Cantante de g¨®spel y cr¨ªtico de la ¡°ideolog¨ªa de g¨¦nero¡±: el gobernador en funciones de R¨ªo de Janeiro se aproxima al bolsonarismo

Si Wilson Witzel tocaba la trompeta, su exvicepresidente y actual gobernador en funciones de R¨ªo de Janeiro, Cl¨¢udio Castro, tambi¨¦n tiene afinidad con la m¨²sica. Miembro de la Renovaci¨®n Carism¨¢tica, una corriente dentro de la Iglesia cat¨®lica, es un cantante de g¨®spel que ha lanzado dos ¨¢lbumes en solitario y forma parte del grupo En el nombre del Padre. Mientras que los videoclips en los que suelta la voz para alabar al Se?or se han reproducido hasta 15.000 veces en su canal de YouTube, la secci¨®n dedicada a su carrera pol¨ªtica es m¨¢s discreta: su discurso de investidura como vicegobernador lo vieron solo 154 personas. Hasta la destituci¨®n de Witzel el viernes pasado, Castro desempe?aba su funci¨®n de n¨²mero dos de forma discreta. Pero ahora, y a¨²n m¨¢s despu¨¦s de haber sido confirmado en el cargo por al menos seis meses por el Superior Tribunal de Justicia, atrae toda la atenci¨®n.

Nacido en Santos, ciudad de la costa de S?o Paulo, Castro fue elegido concejal por R¨ªo en 2016, donde defendi¨® la prohibici¨®n del aborto: ¡°Hemos recibido la noticia de que el PSOL [Partido Socialismo y Libertad] ha solicitado que el aborto se permita en Brasil hasta la duod¨¦cima semana. ?No se ganan unas elecciones y luego se va al Supremo para hacer activismo jur¨ªdico! El derecho inviolable a la vida es una cl¨¢usula inalterable de nuestra Constituci¨®n¡±, afirm¨® entonces en un mitin. Castro tambi¨¦n utiliza el t¨¦rmino ¡°ideolog¨ªa de g¨¦nero¡±, una muletilla de la extrema derecha que busca atacar el concepto de identidad de g¨¦nero.

En el medio pol¨ªtico de R¨ªo de Janeiro, a Castro se le considera un pacificador. Ha hecho de interlocutor entre el Legislativo y el Ejecutivo en este periodo de turbulencias en el Gobierno del Estado de R¨ªo de Janeiro, desde que se abri¨® el proceso de destituci¨®n contra Witzel en la Asamblea Legislativa, en junio. Como vicegobernador, coordin¨® el trabajo del Instituto de Seguridad P¨²blica de R¨ªo, responsable de desarrollar metodolog¨ªas y analizar datos del ¨¢rea.

Desde que asumi¨® el cargo de jefe del Ejecutivo estatal de forma interina, Castro se ha esforzado por dar una p¨¢tina de estadista a su trabajo. En las redes sociales habla de educaci¨®n (¡°Estamos planeando reabrir las escuelas del Estado para los alumnos que no tienen acceso a Internet¡±), econom¨ªa (¡°?He pedido a los secretarios de Trabajo, Econom¨ªa y Desarrollo Econ¨®mico y Social que elaboren un plan para crear puestos de trabajo!¡±) y divulga reuniones de trabajo con el alcalde Marcelo Crivella (¡°En una reuni¨®n con el alcalde alineamos que nuestros equipos deliberar¨¢n conjuntamente la reapertura de la econom¨ªa y el retorno de las actividades escolares¡±).

A pesar del esfuerzo que hace en las redes, se considera que Castro no tiene mucho capital pol¨ªtico. Parte de esta debilidad se debe a que tambi¨¦n se le cit¨® en la confesi¨®n de Edmar Santos, exsecretario de Sanidad que fue detenido por participar en el sistema de corrupci¨®n atribuido a Witzel. Despu¨¦s de ser detenido, Santos denunci¨® a su exjefe y a otros miembros del Gobierno. La Fiscal¨ªa General de la Rep¨²blica afirma que Castro, a quien tambi¨¦n se le investiga en la operaci¨®n que termin¨® con la destituci¨®n del gobernador, es sospechoso de ayudar a desviar los recursos de la Secretar¨ªa de Sanidad.

