El arresto de la expresidenta Jeanine ??ez conmociona a la oposici¨®n boliviana
Los partidos opositores que niegan el golpe de Estado de 2019 insisten en que la detenida solo puede ser juzgada por el Parlamento y no por los tribunales ordinarios
El arresto de la expresidenta Jeanine ??ez en la madrugada del 13 de marzo en la ciudad de Trinidad ha conmocionado a la oposici¨®n boliviana, que ahora lanza toda clase de misiles ret¨®ricos en contra de ¡°la justicia vendida al Gobierno¡± de Luis Arce. ??ez y cinco de sus exministros fueron incorporados de manera sorpresiva ¨Cy sin explicaci¨®n de parte de los acusadores¨C a un proceso inicialmente pensado para juzgar a los jefes militares y policiales que en noviembre de 2019 pidieron la renuncia del presidente Evo Morales, llamado por la prensa caso golpe de Estado. Los partidos opositores niegan que haya habido un golpe de Estado en Bolivia en ese momento. Adem¨¢s, insisten en que, por ser expresidenta, ??ez solo puede ser juzgada por el Parlamento y no por los tribunales ordinarios.
La detenci¨®n de ??ez estuvo cargada de dramatismo. El viernes 12 de marzo sali¨® ¨Cde manera totalmente inesperada¨C una orden de aprehensi¨®n en su contra y de cinco de sus exministros. Dos de ellos, que resid¨ªan como ??ez en la regi¨®n boliviana de Beni, fueron arrestados de inmediato. Otros dos, los controvertidos ministros de Gobierno (Interior), Arturo Murillo, y de Defensa, Fernando L¨®pez, est¨¢n fuera del pa¨ªs desde que el Movimiento al Socialismo volvi¨® al Gobierno. Uno m¨¢s se halla pr¨®fugo hasta este momento.
??ez, desde una celda del cuartel de la polic¨ªa, escribi¨® una carta a Luis Almagro, secretario general de la Organizaci¨®n de Estados Americanos (OEA), y a Michael D¨®czy, embajador de la Uni¨®n Europea en Bolivia. En la misiva, la expresidenta pide que estos organismos env¨ªen misiones oficiales de observaci¨®n ¡°a objeto de que eval¨²en de manera objetiva e imparcial la ilegal aprehensi¨®n de la cual hemos sido v¨ªctimas mi persona y mis dos exministros¡±. La exmandataria considera que no goza de las garant¨ªas y condiciones necesarias para un debido proceso: fue detenida sin antes ser informada de que formaba parte de un juicio y no se presumi¨® su inocencia.
Toda la tarde del viernes los medios tuvieron la mira puesta en el edificio de apartamentos de la ciudad beniana de Trinidad en el que viv¨ªa A?ez, el cual hab¨ªa sido cercado por la Polic¨ªa. La expresidenta no se encontraba all¨ª, como comprobaron los polic¨ªas que finalmente se decidieron a allanar su domicilio. La b¨²squeda se extendi¨® a otros lugares y m¨¢s tarde, alrededor de las una y treinta de la ma?ana, ??ez fue descubierta por la Polic¨ªa. Seg¨²n la televisi¨®n estatal, estaba escondida dentro de una gran caja, en alg¨²n sitio cuya ubicaci¨®n las autoridades a¨²n no han revelado. Se rumorea que era la casa de su madre y que su hermano hab¨ªa armado un convoy con la intenci¨®n de hacer creer a las autoridades que ya hab¨ªa escapado.
La expresidenta fue llevada a La Paz, la ciudad en la que se asentar¨¢ el proceso, como suele pasar con los casos con ribetes pol¨ªticos. Viaj¨® con ella el ministro de Gobierno (Interior), Eduardo Del Castillo, y el jefe de la Polic¨ªa. Todos los traslados de la presa se realizaron con un gran despliegue de recursos y veh¨ªculos, y fueron grabados por las c¨¢maras de la televisi¨®n estatal y varios medios privados.
