Colombia se aferra a los lazos hist¨®ricos con Estados Unidos para relacionarse con Biden
El Gobierno de Iv¨¢n Duque se vuelca en el control de da?os tras apostar por la reelecci¨®n de Trump
Joseph Biden es, por mucho, el presidente de Estados Unidos que mejor conoce Colombia al momento de asumir el poder. Sus viajes y experiencias lo vinculan con uno de los principales aliados de Washington en Am¨¦rica Latina. Sin embargo, su llegada a la Casa Blanca viene con zozobra para el Gobierno de Iv¨¢n Duque, que asumi¨® el riesgo de quedar a contrapi¨¦ despu¨¦s de haber cultivado el estatus de socio privilegiado de Donald Trump.
Al flamante presidente dem¨®crata le gusta referirse al pa¨ªs andino como ¡°la piedra angular¡± de la pol¨ªtica exterior de Washington en Latinoam¨¦rica. ?l fue uno de los grandes promotores del Plan Colombia que forj¨® la alianza antinarc¨®ticos y contrainsurgente entre Bogot¨¢ y Washington a comienzos de este siglo, cuando era congresista por Delaware, y como vicepresidente de Barack Obama respald¨® decididamente los di¨¢logos de La Habana, que llevaron al acuerdo de paz entre el Gobierno de Juan Manuel Santos (2010-2018) y la extinta guerrilla de las FARC. ¡°Con un abrazo de felicitaci¨®n le deseamos todo lo mejor¡±, escribi¨® durante los actos de posesi¨®n del mi¨¦rcoles en Twitter el tambi¨¦n merecedor del Nobel de Paz por ese dif¨ªcil pacto: ¡°el mundo lo necesita¡±. Santos es una de las personalidades sudamericanas que ha desarrollado una cercana relaci¨®n con Biden a lo largo de sus dilatadas carreras p¨²blicas.
Su sucesor, Iv¨¢n Duque, un cr¨ªtico de los acuerdos, fue uno de los primeros mandatarios de la regi¨®n en reconocer la victoria de Biden en las elecciones de noviembre, y felicitarlo, en lo que pareci¨® un esfuerzo por sanar las heridas que dej¨® el indisimulado apoyo del Centro Democr¨¢tico, el partido de Gobierno fundado por el expresidente ?lvaro Uribe, a la campa?a de reelecci¨®n de Trump en el crucial estado de la Florida ¨Cdonde al final se impuso a Biden en una victoria p¨ªrrica¨C. Sin embargo, el equipo del nuevo mandatario dio prioridad durante la transici¨®n a comunicarse con otros presidentes latinoamericanos antes que con el colombiano, como hab¨ªa sido tradici¨®n. Duque fue un ¨ªntimo aliado del republicano, con una notoria sinton¨ªa con respecto a la crisis de la vecina Venezuela y el ¡°cerco diplom¨¢tico¡± contra el r¨¦gimen de Nicol¨¢s Maduro ¨Cy a pesar de algunas fricciones por los altos niveles de cultivos il¨ªcitos en el pa¨ªs andino¨C.
El mandatario colombiano, al que le queda un a?o y medio en el poder, se aferra a los lazos ¡°hist¨®ricos¡± entre los dos pa¨ªses. En una declaraci¨®n oficial de minuto y medio para expresar sus mejores deseos a Biden luego de su posesi¨®n, destac¨® la defensa de la democracia, la lucha contra el crimen trasnacional, el narcotr¨¢fico y el terrorismo como algunos de los ¡°objetivos comunes¡± de una relaci¨®n que se asegur¨® de enmarcar como ¡°binacional, bipartidista y bicameral¡±. Al Ejecutivo colombiano le han reprochado justamente que el uribismo ¨Ccomo se conoce a la corriente pol¨ªtica creada en torno al expresidente¨C rompi¨® en la campa?a norteamericana una tradici¨®n de neutralidad que adem¨¢s sol¨ªa cortejar el apoyo de ambos partidos en el Congreso, donde se definen los temas presupuestales que m¨¢s conciernen al pa¨ªs andino.
