasile?a que retrata a Jesucristo como gay
El ataque ha sido reivindicado por un grupo de extrema derecha, mientras diputados y l¨ªderes evang¨¦licos piden a Netflix retirar el programa de humor de Porta dos Fundos
La primera tentaci¨®n de Cristo, un especial navide?o de la productora de humor brasile?a Porta dos Fundos para Netflix, se ha atrevido a rellenar el misterio de los 40 d¨ªas que Jesucristo pas¨® en el desierto, m¨¢s all¨¢ de las tentaciones. Su hip¨®tesis, resumida en un cap¨ªtulo de 46 minutos, comienza cuando Jes¨²s?(Greg¨®rio Duvivier) regresa a su casa ¡ªdonde le han preparado una fiesta sorpresa por su 30 cumplea?os¡ª, con un invitado especial, Orlando (F¨¢bio Porchat), que deja impl¨ªcito que ¨¦l y el hijo de Dios tienen una relaci¨®n (incluso le llama ¡°Capricornio travieso¡±) y ha causado pol¨¦mica en Brasil. M¨¢s de dos millones de personas han firmado la petici¨®n para que se retire la producci¨®n, igual que Barbara Salom?o Spier, del Ministerio Fiscal de R¨ªo de Janeiro, que adem¨¢s pidi¨® una multa de dos millones de reales (unos 442.000 euros).
La ira se materializ¨® en un ataque con c¨®cteles molotov a la sede de Porta dos Fundos, en la capital carioca, en plena Nochebuena. En un video que circula en redes desde el mi¨¦rcoles, el Comando de Insurgencia Popular Nacionalista de la Gran Familia Integralista Brasile?a asume la autor¨ªa del ataque, que no caus¨® heridos por la intervenci¨®n de un guardia de seguridad que evit¨® que se propagara el fuego. Las im¨¢genes muestran a tres individuos encapuchados con una bandera integralista (movimiento ultraconservador de la d¨¦cada de los treinta inspirado en el fascismo italiano) y otra del Brasil mon¨¢rquico. La polic¨ªa asegura que investigar¨¢ la presunta implicaci¨®n de este grupo de ultraderecha en el ataque, de acuerdo con el diario brasile?o O Globo.
Uno de los ofendidos ilustres ha sido el diputado federal Eduardo Bolsonaro, hijo del presidente Jair Bolsonaro. ¡°Estamos a favor de la libertad de expresi¨®n, pero ?vale la pena atacar la fe del 86% de la poblaci¨®n? Ah¨ª queda la reflexi¨®n¡±, escribi¨® en Twitter, con una imagen en la que se lee ¡°Netflix ataca a los cristianos¡±. El tambi¨¦n diputado y pastor evang¨¦lico Marco Feliciano record¨® en el mismo canal que ya se intent¨® procesar antes a Porta dos Fundos, pero la causa fue archivada. ¡°La justicia dice que es libertad de expresi¨®n¡±, escribi¨®.
El 17 de diciembre, una comisi¨®n de la C¨¢mara de Diputados aprob¨® la solicitud del diputado Julio Cesar (Partido Republicanos) para invitar a un representante de Netflix a dar explicaciones. ¡°Entendemos que una obra de arte puede tratar diferentes aspectos sobre este periodo hist¨®rico sin hacer ninguna clase de caricatura u ofensa hacia la imagen de Jes¨²s. No obstante, esta pel¨ªcula es una verdadera afrenta a los mandamientos constitucionales. Es un delito contemplado en el C¨®digo Penal y una verdadera afrenta religiosa a los valores cristianos" El diputado se basa en el art¨ªculo 208 del C¨®digo Penal de Brasil para denominar a la producci¨®n como "vilipendio". Una portavoz de Netflix no quiso manifestarse sobre dicha invitaci¨®n, pero afirm¨® a EL PA?S que ¡°Porta dos Fundos siempre ha tenido una visi¨®n m¨¢s sat¨ªrica e irreverente del humor, y Netflix apoya la libertad creativa de los artistas con los que trabaja¡±.
¡°Siempre nos hemos enfrentado a esas cr¨ªticas, pero este a?o ha sido diferente, lo que dice mucho sobre la homofobia en nuestro pa¨ªs. En el especial que hicimos el a?o pasado. Jes¨²s llegaba a torturar a gente y no gener¨® ni una d¨¦cima parte del esc¨¢ndalo de ahora, cuando solo es gay¡±, comenta Duvivier. Se beber, n?o ceie (una especie de Resac¨®n en Las Vegas en Jerusal¨¦n), el especial navide?o del a?o pasado, retrataba a un Jes¨²s s¨¢dico en su ¨²ltima cena y acaba de ganar el Emmy Internacional como mejor comedia del a?o. Ambas obras llevan la firma de Porchat, a quien Duvivier describe como el ¡°guionista b¨ªblico¡± de Porta dos Fundos. ¡°Quiz¨¢s por haber estudiado toda su vida en un colegio cat¨®lico¡±, a?ade.
