Los negros ganan impulso en la pol¨ªtica en Brasil con cuotas para fondos de campa?a electoral

En 2018, casi la mitad de los candidatos al Legislativo de Brasil eran personas de raza negra, pero al final solo el 4% fueron elegidas. Una de ellas fue Benedita da Silva, del Partido de los Trabajadores (PT), que renov¨® su mandato como diputada federal y ahora es precandidata a la alcald¨ªa de R¨ªo de Janeiro. Insatisfecha con la baja representatividad de los negros en la pol¨ªtica, a pesar de sumar m¨¢s del 50% de la poblaci¨®n de Brasil, present¨® una consulta al Tribunal Superior Electoral (TSE) exigiendo una distribuci¨®n m¨¢s equitativa de los fondos de campa?a entre los candidatos negros y blancos. La petici¨®n fue aprobada por la mayor¨ªa de los magistrados el 25 de agosto. A partir de 2022, la distribuci¨®n de los fondos y el tiempo de propaganda tendr¨¢ que ser proporcional al n¨²mero de candidatos negros.

¡°Es un logro que interesa no solo a los negros que se presentan a las elecciones, sino a todas las personas que repudian el racismo en nuestro pa¨ªs¡±, dice Benedita da Silva, exministra de Asistencia Social del primer Gobierno de Lula da Silva (2003-2006). ¡°Hemos dado el primer paso para empezar a reducir el abismo que existe entre los candidatos negros y los blancos¡±. En la consulta, el TSE reconoci¨® que la falta de negros en los cargos pol¨ªticos deb¨ªa abordarse con la instituci¨®n de una norma espec¨ªfica. ¡°Hay momentos en que cada uno tiene que elegir de qu¨¦ lado de la historia quiere estar. El TSE est¨¢ del lado de los que luchan contra el racismo¡±, dijo Lu¨ªs Roberto Barroso, el magistrado ponente.

La ONG Educafro tambi¨¦n fue signataria de la consulta en el TSE. Para Frei David, coordinador de la organizaci¨®n, el que se haya aprobado la proporcionalidad es el resultado de una lucha hist¨®rica del movimiento negro por ganar terreno en las instituciones. ¡°El dinero que Brasil da a cada partido lo manipulan los caciques de la pol¨ªtica que, generalmente, ponen a sus familiares en estos espacios¡±, dice el activista por la igualdad racial. ¡°Es hora de hacer justicia al pueblo negro y llevar la equidad al campo pol¨ªtico¡±.

En 2018, el profesor Douglas Belchior, de la Uneafro (Uni¨®n de N¨²cleos de Educaci¨®n Popular para Negras/os y Clase Trabajadora) y la Coalici¨®n Negra por Derechos, plante¨® la cuesti¨®n de la mala distribuci¨®n de los recursos de los partidos para las candidaturas de negros. En ese momento, era candidato a diputado federal por el Partido Socialismo y Libertad (PSOL) en S?o Paulo, y acus¨® p¨²blicamente al partido de izquierda de concentrar los recursos en los candidatos blancos. ¡°Los partidos, como todas las instituciones de Brasil, est¨¢n atravesados por el racismo. Pero los de la izquierda, como el PSOL, tienen la obligaci¨®n de estar atentos a la agenda de representatividad de los negros¡±, dice Belchior, que va m¨¢s all¨¢ en sus cuestionamientos. ¡°?Cu¨¢ntos candidatos vinculados a los movimientos negros tenemos? ?Cu¨¢ntos l¨ªderes negros ha perdido nuestro pa¨ªs por falta de apoyo y estructura? ?Cu¨¢nto ha retrasado esto la lucha por los derechos sociales? Yo solo fui otra figura perjudicada por la l¨®gica racista de los partidos¡±. En las ¨²ltimas elecciones, obtuvo 46.026 votos, pero no sali¨® elegido debido al coeficiente electoral (resultado de la divisi¨®n entre el n¨²mero de votos obtenido por una candidatura y el total de esca?os en la circunscripci¨®n).

