El coronavirus desata una tormenta perfecta en Venezuela
La emergencia ahonda la precariedad de un pa¨ªs golpeado por una crisis estructural. Human Rights Watch no se cree los datos oficiales y pide "una respuesta liderada por la ONU¡±
En Venezuela se ha desatado la tormenta perfecta. Con la emergencia sanitaria del coronavirus se ha a?adido a la inestabilidad pol¨ªtica y a la precariedad social un c¨®ctel de escasez de gasolina, colapso de los servicios, cortes de luz y agua que multiplican las graves disfunciones del pa¨ªs. Desde que Nicol¨¢s Maduro sucediera al expresidente Hugo Ch¨¢vez, en 2013, m¨¢s de cinco millones de venezolanos han migrado en busca de oportunidades. Aunque en los ¨²ltimos meses decenas de miles de personas han regresado por falta de recursos frente a las restricciones y las cuarentenas decretadas por distintos Gobiernos latinoamericanos, el flujo migratorio desbord¨® a la regi¨®n y es a¨²n hoy uno de sus principales desaf¨ªos.
Los datos oficiales de la crisis de la covid-19 sit¨²an a Venezuela entre los pa¨ªses del mundo con menos casos, con poco m¨¢s de 1.000 contagios y una decena de muertes, pero detr¨¢s de esos n¨²meros hay un sistema sanitario sin capacidad de detecci¨®n y la habitual falta de transparencia del r¨¦gimen chavista. Distintas asociaciones, profesionales vinculados a la oposici¨®n y la Academia de Ciencias F¨ªsicas, Naturales y Matem¨¢ticas cuestionaron esa informaci¨®n. Esta ¨²ltima instituci¨®n advirti¨® sobre el retraso del desarrollo de la enfermedad en el pa¨ªs e incluso las cifras ofrecidas por el Gobierno reflejan un incremento del 40% de los casos durante la semana pasada.
Mientras tanto, millones de venezolanos tienen que lidiar con una crisis de combustible sin precedentes. El expolio a la petrolera estatal, PDVSA, el deterioro de las refiner¨ªas y la mala gesti¨®n abocaron a Maduro a pedir ayuda a Ir¨¢n, uno de sus principales aliados internacionales. Teher¨¢n envi¨® cinco buques con 1,5 millones de barriles de combustible. Pero a eso se ha sumado en los ¨²ltimos d¨ªas la interrupci¨®n del suministro de agua, que se ha convertido en un drama sobre todo en los hospitales. La cat¨¢strofe econ¨®mica y la hiperinflaci¨®n completan el panorama de una crisis que es estructural desde hace a?os.
¡°La crisis humanitaria en Venezuela y el colapso del sistema de salud han generado una peligrosa situaci¨®n que favorece una r¨¢pida propagaci¨®n del virus en la poblaci¨®n en general, condiciones de trabajo inseguras para el personal de salud y un alto ¨ªndice de mortalidad entre pacientes que necesitan tratamiento en hospitales¡±, afirma Kathleen Page, doctora y profesora de la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins. Seg¨²n su an¨¢lisis, recogido en un informe de Human Rights Watch (HRW) publicado este martes, estas premisas pueden "provocar que m¨¢s personas intenten irse del pa¨ªs¡±, desbordando as¨ª a los sistemas sanitarios de los pa¨ªses vecinos. La ONG pide que Estados Unidos, la Uni¨®n Europea y los pa¨ªses miembros del Grupo de Lima presionen a las autoridades venezolanas para que ¡°permitan el ingreso en Venezuela de una respuesta humanitaria a gran escala liderada por la ONU¡±.
¡°Creemos que las cifras, las estad¨ªsticas que proporciona el gobierno de Venezuela, las estad¨ªsticas de Maduro, son absolutamente absurdas¡±, manifest¨® Jos¨¦ Miguel Vivanco. El director para las Am¨¦ricas de HRW considera que ¡°para contribuir a una respuesta efectiva a la covid-19 en Venezuela, los Gobiernos preocupados por la situaci¨®n venezolana deber¨ªan financiar las iniciativas humanitarias de la ONU que aseguren que la ayuda se distribuya de manera apol¨ªtica¡±. ¡°Pero para que la ayuda llegue efectivamente al pueblo venezolano¡±, agrega, "la m¨¢xima responsabilidad recae en las autoridades que responden a Maduro, por ello hay que presionarlas para que garanticen pleno acceso al Programa Mundial de Alimentos y permitan que los actores humanitarios y m¨¦dicos puedan trabajar sin temor a represalias¡±.
La discusi¨®n en torno a la ayuda humanitaria lleva a?os enfrentando al Gobierno y a la oposici¨®n. Desde la etapa en que el principal rival de Maduro era Henrique Capriles, las fuerzas cr¨ªticas con el chavismo pidieron la apertura de un corredor a trav¨¦s de la frontera para permitir el ingreso de medicinas y alimentos. El a?o pasado, un mes despu¨¦s de que Juan Guaid¨® se proclamara presidente interino, se pervirti¨® ese instrumento con el intento de introducir en camiones con material sanitario y suplementos nutricionales por la ciudad colombiana de C¨²cuta. La operaci¨®n, promovida por el Gobierno de Iv¨¢n Duque y la Administraci¨®n de Donald Trump, deriv¨® en una batalla campal y fracas¨®. Desde entonces la situaci¨®n se precipit¨®.
A pesar de que la emergencia viene de lejos y tiene que ver esencialmente con la gesti¨®n del r¨¦gimen, las sanciones internacionales, especialmente las impuestas por Washington, dificultan ahora la cooperaci¨®n y repercuten en la poblaci¨®n. HRW solicita a Estados Unidos fijar unas reglas de juego muy claras. Por ejemplo, ¡°establecer claramente que nadie ser¨¢ penalizado por financiar o proveer asistencia humanitaria a Venezuela en este per¨ªodo de crisis de salud p¨²blica y reiterar que la asistencia humanitaria est¨¢ exenta de sanciones¡±. Adem¨¢s, ¡°establecer procedimientos para que las empresas y organizaciones puedan enviar asistencia humanitaria a Venezuela sin controles excesivamente burocr¨¢ticos ni demoras innecesarias¡± y, por ¨²ltimo, ¡°apoyar un esfuerzo humanitario robusto, liderado por la ONU, en Venezuela¡±.
Lo que queda claro es que las medidas adoptadas por Caracas frente al coronavirus son insuficientes. Y los controles de la estricta cuarentena decretada por Maduro est¨¢n en manos de las fuerzas policiales, a menudo se?aladas por sus abusos por organismos de defensa de los derechos humanos, incluida Naciones Unidas. ¡°Quienes hacen que se cumpla con la cuarentena son la polic¨ªa, incluyendo una fuerza especial llamada FAES implicada en el pasado en ejecuciones extrajudiciales, las Fuerzas Armadas y grupos armados partidarios del Gobierno, llamados ¡®colectivos¡¯. Seg¨²n organizaciones locales, esto ha dado lugar a detenciones arbitrarias y hostigamiento de las comunidades¡±. Tambi¨¦n por esta raz¨®n, seg¨²n la ONG, no cabe esperar a que sea demasiado tarde.
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