Duvivier est¨¢ de acuerdo con la posici¨®n de Netflix. ¡°Si la obra se hubiera realizado con dinero p¨²blico, o si la echaran en un canal de televisi¨®n en abierto, el debate podr¨ªa tener alg¨²n sentido. Pero es una producci¨®n en una plataforma de streaming bajo demanda, es decir, uno no solo tiene que pagar para verla, sino que tambi¨¦n tiene que pulsar un bot¨®n para mirar el especial. Esas personas tienen anhelos tir¨¢nicos y autoritarios al querer legislar sobre qu¨¦ pueden ver los dem¨¢s¡±, dice el int¨¦rprete del hijo de Dios. Es m¨¢s, ¨¦l rechaza la posibilidad de dar explicaciones en la C¨¢mara, si le llamaran. ¡°Pero Jes¨²s ir¨ªa. Yo ir¨ªa como personaje¡±.
Mientras la pol¨¦mica contin¨²a, Porta dos Fundos, como era de esperar, dice que no va a recular. Sobre el ataque a su sede, los productores dicen "el amor prevalecer¨¢ junto con la libertad de expresi¨®n". D¨ªas antes, el grupo public¨® un v¨ªdeo que ironiza la ofensiva conservadora. Jes¨²s aparece triste, en una Iglesia, charlando con un cura sobre las burlas de las que ha sido objeto por parte de los ¡°chicos de Porta dos Fundos¡± y sobre su deseo de venganza. Ambos llegan a hablar del problema de los refugiados en Siria y del hambre en ?frica, pero Cristo tiene ¡°prioridades¡±: ¡°Lo que importa ahora en el mundo son los chistes. Vamos por partes¡±, dice. En otro momento, afirma que no puede hacer nada contra los comediantes, y a?ade: "Por eso me hacen falta curas y pastores para que me defiendan en la Tierra¡±.
"La sexualidad es lo de menos"
El Cristo de este a?o de Porta dos Fundos es bondadoso, incluso ingenuo, y se queda desconcertado cuando sus padres, Mar¨ªa y Jos¨¦, le hacen una revelaci¨®n sorprendente: ¨¦l, en realidad, es hijo de Dios y su misi¨®n es predicar la palabra del Padre por todo el mundo. ¡°La sexualidad de Jes¨²s es lo de menos. La idea es mostrar a un ser humano normal y corriente en duda sobre su vocaci¨®n¡±, dice uno de los protagonistas, Duvivier, quien considera que los sectores conservadores ¡°se han sentido m¨¢s empoderados en el derecho de imponer sus opiniones sobre los dem¨¢s¡±, tras las elecciones de 2018, que llevaron al poder a Bolsonaro.
De hecho, hasta para aquellos a los que les gusta acusar con el dedo y gritar "blasfemia", la sexualidad de Jes¨²s es lo de menos en esta historia, que retrata a Mar¨ªa y a Dios como amantes il¨ªcitos ¡ªy, s¨ª, carnales¡ª, a Jos¨¦ como un carpintero torpe y a los Reyes Magos como unos mentirosos que intentan colar jam¨®n por "soja criada en el campo". Entre otras transgresiones, podemos ver a Mar¨ªa fum¨¢ndose un porro, a Melchor contratando a una prostituta y a Jes¨²s en una reuni¨®n alucinatoria con Buda, Krishna, Jah y una divinidad alien¨ªgena de los cienci¨®logos despu¨¦s de beberse un "t¨¦ especial".
Los indicios de una posible relaci¨®n entre Cristo y Orlando quedan subentendidos cuando este ¨²ltimo describe c¨®mo se conocieron: "Me estaba ba?ando en un oasis, desnudo", dice Orlando, cuando Jes¨²s intenta interrumpirle:
¡ªEntonces fui a pedirle informaci¨®n. Eso fue lo que pas¨®. Le ped¨ª informaci¨®n y me la dio.
¡ªSe la di, faltar¨ªa m¨¢s. Cuando me piden algo, lo doy.
Algunas de las pocas voces ausentes en las cr¨ªticas a la producci¨®n humor¨ªstica provienen de miembros de la comunidad LGTB, ya que Orlando se revela como Lucifer, que se disfraz¨® para seducir a Jes¨²s y, as¨ª, dominar el mundo. Aparentemente, no pasa nada si el diablo es gay. Para algunos, tal vez, sea incluso algo esperado.
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