Ir¨¢n libera a una iranobrit¨¢nica tras cumplir su pena, pero anuncia un nuevo caso contra ella
Zaghari-Ratcliffe fue condenada a cinco a?os por ¡°atentar contra la seguridad nacional¡± en un juicio secreto y en el que su familia ve intereses pol¨ªticos
Los responsables judiciales de Ir¨¢n han retirado este domingo el grillete electr¨®nico con el que controlaban la detenci¨®n domiciliaria de Nazanin Zaghari-Ratcliffe, tras cumplir su condena de cinco a?os. Sin embargo, la trabajadora humanitaria iranobrit¨¢nica ha sido convocada de nuevo ante el juez para responder de otro cargo, lo que pone en entredicho su liberaci¨®n y las intenciones de Teher¨¢n. ¡°Creo que acaban de poner fin a la anomal¨ªa legal: le han quitado la tobillera electr¨®nica para cerrar el primer caso y evitar tr¨¢mites formales por parte del Reino Unido, pero la citan en el juzgado de nuevo la pr¨®xima semana para un nuevo caso. As¨ª que contin¨²a siendo moneda de cambio para ellos¡±, ha declarado su marido, Richard Ratcliffe, citado por los medios brit¨¢nicos.
Zaghari-Ratcliffe, de 42 a?os, nacida iran¨ª pero nacionalizada brit¨¢nica tras su matrimonio, cumpl¨ªa este domingo el ¨²ltimo d¨ªa de los cinco a?os de c¨¢rcel a los que fue condenada por una controvertida acusaci¨®n de ¡°atentar contra la seguridad nacional¡± en un juicio secreto. La mujer, directora de proyectos en la Fundaci¨®n Thomson Reuters, fue detenida en el aeropuerto de Teher¨¢n en abril de 2016 cuando iba a regresar al Reino Unido tras una visita a sus padres para que conocieran a su hija Gabriela, nacida un a?o antes. Como Ir¨¢n no reconoce la doble nacionalidad, no pudo recibir asistencia consular. A causa del coronavirus, desde el pasado marzo se encontraba confinada en la casa paterna.
El abogado de Zaghari-Ratcliffe, Hojjat Kermani, quien avanz¨® la noticia de su puesta en libertad, ha explicado que la nueva acusaci¨®n incluye ¡°hacer propaganda contra la Rep¨²blica Isl¨¢mica por asistir a una manifestaci¨®n ante la Embajada iran¨ª en Londres en 2009 y dar una entrevista a la cadena BBC en persa¡±. Kermani ha declarado a una web iran¨ª que la audiencia se ha fijado para domingo, d¨ªa 14, aunque se ha mostrado esperanzado de que ¡°este caso se cierre, habida cuenta de la investigaci¨®n previa¡±.
Kermani se refiere a que las alegaciones no contienen ninguna prueba que no estuviera disponible durante el primer juicio en 2016. Pero la amenaza de presentar nuevos cargos contra Zaghari-Ratcliffe se remonta a octubre de 2017 y tambi¨¦n fue agitada el pasado septiembre cuando la indignaci¨®n diplom¨¢tica que suscit¨® pareci¨® acallarla. Las autoridades iran¨ªes, en medio de un nuevo tira y afloja con Occidente por el acuerdo nuclear, han evitado cualquier comentario al respecto.
El secretario del Foreign Office brit¨¢nico, Dominic Raab, ha celebrado la liberaci¨®n de Zaghari-Ratcliffe, pero ha calificado de ¡°intolerable¡± el trato que le est¨¢ dispensando Teher¨¢n. Ratcliffe ha denunciado que su mujer est¨¢ siendo utilizada como reh¨¦n para conseguir que el Reino Unido devuelva a la Rep¨²blica Isl¨¢mica 400 millones de libras bloqueados a causa de las sanciones.
Ir¨¢n tiene detenidos a por lo menos una quincena de ciudadanos con un segundo pasaporte de un pa¨ªs occidental, a los que el mero documento convierte en sospechosos de espionaje y, seg¨²n los activistas de derechos humanos, en moneda de cambio de su diplomacia del chantaje. Entre los binacionales encarcelados m¨¢s conocidos est¨¢n el hombre de negocios Siamak Namazi, y su padre, Baquer, ambos con pasaporte de EE UU; la antrop¨®loga francoiran¨ª Fariba Adelkhah, el conservacionista Morad Tahbaz (que tiene pasaportes de EE UU y el Reino Unido) y el m¨¦dico suecoiran¨ª Ahmadreza Djalali, cuya condena a muerte fue ratificada a finales del a?o pasado.
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