Una victoria para el clan Bolsonaro

Pol¨ªticamente, la decisi¨®n del Superior Tribunal de Justicia de suspender a Witzel durante 180 d¨ªas y el nombramiento de Castro como gobernador interino es una victoria para el clan Bolsonaro. Castro ya ha se?alado que quiere acercarse a la familia del presidente tras meses de fricciones y acusaciones entre el anterior ocupante del Palacio de Guanabara y el del Planalto. La expectativa es que, con Castro a cargo del Estado, las investigaciones en R¨ªo que involucran al senador Fl¨¢vio Bolsonaro por un supuesto sistema de desv¨ªo de dinero no traigan grandes sorpresas a la familia presidencial. Est¨¢ en manos del nuevo l¨ªder del Ejecutivo estatal nombrar al jefe de la Fiscal¨ªa de R¨ªo y de la Polic¨ªa Civil, que coordinan las investigaciones.

Para permanecer en el cargo, Castro apuesta por acercarse a Bolsonaro. Seg¨²n el peri¨®dico Folha de S.Paulo, anunci¨® a sus interlocutores que estar¨ªa dispuesto a dejar el partido del gobernador suspendido (presidido por el pastor Everaldo, detenido el viernes y actualmente adversario de los Bolsonaro) y dijo que no tomar¨ªa medidas dr¨¢sticas sin consultar previamente al Planalto. El gobernador en funciones incluso habr¨ªa se?alado que tiene la intenci¨®n de dejarse aconsejar por el clan del presidente con relaci¨®n a la sucesi¨®n en la Fiscal¨ªa de R¨ªo de Janeiro. A diferencia del Ministerio P¨²blico Federal, Castro est¨¢ obligado por ley a elegir entre los tres fiscales designados por el gremio. En la Fiscal¨ªa de R¨ªo se procesan los casos que involucran a la familia Bolsonaro, entre ellos la investigaci¨®n de un supuesto esquema de desv¨ªo de dinero en el gabinete de Fl¨¢vio Bolsonaro en la ¨¦poca en que era diputado estatal.

Esta investigaci¨®n, que incluso salpic¨® a la primera dama cuando sali¨® a la luz la informaci¨®n de que recibi¨® 89.000 reales (unos 17.000 d¨®lares) de Fabr¨ªcio Queiroz (antiguo asesor de Fl¨¢vio y agente principal del esc¨¢ndalo), es crucial para el Planalto. La ruptura entre el clan presidencial y Witzel, que fue elegido siguiendo la estela del bolsonarismo, est¨¢ relacionada con las investigaciones realizadas por la Fiscal¨ªa de R¨ªo y la Polic¨ªa Civil, y con el caso del asesinato de la concejala Marielle Franco y su ch¨®fer Anderson. Para el presidente, el gobernador suspendido, a quien se refiere como traidor, lo persigue tanto a ¨¦l como a sus hijos por medio de las instituciones estatales. El hecho que agudiz¨® la discordia fue la filtraci¨®n, en octubre de 2019, del audio de la porter¨ªa de la urbanizaci¨®n Vivendas da Barra, donde vive el mandatario. En la grabaci¨®n, uno de los acusados de asesinar a la concejala habl¨® con el portero, quien le habr¨ªa dicho a la polic¨ªa que el visitante iba a casa del ¡°se?or Jair¡±. El presidente estaba en Brasilia en esa fecha.

Bolsonaro se defendi¨® atacando: ¡°Seg¨²n tengo entendido, el se?or Witzel llevaba el caso con el representante de la Polic¨ªa Civil para intentar incriminarme o al menos manchar mi nombre con esta falsa acusaci¨®n¡±. El presidente fue m¨¢s all¨¢ y atribuy¨® la elecci¨®n del gobernador a la popularidad de su familia. ¡°[Witzel] nos presion¨® a Fl¨¢vio Bolsonaro y a m¨ª para ganar las elecciones a gobernador de R¨ªo de Janeiro. Tras la victoria, nos eligi¨® a Fl¨¢vio y a m¨ª como enemigos¡±, dijo. Witzel neg¨® cualquier filtraci¨®n y afirm¨® que no entra ¡°en el terreno de las ilegalidades¡±.

Las muestras de acercamiento de Castro han sido bien recibidas en Brasilia. El lunes, el gobernador en funciones celebr¨® en las redes sociales una llamada que habr¨ªa recibido del senador Fl¨¢vio Bolsonaro. ¡°Acabo de recibir una llamada del senador, que se ha dispuesto a ayudar al Estado de R¨ªo de Janeiro en la renovaci¨®n del R¨¦gimen de Recuperaci¨®n Fiscal. ?Di¨¢logo! ?Todo por R¨ªo!¡± escribi¨®.