Maduro se vuelca en la b¨²squeda de inversores internacionales para reactivar la industria petrolera
Venezuela pretende aumentar la producci¨®n hasta 800.000 barriles diarios tras a?os de expolio y mala gesti¨®n
El Gobierno de Nicol¨¢s Maduro busca aumentar las inversiones en el sector petrolero en un intento de reactivar un mercado en ruinas, controlado hasta hoy por la compa?¨ªa estatal, PDVSA. Venezuela pretende duplicar la producci¨®n hasta llegar a 800.000 barriles diarios con el desembarco de contratistas internacionales, principalmente de pa¨ªses aliados del chavismo. La medida, articulada en una ley dise?ada para sortear las sanciones de Estados Unidos, supone una flexibilizaci¨®n del sector in¨¦dita en un pa¨ªs cerrado a la inversi¨®n extranjera.
El prop¨®sito del Gobierno es buscar alternativas a Petr¨®leos de Venezuela despu¨¦s de d¨¦cadas de corrupci¨®n y mala gesti¨®n. Lo har¨¢ a trav¨¦s de una norma, llamada Ley Antibloqueo, con la que persigue poner parches a todo el tejido econ¨®mico del pa¨ªs. Sin embargo, el aislamiento de Venezuela en el tablero internacional es tambi¨¦n una barrera insalvable para hacer negocios transparentes con la mayor¨ªa de los pa¨ªses. Una muestra de ello es la red liderada por el empresario colombiano Alex Saab, presunto testaferro de Maduro, quien utiliz¨® empresas en M¨¦xico, Rusia o Emiratos ?rabes para distribuir el crudo del pa¨ªs caribe?o y poder evadir las sanciones, seg¨²n una investigaci¨®n publicada por EL PA?S y Armando.info
¡°Los vetos y la opacidad informativa de la ley son todo un problema para las compa?¨ªas occidentales grandes, visibles, expuestas en sus pa¨ªses, obligadas a informar de sus pasos. El temor a las sanciones es todo un impedimento¡±, comenta un alto ejecutivo del sector que prefiere no identificarse.
Tradicionalmente uno de los grandes exportadores mundiales de petr¨®leo, Venezuela lleg¨® a producir 3,5 millones y medio de barriles diarios de crudo durante varias d¨¦cadas. La corrupci¨®n desbordada, el endeudamiento, la precarizaci¨®n de los sueldos y la emigraci¨®n del personal calificado de Petr¨®leos de Venezuela han reducido la producci¨®n a 400.000 barriles. Hoy PDVSA no puede supervisar ni tutelar el negocio petrolero local aunque quisiera y el Gobierno es consciente de ello.
El giro del chavismo en busca de capitales tiene un cerebro: Tarek El Aissami, vicepresidente econ¨®mico, una de las piezas del poder¨ªo chavista y actual ministro de Petr¨®leo. A Asdr¨²bal Ch¨¢vez, nuevo presidente de PDVSA, un dirigente bolivariano vinculado a la industria, se le atribuye haber detenido la ca¨ªda libre de la producci¨®n de los ¨²ltimos a?os.
Hace poco Maduro hizo p¨²blica la meta oficial de reactivar a largo plazo la producci¨®n nacional de crudo 1,4 millones de barriles diarios. Sin embargo, ese objetivo, de acuerdo con expertos como el economista petrolero de la Universidad Central de Venezuela, Rafael Quiroz, ¡°es imposible de cumplir¡±.
Fuentes vinculadas al negocio petrolero consideran m¨¢s factible que el Gobierno bolivariano termine de conquistar la voluntad de algunas operadoras privadas venezolanas, de productoras internacionales de diversa procedencia y contratistas de mediano tama?o para reactivar pozos livianos en la Costa Oriental del Lago de Maracaibo, en el estado Zulia, as¨ª como campos marginales de la Faja del Orinoco. Maduro podr¨¢ apoyarse en el concurso de pa¨ªses aliados, como Turqu¨ªa, Ir¨¢n, India, y quiz¨¢s Rusia y China, pese al enorme endeudamiento del pa¨ªs con ambas. Si este esfuerzo es coronado con ¨¦xito, lo que seg¨²n los expertos es posible, el pa¨ªs podr¨ªa duplicar a corto plazo su producci¨®n hasta los 800.000 barriles.
El inter¨¦s de las multinacionales petroleras grandes, particularmente las occidentales, ante los nuevos ofrecimientos del chavismo ha sido bien moderado. Miraflores hace nuevas promesas, ofrece votos de rectificaci¨®n e insiste en hablar de marcos de explotaci¨®n preferenciales. Algunas de estas compa?¨ªas, demonizadas en repetidas ocasiones como ¡°vampiros imperialistas¡±, ya hab¨ªan tenido que relacionarse antes con un Gobierno prepotente, amenazante, crecido ante los alt¨ªsimos precios petroleros de la primera d¨¦cada del siglo. No obstante, algunas de estas ofertas, de acuerdo a portavoces consultados que pidieron mantener su nombre en la reserva, ¡°son tard¨ªas.¡±
Biden y las sanciones
Las compa?¨ªas petroleras privadas que operan en Venezuela resienten particularmente de la alta tributaci¨®n que imponen las autoridades, las dificultades de estos a?os para repatriar sus activos y la gran deuda que tiene con ellos el Estado venezolano. En el sector privado petrolero venezolano el fin del control cambiario, que dur¨® 17 a?os, fue recibido con enorme alivio, y est¨¢ muy extendida la conclusi¨®n de que las sobrerregulaciones oficiales lastimaron seriamente a la industria.
¡°Si Maduro logra ofrecer al capital privado un m¨ªnimo de seguridad, y el Gobierno de Joe Biden cediera con las sanciones, el pa¨ªs podr¨ªa arribar al mill¨®n de barriles relativamente r¨¢pido¡±, afirma el economista Orlando Ochoa. ¡°No creo que Estados Unidos retire las sanciones por ahora. Es necesario, adem¨¢s, que las empresas mixtas se reactiven, mantener la capacidad para atender los pozos. Muchas compa?¨ªas petroleras internacionales siguen en Venezuela, pero trabajando a medias. Venezuela tiene en este momento unos 30 millones de barriles acumulados en sus almacenes que no han podido ser colocados en el mercado¡±.
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