La Corte Penal Internacional da luz verde a la investigaci¨®n de cr¨ªmenes de guerra en Afganist¨¢n

La fiscal¨ªa de la Corte Penal Internacional (CPI) podr¨¢ indagar los supuestos cr¨ªmenes de guerra y contra la humanidad cometidos en Afganist¨¢n, tanto por los soldados de Estados Unidos y miembros de la CIA, como por los talibanes y las fuerzas afganas entre 2003 y 2014. Los jueces de Apelaci¨®n de la Corte han facultado este jueves a la fiscal jefe, Fatou Bensouda, para que proceda con las investigaciones, revocando as¨ª una decisi¨®n anterior de los jueces de la Sala de Cuestiones Preliminares. En 2019, estos consideraron ¡°extremadamente limitadas las perspectivas de un proceso exitoso que sirva los intereses de la justicia, dada la situaci¨®n en Afganist¨¢n¡±. Estados Unidos no es miembro de la CPI y ha mostrado repetidas veces su rechazo a que sus tropas o servicios de espionaje puedan ser interrogados. Afganist¨¢n s¨ª forma parte de la misma.

Fatou Bensouda llevaba desde 2017 intentado que los jueces autorizaran la investigaci¨®n, y un a?o antes present¨® un informe sobre el curso de los ex¨¢menes preliminares que llevaba a cabo. All¨ª se?al¨® que hab¨ªa ¡°base razonable para creer que los militares estadounidenses hab¨ªan aplicado torturas en centros de detenci¨®n emplazados en Afganist¨¢n y gestionados por la CIA¡±. El mismo estudio resaltaba indicios de cr¨ªmenes de guerra cometidos por parte del Gobierno afgano y los talibanes. Piotr Hofmanski, presidente de la Sala de Apelaciones, ha criticado este jueves la postura de sus colegas de la Corte por descartar las posibilidades de ¨¦xito de una investigaci¨®n como la que ¨¦l ha aprobado ahora. Seg¨²n ha dicho, ¡°solo deb¨ªan considerar si hab¨ªa fundamentos para proceder, y si la Corte ten¨ªa competencia sobre los cr¨ªmenes¡±. Ambos requisitos se cumplen aqu¨ª.

La fiscal¨ªa sostiene que hay indicios fundados para creer que ¡°miembros de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos perpetraron cr¨ªmenes de guerra de tortura y crueldad, atentados contra la dignidad personal, violencia sexual y violaciones¡±, desde 2013. Entre los delitos se incluyen las supuestas torturas padecidas por 61 prisioneros a manos de las tropas de EE UU. Los mismos informes, presentados por Bensouda, se?alan ¡°a miembros de la CIA, por delitos similares en Afganist¨¢n, y en otros Estados (Polonia, Rumania y Lituania) contra acusados de terrorismo; en particular contra 27 personas¡±. La fiscal apunta de igual forma hacia los talibanes y las autoridades afganas, ¡°por supuestas muertes en masa y torturas de prisioneros¡±. Entre los presuntos autores incluye al grupo guerrillero Haqqani, cercano a los talibanes y activo tambi¨¦n en Pakist¨¢n.

El a?o pasado, cuando la investigaci¨®n fue rechazada, Mike Pompeo, secretario de Estado de EE UU, advirti¨® de que ser¨ªan revocados los visados que pudieran solicitar los miembros de la Corte encargados de las investigaciones en Afganist¨¢n. La fiscal Bensouda fue la primera afectada, pero asegur¨® que seguir¨ªa adelante ¡°sin miedo y sin compromisos¡±. En 2018, John Bolton, entonces asesor de Seguridad Nacional del presidente Donald Trump, subray¨® que ¡°no cooperaremos con la Corte; no le prestaremos asistencia; no nos uniremos a ella; dejaremos que se muera sola¡±, en un discurso pronunciado en Washington. Como Afganist¨¢n s¨ª es miembro de la CPI, los ciudadanos estadounidenses que hayan cometido delitos all¨ª pueden ser perseguidos por la justicia internacional.