Aunque celebra la decisi¨®n del Tribunal Superior Electoral, Belchior lamenta que la aplicaci¨®n de la regla se haya dejado para el 2022. ¡°Hay una incoherencia por parte del tribunal al evaluar y reconocer la pertinencia de la medida, pero no aplicarla de inmediato. ?Por qu¨¦ esperar otros dos a?os para reparar una injusticia hist¨®rica?¡±, argumenta el profesor. ¡°Ahora la responsabilidad recae en los partidos. Ya es una verg¨¹enza que se vean obligados por ley a hacer una distribuci¨®n proporcional de los recursos. Hay que exigirles que tomen medidas en las elecciones municipales¡±.

El PSOL, que Belchior critic¨® hace dos a?os, anunci¨® a principios de agosto, antes de la decisi¨®n del TSE, un nuevo reglamento para distribuir el fondo de campa?a entre sus candidatos, dando prioridad a las mujeres (que obtendr¨ªan el 30% de los recursos) y a los negros (el 50%). De esta manera, los directorios municipales del partido est¨¢n obligados a garantizar que un candidato negro reciba un 50% m¨¢s que un candidato blanco. ¡°Esta decisi¨®n altera el poder. No tener acceso a los recursos hace inviables nuestras candidaturas. Cuando cambiamos los porcentajes para afirmarlas, estamos diciendo que, en la pr¨¢ctica, este es nuestro compromiso. Es reinventar la forma de hacer pol¨ªtica¡±, celebr¨® ?urea Carolina, la primera diputada elegida por el partido en Minas Gerais y precandidata a la alcald¨ªa de Belo Horizonte.

Este a?o, el profesor de la Uneafro no ser¨¢ candidato, pero apoya una candidatura colectiva de negros de la ONG en S?o Paulo. Inspirado por una iniciativa de los Estados Unidos, el movimiento lanzar¨¢ la plataforma Los Votos Negros Importan para recaudar fondos para candidaturas antirracistas.

Otros l¨ªderes pol¨ªticos y del movimiento negro elogiaron la decisi¨®n, como el senador Paulo Paim, del PT. Autor del Estatuto de Igualdad Racial fue, en su anterior mandato, el ¨²nico negro elegido en el Senado. ¡°Queremos un parlamento donde se vean hombres y mujeres, blancos y negros, en la misma proporci¨®n¡±, dice Paim.

Oportunidades para eludir el sistema

Desde 1997, la ley exige a los partidos que al menos un 30% de las candidaturas sean de mujeres. Sin embargo, en las ¨²ltimas d¨¦cadas, la reserva de vacantes para mujeres no se ha reflejado en la misma medida en los puestos p¨²blicos ya que, para eludir el sistema, los partidos utilizan testaferros para seguir destinando gran parte de los fondos de campa?a a los hombres. Con la distribuci¨®n proporcional de los fondos, tambi¨¦n existe la preocupaci¨®n de que, debido a la falta de representatividad en los cargos ejecutivos de los partidos, la norma no consiga corregir las desigualdades de la financiaci¨®n de las campa?as.

¡°No podemos correr el riesgo de repetir las distorsiones de las cuotas para mujeres. Por eso, adem¨¢s de la medida, es necesario que los partidos creen sus propios reglamentos para garantizar que se cumple la ley¡±, se?ala Douglas Belchior. Para estas elecciones, el TSE prev¨¦ cambios para intentar cohibir fraudes en las candidaturas femeninas. Una vez finalizada la fase de establecer coaliciones, los partidos tendr¨¢n que enviar sus listas proporcionales y las candidatas deber¨¢n presentar una autorizaci¨®n escrita. La Justicia Electoral podr¨¢ suspender las candidaturas que presenten irregularidades. Seg¨²n los l¨ªderes del movimiento negro que participaron en la creaci¨®n de la consulta al TSE, las posibilidades de fraude en la asignaci¨®n de recursos tienden a ser menores. La nueva norma no prev¨¦ una cuota, sino la distribuci¨®n proporcional de los fondos de campa?a y de la propaganda electoral.