Bogot¨¢ ya se hab¨ªa mostrado plenamente alineada con la Casa Blanca de Trump en el proceso para elegir como presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) a Mauricio Claver-Carone, el candidato de Trump. Duque apoy¨® temprana y decididamente una postulaci¨®n que romp¨ªa una regla no escrita para que el puesto recayera en un latinoamericano, y previsiblemente dividi¨® a la regi¨®n ¨Centre las primeras llamadas de Biden como presidente electo estuvieron los mandatarios de Argentina, Chile y Costa Rica, pa¨ªses que intentaron evitar la elecci¨®n de Claver-Carone¨C. Pero fue la participaci¨®n de pol¨ªticos del Centro Democr¨¢tico en la campa?a en la Florida, salpicada de desinformaci¨®n y alusiones al ¡°castrochavismo¡±, el t¨¦rmino acu?ado por Uribe para atacar el proceso de paz, lo que m¨¢s molestia caus¨® entre operadores del partido dem¨®crata.
¡°Si tengo el honor de ser elegido presidente, la reconstrucci¨®n de nuestra alianza con Colombia ser¨¢ una de mis prioridades en pol¨ªtica exterior¡±, escribi¨® Biden en la recta final de la campa?a, en una carta dirigida a los colombianos, y a la comunidad colombo-estadounidense, que public¨® en The Sun Sentinel, un peri¨®dico del sur de Florida, as¨ª como en El Tiempo de Bogot¨¢. El colombo-estadounidense Juan Gonz¨¢lez, quien ya hab¨ªa trabajado en la Casa Blanca durante el periodo de Obama, ser¨¢ ahora el director para el Hemisferio Occidental de la nueva Administraci¨®n. Los analistas apuntan a un tenso reacomodo de las relaciones entre dos socios obligados a cooperar en diversos frentes.
La pregunta sobre el costo que tendr¨¢ esa injerencia, una arriesgad¨ªsima apuesta pol¨ªtica ¨C como lo advirtieron diversos analistas en su momento, antes incluso del asalto de los seguidores de Trump al capitolio¨C planea sobre la diplomacia colombiana. Con los dem¨®cratas, el ¨¦nfasis de la relaci¨®n binacional ya no solo se ocupa de Venezuela o la lucha antidrogas, tambi¨¦n se extiende a los derechos humanos en momentos en que el Gobierno Duque no ha podido detener el incesante asesinato tanto de l¨ªderes sociales como de excombatientes que firmaron la paz ¨C248 seg¨²n el ¨²ltimo informe de la misi¨®n de la ONU¨C. En ese ambiente, desde diversos sectores de oposici¨®n exigen la salida del embajador en Washington, Francisco Santos, vicepresidente durante los dos periodos de Uribe (2002-2010) y arquitecto del respaldo a la candidatura de Claver-Carone en el BID.
Aumentar la presi¨®n sobre Venezuela
Adem¨¢s de aliado hist¨®rico, Colombia es tambi¨¦n clave para Estados Unidos por su papel en la estrategia frente a la vecina Venezuela, probablemente el mayor foco de inestabilidad en Am¨¦rica Latina. Alineado con la Administraci¨®n Trump, Duque ha sido el mayor respaldo regional del l¨ªder opositor Juan Guaid¨®, a la espera del posible giro de Biden frente a la crisis venezolana. Antony Blinken, nominado como nuevo secretario de Estado, dio algunas pistas el martes durante su audiencia de confirmaci¨®n en el Senado: calific¨® a Maduro de ¡°brutal dictador¡±, dijo que respaldaba mantener el reconocimiento a Guaid¨® como presidente interino y tambi¨¦n a la Asamblea Nacional elegida en 2015 como ¨²nica instituci¨®n elegida democr¨¢ticamente en el pa¨ªs. Incluso manifest¨® coincidir con el senador republicano por Florida Marco Rubio, uno de los responsables del enfoque de Trump, en la necesidad de ¡°aumentar la presi¨®n sobre el r¨¦gimen¡±.
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