El exl¨ªder escoc¨¦s Alex Salmond divide al independentismo al crear otro partido

La batalla personal del exl¨ªder independentista escoc¨¦s Alex Salmond contra su protegida, sucesora y hoy enemiga, Nicola Sturgeon, amenaza con dividir las filas del separatismo. El que fuera l¨ªder carism¨¢tico del SNP (Partido Nacional Escoc¨¦s) ha anunciado este viernes que competir¨¢ en las elecciones auton¨®micas del pr¨®ximo 6 de mayo con una nueva formaci¨®n: Alba (como se conoce Escocia en ga¨¦lico). Salmond fue absuelto en marzo de 2020 por un jurado popular de 14 graves acusaciones de delitos sexuales contra empleadas del SNP, un esc¨¢ndalo que provoc¨® su abandono del partido dos a?os antes. Desde entonces ha logrado volver su fracaso pol¨ªtico en contra de la actual ministra principal del territorio aut¨®nomo, Sturgeon, que ha acabado siendo acusada de enga?ar al Parlamento escoc¨¦s en la gesti¨®n de aquella crisis por su Gobierno.

La decepci¨®n del Brexit (rechazado por una clara mayor¨ªa de escoceses) y un manejo serio y riguroso de la pandemia, en comparaci¨®n con los errores del primer ministro brit¨¢nico, Boris Johnson, hab¨ªan situado a Sturgeon en un alt¨ªsimo nivel de popularidad. Y sucesivas encuestas reflejaban un persistente apoyo popular a la independencia del Reino Unido. Con estos datos, el SNP aspiraba a lograr en las elecciones de mayo una mayor¨ªa absoluta (hoy gobierna en minor¨ªa) que le diera la legitimidad necesaria para celebrar un nuevo refer¨¦ndum. En el de 2014, la propuesta separatista se vio derrotada por un 55% frente a un 45%.

En cuesti¨®n de pocos meses, la situaci¨®n ha dado la vuelta. El torpe manejo de las acusaciones contra Salmond ha dividido a los independentistas y sembrado la sospecha entre el electorado escoc¨¦s. El Gobierno de Sturgeon tuvo que indemnizar al anterior l¨ªder del SNP con m¨¢s de medio mill¨®n de libras (unos 580.000 euros) cuando los tribunales tumbaron una investigaci¨®n interna del esc¨¢ndalo poco garantista y llena de irregularidades. El asunto acab¨® en manos de una comisi¨®n parlamentaria que dio su momento de gloria al pol¨ªtico. Ante los diputados, Salmond cuestion¨® la capacidad de su sucesora para liderar Escocia y logr¨® titulares llamativos en Londres y Edimburgo. Aunque el abogado general James Hamilton, nombrado en su d¨ªa por Salmond como asesor legal del Gobierno escoc¨¦s, concluy¨® en su investigaci¨®n que Sturgeon no hab¨ªa quebrado el ¡°c¨®digo ministerial¡± ¡ªla normativa ¨¦tica cuya quiebra suele conllevar la dimisi¨®n¡ª, la popular pol¨ªtica independentista sali¨® muy da?ada de todo el proceso. El propio Hamilton calific¨® de ¡°lamentable¡± que, durante su comparecencia ante la comisi¨®n parlamentaria, Sturgeon hubiera ofrecido ¡°una narraci¨®n incompleta de los hechos¡±. Y la conclusi¨®n definitiva, aunque en votaci¨®n dividida, de los diputados fue la de acusar a la ministra principal de enga?ar al Parlamento aut¨®nomo.

Salmond remata ahora su venganza con el anuncio de su presencia como candidato en los comicios de mayo, mediante un calculado movimiento que aprovechar¨¢ en su favor el complicado sistema electoral escoc¨¦s. El Parlamento Aut¨®nomo, en vigor desde 1999, cuenta con 129 esca?os. Los escoceses, sin embargo, no quer¨ªan una repetici¨®n exacta del sistema mayoritario brit¨¢nico, por el que el ganador de cada circunscripci¨®n se queda con el esca?o en liza y el resto de votos acaban en la basura. Eligieron un m¨¦todo de proporcionalidad corregida, en el que cada elector emitir¨ªa un doble voto. Las 73 circunscripciones del territorio designar¨ªan cada una un representante por el sistema del winner-takes-all (el ganador se lo lleva todo). Pero el resto de diputados, 56, se elegir¨ªan a trav¨¦s de un sistema proporcional. Escocia se dividi¨® en ocho regiones parlamentarias. Cada una tendr¨ªa siete diputados. Los partidos presentar¨ªan una lista en cada regi¨®n, y los votantes podr¨ªan elegir formaci¨®n con su segunda papeleta.

Es en este caladero, normalmente descuidado por el SNP hasta el punto de perder casi un mill¨®n de votos en las pasadas elecciones, en el que ahora quiere pescar Salmond. El pol¨ªtico independentista, cuyos d¨ªas de ¨¦xito han quedado atr¨¢s, pero mantiene un reducto de partidarios entre votantes y miembros de su antiguo partido, ha asegurado que no pretende hacer da?o a la formaci¨®n de Sturgeon, sino contribuir a forjar una ¡°supermayor¨ªa¡± a favor de la independencia. ¡°Boris Johnson ya ha rechazado las propuestas del SNP [para la celebraci¨®n de un segundo refer¨¦ndum]. Le resultar¨¢ mucho m¨¢s dif¨ªcil volver a decir que no a todo un Parlamento y a un pa¨ªs. Y el debate sobre la independencia ya no se ver¨¢ como una disputa entre el Partido Conservador y el SNP, sino como un enfrentamiento entre Boris Johnson y el Parlamento que representa al pueblo escoc¨¦s¡±, ha afirmado Salmond en el v¨ªdeo utilizado para presentar la formaci¨®n Alba.

Los nacionalistas escoceses han reaccionado de inmediato ante una maniobra que ve¨ªan venir desde hac¨ªa ya un tiempo, y han optado por centrar sus ataques en la personalidad y ambici¨®n de Salmond. Un portavoz del SNP ha asegurado: ¡°Durante estos momentos de crisis, el inter¨¦s del pa¨ªs deber¨ªa ser prioritario, y no resultar ensombrecido por los intereses personales de alguien que ni siquiera ha mostrado la m¨ªnima preocupaci¨®n ante las acusaciones [por delitos sexuales] contra ¨¦l. Acusaciones que ponen en seria duda la conveniencia de su regreso a la esfera p¨²blica¡±.