El ministro de Educaci¨®n brasile?o renuncia antes de jurar el cargo, acusado de falsificar su curr¨ªculum

El nombre de Carlos Alberto Decotelli da Silva se ve¨ªa, entre los especialistas en educaci¨®n y algunos sectores del Gobierno, como una correcci¨®n en la ruta del Ministerio de Educaci¨®n de Brasil tras el paso problem¨¢tico de su predecesor, Abraham Weintraub. Pero todo se esfum¨® antes incluso de que jurara el cargo. Como el economista no pudo probar las cualificaciones que constaban en su curr¨ªculum, cuestionadas por las instituciones donde afirmaba haber cursado el doctorado, el posdoctorado y haber trabajado como profesor, el presidente Jair Bolsonaro se vio obligado a posponer la jura. Ante la presi¨®n por haber sido descubierta la falsificaci¨®n, el ministro renunci¨® el martes, cinco d¨ªas despu¨¦s de su nombramiento.

La primera inconsistencia provino de la Universidad Nacional de Rosario, en Argentina, que inform¨® que Decotelli no obtuvo el t¨ªtulo de doctorado porque suspendi¨® la tesis. A continuaci¨®n, la universidad alemana de Wuppertal neg¨® que el economista hubiera cursado el posdoctorado en la instituci¨®n. Este martes, la Fundaci¨®n Get¨²lio Vargas emiti¨® una nota para aclarar que el ahora exministro nunca form¨® parte del cuerpo docente efectivo, sino que solo imparti¨® clases como colaborador, en cursos de formaci¨®n continua vinculados a la instituci¨®n. En su curr¨ªculum, Decotelli afirmaba que hab¨ªa sido profesor all¨ª entre 2001 y 2018. La fundaci¨®n investiga adem¨¢s una denuncia de plagio en el trabajo de fin de m¨¢ster, que se comprobar¨¢ cuando los directores vuelvan a las actividades presenciales y, en el caso de confirmarse, se podr¨ªa abrir un proceso disciplinario y, en ¨²ltima instancia, anularse el t¨ªtulo.

A trav¨¦s del Ministerio de Educaci¨®n, Decotelli se comprometi¨® a revisar el trabajo de fin de m¨¢ster y neg¨® que, deliberadamente, hubiera omitido las referencias a otros investigadores. Tambi¨¦n admiti¨® que no hab¨ªa completado los trabajos necesarios para obtener los t¨ªtulos de doctorado y postdoctorado. El economista no consigui¨® mantener el cargo a pesar de que corrigi¨® su curr¨ªculum y recibi¨® el apoyo de Bolsonaro, quien relativiz¨® la falsificaci¨®n al calificarla de ¡°inadecuaciones curriculares¡± y elogi¨® la ¡°capacidad [del ministro] para construir una educaci¨®n inclusiva y oportunidades para todos¡±.

Sin conmoverse con el voto de confianza dado por el presidente, la c¨²pula del Ejecutivo y algunos diputados oficialistas pidieron p¨²blicamente la dimisi¨®n de Decotelli. ¡°El Gobierno tiene que hacer una criba en el ¨¢rea responsable de analizar la informaci¨®n y despedir a los incompetentes. Adem¨¢s, debe repensarse el nombramiento de Decotelli. Un ministro de Educaci¨®n no puede asumir el cargo con todo este descr¨¦dito¡±, declar¨® el diputado federal Paulo Eduardo Martins, del Partido Social Cristiano, que luego celebrar¨ªa la renuncia. ¡°Mejor para Brasil, para el presidente y para Decotelli¡±.

Al haber sido de la Marina, el ministro pas¨® por el cedazo del ala militar, que cada vez tiene m¨¢s influencia en el Gobierno de Bolsonaro. Antes de ser nombrado para la cartera de Educaci¨®n, Decotelli presidi¨® el Fondo Nacional de Desarrollo Educativo entre febrero y agosto de 2019, antes de que Bolsonaro firmara un decreto que estipula que los nombramientos a cargos de confianza deben seguir criterios t¨¦cnicos, como tener experiencia profesional en el ¨¢rea o el t¨ªtulo de doctorado. Sin embargo, los candidatos son los que tienen que proporcionar la informaci¨®n curricular, sin necesidad de comprobarla.

La falta de mecanismos para controlar las cualificaciones hace que los criterios pol¨ªticos a menudo se superpongan a los t¨¦cnicos en los nombramientos gubernamentales. Tras la dimisi¨®n de Weintraub, Decotelli se gan¨® el rechazo inmediato del n¨²cleo gubernamental m¨¢s estrechamente relacionado con el gur¨² Olavo de Carvalho, que hab¨ªa apadrinado a los dos ministros anteriores, pero acab¨® perdiendo el pulso por el Ministerio de Educaci¨®n. Las cr¨ªticas p¨²blicas de algunos aliados bolsonaristas se sumaron a las de la oposici¨®n y las instituciones educativas.

