Los partidos de Israel se agrupan en bloques ante el juicio final a la d¨¦cada de Netanyahu

En un pa¨ªs tan diverso como Israel, la fragmentaci¨®n de la Kneset (Parlamento, de 120 esca?os) en m¨¢s de una decena de grupos ha sido vista durante d¨¦cadas como garant¨ªa de pluralismo y respeto a las minor¨ªas. Pero ante las legislativas del 2 de marzo, las terceras en menos de un a?o, las candidaturas con opci¨®n de representaci¨®n parlamentaria se han reducido a la mitad. Los partidos se han agrupado en torno a dos grandes bloques ideol¨®gicos en unos comicios que se presentan como juicio final a la d¨¦cada de poder del primer ministro Benjam¨ªn Netanyahu.

M¨¢s informaci¨®n

La izquierda cierra filas de cara a las elecciones de marzo en Israel

Netanyahu se escuda en la inmunidad parlamentaria tras ser acusado de corrupci¨®n

El Supremo de Israel aplaza su decisi¨®n en el primer caso que examina sobre la imputaci¨®n de Netanyahu

Acorralado por la imputaci¨®n del fiscal general en tres casos de corrupci¨®n y en retroceso en las encuestas de intenci¨®n de voto, el l¨ªder del conservador partido Likud afronta de nuevo el desaf¨ªo del centroizquierda liderado por el exgeneral Benny Gantz, con quien acab¨® en tablas en los comicios de abril y septiembre de 2019. Sus rivales parecen haberse reagrupado bajo un m¨ªnimo com¨²n denominador: apear del poder al jefe de Gobierno que durante m¨¢s tiempo (13 a?os) ha permanecido en el cargo en Israel.

¡°A Netanyahu ya no le importa el pa¨ªs y solo busca la inmunidad frente a las acusaciones de corrupci¨®n¡±, destaca el analista pol¨ªtico Daniel Kupervaser. ¡°Incluso dentro del hist¨®rico Likud hay mucha gente que acabar¨¢ d¨¢ndole la espalda¡±, pronostica el experto. Tras haber barrido en las primarias de diciembre, el primer ministro sigue firmemente asentado al frente de su partido desde hace dos d¨¦cadas, aunque el sondeo difundido el jueves por el Canal 13 de televisi¨®n solo le asigna 31 diputados.

A la espera de los pr¨®ximos comicios, casi todas las fuerzas situadas a la derecha del Likud ¡ªNueva Derecha, del ministro de Defensa, Naftali Bennett; Uni¨®n Nacional, del titular de Transportes, Betzalel Smotrich, y Hogar Jud¨ªo, del responsable de Educaci¨®n, Rafi Peretz¡ª se han reagrupado en una sola lista. Su objetivo era evitar la p¨¦rdida de representaci¨®n en el bloque conservador si alguno de los tres partidos no lograba superar el list¨®n del 3,35% de los votos que da acceso a la Kneset. Para ello han tenido que excluir de la candidatura a Poder Jud¨ªo, una formaci¨®n radical de perfil racista anti¨¢rabe.

La extrema derecha repetir¨ªa (siete esca?os) los resultados que obtuvo en septiembre, de acuerdo con las ¨²ltimas proyecciones demosc¨®picas, al igual que los dos partidos ultraortodoxos (en torno a 15 esca?os) que tambi¨¦n apoyan la reelecci¨®n de Netanyahu. Parecen insuficientes para romper la barrera de la gobernabilidad en la Kneset: 61 votos.

Las predicciones resultan m¨¢s favorables para el bloque de la oposici¨®n. Tras hacerse con el liderazgo indiscutido en la alianza centrista Azul y Blanco, Gantz ronda ya los 34 parlamentarios en los sondeos. La reciente coalici¨®n entre laboristas y Meretz (pacifistas) ¡ªdos fuerzas situadas a su izquierda que se han visto mermadas por el ascenso en las urnas del exjefe del Ej¨¦rcito¡ª ofrecer¨ªa en torno a una decena de diputados para su investidura.