Aunque no haya reserva de plazas para candidatos negros, el concejal Fernando Holiday, de S?o Paulo, que se define como un parlamentario negro que ¡°nunca se ha rendido al discurso de la izquierda y sigue luchando contra el racismo disfrazado de cuotas raciales¡±, public¨® un v¨ªdeo en el que ataca la medida. ¡°Los candidatos ser¨¢n elegidos dentro de los partidos no por sus propuestas, sino por su apariencia y color de piel. Esto significa predicar otra forma de racismo¡±, dijo el concejal.

Holiday, que tambi¨¦n es miembro del derechista Movimiento Brasil Libre, sostiene que la falta de representatividad de los negros debe ser combatida desde la meritocracia, ¡°a trav¨¦s de Internet, por ejemplo¡±, citando su experiencia personal. ¡°Me he convertido en quien soy por lo que pienso, no por mi color de piel. Si el problema es que los negros que no salen elegidos, tenemos que superarlo por el m¨¦rito. Un tipo, solo porque es negro, no representa a todos los negros¡±.

Otro temor, expresado por Belchior, es que los partidos, especialmente los de la derecha, manipulen la distribuci¨®n proporcional para impulsar candidaturas de negros que desacreditan acciones afirmativas como las cuotas y los fondos de protecci¨®n a minor¨ªas ¨¦tnicas. ¡°La ley debe generar oportunidades para las personas comprometidas con la agenda del movimiento negro. La derecha ya ha utilizado a algunos candidatos para socavar la lucha contra el racismo, con negros que dan continuidad a la l¨®gica blanca¡±. En 2018, el Partido Social Liberal, del presidente Jair Bolsonaro, fue el partido que eligi¨® a m¨¢s congresistas que se declararon negros o mestizos, 42, seguido del PT, con 40. Representando el 48% del total de las candidaturas al Congreso, solo un 27% resultaron elegidos.

Con el objetivo de cambiar los porcentajes en las elecciones de este a?o, el economista Eduardo Moreira, creador del movimiento Somos70porcento, lanz¨® un programa de formaci¨®n digital de candidatos, que prev¨¦ reservar el 40% de las plazas para mujeres y el 40% para negros. ¡°Debido a la pandemia, los candidatos que dominan las herramientas de Internet en las campa?as a trav¨¦s de las redes sociales tendr¨¢n m¨¢s posibilidades de salir elegidos¡±, explica Moreira. ¡°Repartiremos 1.000 becas a los partidos del campo progresista, siguiendo la previsi¨®n de cuotas, y otras 50 a Educafro. Queremos que las candidatas y los candidatos negros no solo se presenten a las elecciones, sino que lleguen con opciones de ganar¡±.

Benedita da Silva, experta en la materia, considera que la revisi¨®n de la financiaci¨®n es la clave para incentivar, sobre todo, que las mujeres negras participen m¨¢s en la pol¨ªtica. En 2018 configuraron el 12,9% de las candidaturas, pero solo obtuvieron el 6,7% del fondo electoral. La misma semana de la conquista en el TSE, la diputada del Partido de los Trabajadores sufri¨® ofensas racistas en las redes sociales de ultraconservadores que se oponen a la medida. Tras denunciarlos, prefiere mostrarse optimista ante la nueva regla y encabezar otra lucha, para que los partidos se anticipen a la obligaci¨®n impuesta por el TSE. ¡°Nosotras, mujeres negras, somos mayor¨ªa. La patria no nos pertenecer¨¢, de hecho, hasta que la mayor¨ªa de nosotras no est¨¦ metida en pol¨ªtica¡±.