¡°Es como m¨ªnimo grotesco haber nombrado ministro de Educaci¨®n a alguien que miente en su curr¨ªculum y que, adem¨¢s, llega diciendo que tiene un perfil t¨¦cnico, intentando alejarse del car¨¢cter pol¨ªtico e ideol¨®gico vergonzoso del Gobierno que accedi¨® a integrar¡±, manifest¨® el movimiento de la Campa?a Nacional por la Educaci¨®n.

Sin embargo, antes de la controversia sobre el curr¨ªculum, el nombre de Decotelli hab¨ªa sido bien recibido por los l¨ªderes del sector. Organizaciones no gubernamentales como Todos por la Educaci¨®n se sorprendieron positivamente con el perfil m¨¢s t¨¦cnico que ideol¨®gico del economista, a diferencia del anterior ministro, Abraham Weintraub. Pero la primera impresi¨®n se vino abajo con la deconstrucci¨®n de su curr¨ªculum. ¡°Es grave que haya tantas mentiras. Que el ministro de Educaci¨®n mienta sobre su formaci¨®n acad¨¦mica es muy grave. Se pierde la confianza para volver a construir puentes con los Estados, los Ayuntamientos, el Congreso y la sociedad¡±, afirm¨® Priscila Cruz, presidenta de Todos por la Educaci¨®n.

Para Luiz Carlos de Freitas, investigador y profesor jubilado de la Universidad Estatal de Campinas, el espejismo de que Decotelli podr¨ªa ser un ministro t¨¦cnico y conciliador, a pesar de su corta experiencia en el ¨¢rea de pol¨ªticas p¨²blicas para la educaci¨®n, surgi¨® por la repulsi¨®n generalizada a su predecesor en el cargo. ¡°Tras una gesti¨®n tan tensa como la de Weintraub, cualquier nombre representa un alivio, una esperanza de que, finalmente, va a proponer un gran debate nacional¡±, dice Freitas. El investigador cree que el substituto de Decotelli, independientemente de su perfil o curr¨ªculum, se guiar¨¢ por una visi¨®n mercantilista de la educaci¨®n. ¡°El Gobierno de Bolsonaro est¨¢ compuesto por las fuerzas que lo apoyan. Cuando una adquiere m¨¢s relevancia que otra, el rumbo del Gobierno cambia, pero a¨²n comparten la idea radical de reducir el Estado a cualquier precio. Y, en la educaci¨®n, es atractivo hacer reformas de car¨¢cter empresarial¡±.

La ¨²nica dimisi¨®n por falsificar el curr¨ªculum

Carlos Alberto Decotelli no ha sido el primer miembro de la Administraci¨®n de Bolsonaro expuesto por inflar o falsificar sus cualificaciones curriculares. El ministro de Medio Ambiente, Ricardo Salles, no realiz¨® ning¨²n m¨¢ster en Derecho p¨²blico en la Universidad de Yale, como revel¨® el medio digital The Intercept. Salles atribuy¨® la informaci¨®n a un ¡°error de asesoramiento¡±. Damares Alves, ministra de la Mujer, Familia y Derechos Humanos, indicaba que ten¨ªa un m¨¢ster en Educaci¨®n y Derecho Constitucional y de Familia, aunque nunca lo hubiera cursado, y no especificaba que se trataba de una distinci¨®n religiosa.

Los predecesores de Decotelli en la cartera tambi¨¦n inflaron sus curr¨ªculos. El primer ministro de Educaci¨®n de Bolsonaro, el colombiano naturalizado brasile?o Ricardo V¨¦lez Rodr¨ªguez, ten¨ªa por lo menos 22 errores en su curr¨ªculum, incluso la autor¨ªa de libros que no hab¨ªa escrito, seg¨²n una investigaci¨®n del portal Nexo. A su vez, Abraham Weintraub fue anunciado por el presidente como doctor, aunque solo tiene un m¨¢ster en Administraci¨®n. El peri¨®dico Folha tambi¨¦n comprob¨® que el exministro pon¨ªa en su curr¨ªculum art¨ªculos id¨¦nticos, publicados en dos plataformas diferentes, una pr¨¢ctica conocida como autoplagio.

A pesar de la serie de desmentidos de las instituciones donde Decotelli inform¨® haber trabajado o estudiado, ha sido el ¨²nico miembro de la c¨²pula del Gobierno que ha renunciado tras ser descubierto. El economista hubiese sido el primer ministro negro nombrado por Bolsonaro. ¡°Comenc¨¦ a dise?ar un proyecto para ponerlo en pr¨¢ctica en el Ministerio de Educaci¨®n. Sin embargo, cuestionaron el proyecto por mi inconsistencia curricular que, en el mundo acad¨¦mico, es explicable¡±, justific¨® Decotelli en una entrevista a CNN Brasil. Ha sido el ministro que menos ha permanecido en el cargo, superando a Nelson Teich, que estuvo solo 28 d¨ªas al frente del Ministerio de Sanidad.