Los partidos ¨¢rabes, que representan a un 20% de la poblaci¨®n israel¨ª, tambi¨¦n le ofrecieron su voto tras las legislativas de septiembre. Ahora han vuelto a refundirse en la llamada Lista Conjunta, que obtuvo 13 esca?os hace cuatro meses y aspira a ampliar su representaci¨®n si consigue reducir la tradicional abstenci¨®n entre la minor¨ªa ¨¢rabe.

A pesar de los buenos augurios demosc¨®picos para que se repita la f¨®rmula de dos grandes bloques que en 1992 llev¨® al poder a Isaac Rabin, otro exgeneral jefe de las Fuerzas Armadas, el frente anti Netanyahu tampoco parece sumar a¨²n bastantes fuerzas.

La amenaza de una cuarta convocatoria electoral consecutiva si las urnas siguen sin arrojar un resultado concluyente planea sobre la Kneset si el partido Israel Nuestra Casa sigue sin decantarse por alguno de los dos grandes bloques. Esta formaci¨®n conservadora laica, liderada por el exministro Avigdor Lieberman, que aspira a revalidar sus ocho esca?os, conservar¨ªa en principio la llave de la gobernabilidad. Aunque rechaza pactar con los ultraortodoxos jud¨ªos, de un lado, y con los partidos ¨¢rabes, de otro. La acusaci¨®n formal por corrupci¨®n contra el primer ministro puede acabar inclinando el voto de Lieberman hacia Gantz, sobre todo si la Lista Conjunta se limita a ofrecer apoyo externo en el Legislativo ¡ªa cambio de reformas legales para paliar la discriminaci¨®n de la minor¨ªa ¨¢rabe¡ª sin entrar en la coalici¨®n gubernamental.

Laborismo en declive

La concentraci¨®n de fuerzas experimentada por los partidos ante los decisivos comicios de marzo se constata especialmente en la izquierda, que monopoliz¨® el Gobierno de Israel durante tres d¨¦cadas, desde su nacimiento como Estado en 1948, y que a partir de 1992 busc¨® una salida negociada a la ocupaci¨®n de los territorios palestinos.

El veterano Partido Laborista no hab¨ªa pactado un lista de coalici¨®n electoral con otra fuerza de izquierda desde 1969, cuando logr¨® mayor¨ªa absoluta en la Kneset. La izquierda que defendi¨® la soluci¨®n de los dos Estados para el conflicto palestino-israel¨ª pugna ahora por sobrevivir en la C¨¢mara ante un declive irreversible mientras el centro liberal acapara el voto urbano progresista.

¡°Cuando estall¨® la Segunda Intifada, con olas de atentados en caf¨¦s y autobuses, el eje central de la pol¨ªtica de los partidos de la izquierda qued¨® desacreditado ante los ojos de muchos israel¨ªes¡±, explica el columnista Anshel Pfeffer en las p¨¢ginas del diario Haaretz. ¡°Otros partidos con l¨ªderes carism¨¢ticos y pol¨ªticas mucho m¨¢s vagas, como Kadima [del exgeneral Ariel Sharon] o Azul y Blanco, acabaron capturando su tradicional posici¨®n electoral¡±, concluye este analista.

Para intentar remontar la deriva de p¨¦rdida de intenci¨®n de voto del Likud, Netanyahu volver¨¢ a intentar jugar la carta de estadista internacional, que ya le ofreci¨® r¨¦ditos en el pasado en las urnas.La semana que viene tienen previsto reunirse en Jerusal¨¦n decenas de mandatarios ¡ªentre ellos el franc¨¦s Emmanuel Macron, el ruso Vlad¨ªmir Putin y el rey de Espa?a, Felipe VI¡ª en un c¨®nclave sin precedentes en el Estado jud¨ªo en conmemoraci¨®n del Holocausto con motivo del 75? aniversario de la liberaci¨®n de los detenidos en el campo de exterminio de Auschwitz.