??ez y sus exministros est¨¢n acusados de ¡°terrorismo, sedici¨®n y conspiraci¨®n¡±, igual que los excomandantes militares y policiales que demandaron la renuncia de Morales en 2019. La organizaci¨®n de derechos humanos Humans Rights Watch critic¨® que se est¨¦ usando la figura de ¡°terrorismo¡±. Esta instituci¨®n hizo lo mismo cuando el Gobierno de ??ez la emple¨® contra el expresidente Evo Morales. ¡°Las ¨®rdenes de captura contra ??ez y sus ministros no contienen ninguna evidencia de que se haya cometido el delito de terrorismo¡± y ¡°generan fundadas dudas de que se trata de un proceso basado en m¨®viles pol¨ªticos¡±, tuite¨® su director, Jos¨¦ Miguel Vivanco. Este cree que se debe realizar una investigaci¨®n ¡°seria e independiente¡± sobre una supuesta conspiraci¨®n para cometer un golpe de Estado.
En noviembre de 2019, el pa¨ªs estaba paralizado por las protestas en contra de un supuesto fraude electoral orquestado por el Gobierno de Morales. Casi todos los dirigentes opositores participaron en ellas y pidieron p¨²blicamente la renuncia de Morales. En ese momento ??ez era una senadora de la oposici¨®n que no ten¨ªa un papel protag¨®nico en los acontecimientos. No est¨¢ claro por qu¨¦ se la acusa a ella y no a otros pol¨ªticos, entre ellos el dirigente principal de las protestas, Luis Fernando Camacho.
La confusi¨®n es tan grande, que Evo Morales tuite¨® que la aprehensi¨®n de ??ez se deb¨ªa a las responsabilidades de la expresidenta por la represi¨®n de las protestas populares en contra de su Gobierno. ¡°Por justicia y verdad para las 36 v¨ªctimas fatales, los m¨¢s de 800 heridos y m¨¢s de 1.500 detenidos ilegalmente en el golpe de Estado¡±, escribi¨®. Sin embargo, estos hechos no son los que ¨Cpor lo que se sabe ahora¨C ser¨¢n investigados en este proceso. El ministro de Justicia, Iv¨¢n Lima, se?al¨®: ¡°se la juzga como exsenadora, no como expresidenta de facto¡±.
El ministro Del Castillo asegur¨® que el Gobierno no est¨¢ realizando ¡°ning¨²n tipo de persecuci¨®n pol¨ªtica. Nosotros no amedrentamos a los que piensan diferente. La justicia debe continuar con un trabajo independiente de cualquier gobierno¡±. La oposici¨®n boliviana opina lo contrario: ¡°Estamos en un caso de persecuci¨®n pol¨ªtica peor que las dictaduras. Se ejecuta en contra de quienes defendieron la libertad y la democracia en 2019. El poder judicial y la fiscal¨ªa masista son el martillo ejecutor¡±, tuite¨® Carlos Mesa, expresidente del pa¨ªs y segundo en las elecciones de octubre pasado. Y Luis Fernando Camacho, que acaba de ser elegido gobernador de Santa Cruz, le escribi¨® una carta al presidente Luis Arce para pedirle que no caiga en las presiones de los radicales ¡°que gobernaron antes¡± y no convierta en ¡°pol¨ªtica de Estado¡± la versi¨®n pol¨ªtica de su partido sobre el derrocamiento de Morales por un golpe de Estado. ¡°Es momento de que deje su actitud de ¡®mantenerse al margen¡¯ y asuma su cargo en la gesti¨®n y en lo pol¨ªtico con valent¨ªa¡± se lee en la misiva.
La respuesta de tono m¨¢s elevado fue la de R¨®mulo Calvo, el presidente del Comit¨¦ C¨ªvico Pro Santa Cruz, la instituci¨®n que articul¨® las protestas de las clases medias citadinas en contra del gobierno de Morales. ¡°Est¨¢n jugando con fuego y se van a quemar¡±, amenaz¨®. Y no descart¨® la posibilidad de volver a las calles para ¡°defender la democracia¡±.
Este s¨¢bado, el secretario general de las Naciones Unidas, Ant¨®nio Guterres, pidi¨® respetar el ¡°debido proceso¡± y la ¡°transparencia¡± en las detenciones de la expresidenta Jeanine ??ez y de altos exfuncionarios El secretario general tambi¨¦n pidi¨® seguir avanzando en los ¡°pasos dados por todos los actores bolivianos hacia la consolidaci¨®n de la paz¡± y reiter¨® el apoyo de Naciones Unidas en ese sentido.
Suscr¨ªbase aqu¨ª a la newsletter de EL PA?S Am¨¦rica y reciba todas las claves informativas de la actualidad de la regi¨®n
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.