Agn¨¨s Callamard: ¡°Me conmocion¨® que autoridades de Arabia Saud¨ª me amenazaran en la ONU¡±
La nueva secretaria general de Amnist¨ªa Internacional relata c¨®mo un alto cargo saud¨ª verti¨® amenazas en su contra por el informe que redact¨® sobre la muerte del periodista Jamal Khashoggi
Agn¨¨s Callamard fue amenazada hasta en dos ocasiones. Ella no estaba presente, pero sus colegas de Naciones Unidas s¨ª, as¨ª que el mensaje lleg¨®. Fue en enero de 2020, en una reuni¨®n celebrada en Ginebra entre funcionarios saud¨ªes y de la ONU. All¨ª, en esa ciudad suiza, se encuentran las oficinas del Alto Comisionado para los Derechos Humanos. Callamard, nacida en Grenoble (Francia) hace 56 a?os, hab¨ªa elaborado como relatora especial de este organismo un informe sobre ...
Agn¨¨s Callamard fue amenazada hasta en dos ocasiones. Ella no estaba presente, pero sus colegas de Naciones Unidas s¨ª, as¨ª que el mensaje lleg¨®. Fue en enero de 2020, en una reuni¨®n celebrada en Ginebra entre funcionarios saud¨ªes y de la ONU. All¨ª, en esa ciudad suiza, se encuentran las oficinas del Alto Comisionado para los Derechos Humanos. Callamard, nacida en Grenoble (Francia) hace 56 a?os, hab¨ªa elaborado como relatora especial de este organismo un informe sobre la muerte del periodista saud¨ª Jamal Khashoggi en octubre de 2018 en Estambul. Aprovechando la reuni¨®n, un alto cargo saud¨ª pidi¨® a su contraparte dos veces que se ocuparan de ella si no quer¨ªan que lo hicieran otros. ¡°Yo hago lo que tengo que hacer¡±, dice Callamard desde Par¨ªs en una videollamada con EL PA?S, ¡°pero fue una conmoci¨®n el hecho de que autoridades de Arabia Saud¨ª me amenazaran en un espacio de la ONU, que debe ser protegido¡±. Callamard, con una larga trayectoria como experta en derechos humanos, acaba de asumir la secretar¨ªa general de Amnist¨ªa Internacional (AI).
Aquello ocurri¨® a principios del a?o pasado, pero ella no lo denunci¨® hasta el pasado 23 de marzo, en una entrevista con el peri¨®dico brit¨¢nico The Guardian. ?Por qu¨¦ tard¨® tanto en hablar de ello? ¡°Estaba trabajando en una serie de asuntos importantes relacionados con Arabia Saud¨ª y no quer¨ªa llamar la atenci¨®n y distraer debido a las amenazas¡±. Cuando se decidi¨® a contarlo, el alto funcionario no fue identificado, pero dos d¨ªas despu¨¦s de la publicaci¨®n, el presidente de la Comisi¨®n de Derechos Humanos de Arabia Saud¨ª, Awwad Alawwad, se delat¨®. ¡°Rechazo esta sugerencia [las amenazas] en los t¨¦rminos m¨¢s en¨¦rgicos¡±, se?al¨® en Twitter Alawwad, exministro de Informaci¨®n saud¨ª. ¡°Si bien no puedo recordar las conversaciones exactas, nunca hubiera deseado o amenazado con hacer da?o a una persona designada por la ONU, ni a nadie en ese sentido¡± prosigui¨®.
Rupert Colville, portavoz de la ONU, confirm¨® la versi¨®n de Callamard. Lo que sin duda no hab¨ªa gustado en Riad es el contenido del informe sobre la muerte de Khashoggi en el consulado saud¨ª en Estambul. El reporte, de un centenar de folios y firmado por ella, dec¨ªa esto en la p¨¢gina 4: ¡°La relatora especial ha determinado que existen pruebas cre¨ªbles que justifican una mayor investigaci¨®n de la responsabilidad individual de los funcionarios saud¨ªes de alto nivel, incluida la del pr¨ªncipe heredero [Mohamed Bin Salm¨¢n]¡±.
¡°Por supuesto que una act¨²a porque toma estas amenazas en serio¡±, admite Callamard, ¡°pero tienes que evaluarlas objetivamente, ver qu¨¦ medidas tomar, si el riesgo es elevado...¡±. Habl¨® con la ONU y extrem¨® las precauciones en torno a su persona. ¡°Estaba en una situaci¨®n en la que pod¨ªa ser protegida¡±, contin¨²a durante la conversaci¨®n, ¡°porque hab¨ªa personal de seguridad a mi alrededor. Tienes que ser consciente constantemente; tom¨¦ medidas extra con mi tecnolog¨ªa e inform¨¦ a unas pocas personas para que tuvieran un ojo puesto¡±. Y ya est¨¢. Al preguntar por c¨®mo le afect¨® personalmente, si temi¨® por su vida, trata de rebajar la gravedad, no se sinti¨® ¡°especialmente inquieta¡±, dice; est¨¢ acostumbrada. Pese a que quiso que todo esto saliera a la luz ¡ª¡±porque el mundo necesita saber que la ONU es un lugar donde la gente puede ser amenazada por su trabajo¡±, insiste Callamard¡ª, quita hierro al asunto: ¡°La gente con la que trabajo las recibe [amenazas de muerte]. En comparaci¨®n con la situaci¨®n de muchos de mis contactos, que hasta tienen que cambiar de casa, esto no es nada¡±.
Sospecha, eso s¨ª, dos cosas, seg¨²n admite en la charla: que Arabia Saud¨ª no solo la ha amenazado a ella en el seno de Naciones Unidas y que este pa¨ªs no es el ¨²nico en hacerlo.
Su trabajo con los saud¨ªes no ha sido f¨¢cil, y ser mujer tiene que ver con ello, seg¨²n reconoce. ¡°Hay mucha misoginia en la forma en la que Arabia Saud¨ª interactu¨® conmigo, subestim¨® mi trabajo¡±, dice la flamante secretaria general de AI. Pero no solo desde Riad. Callamard tambi¨¦n ha recibido advertencias del presidente filipino, Rodrigo Duterte, que amenaz¨® con ¡°abofetearla¡± por sus cr¨ªticas a la guerra contra la droga tras una visita al pa¨ªs en mayo de 2017. ¡°Ese no es el tipo de palabra que se usar¨ªa con un hombre¡±, admite la experta francesa. El enfado de Duterte lleg¨® a la red y la p¨¢gina de Callamard en la versi¨®n inglesa de Wikipedia fue manipulada para vincularla con un partido filipino opositor.
Con una formaci¨®n en Ciencias Pol¨ªticas en Francia y Estados Unidos, Callamard, directora tambi¨¦n de la Iniciativa Global para la Libertad de Expresi¨®n de la Universidad de Columbia, tom¨® hace apenas seis d¨ªas el relevo al frente de Amnist¨ªa ¡ªorganizaci¨®n en la que ya trabaj¨® brevemente hace dos d¨¦cadas¡ª de manos de la suiza Julie Verhaar. Detr¨¢s deja investigaciones como en la que concluy¨®, en julio del pasado a?o, que el ataque de EE UU en Irak que acab¨® con la vida del general iran¨ª Qasem Soleimani fue ¡°ilegal¡±. ?Prioridades en su nuevo cargo? ¡°Primero escuchar y aprender, si no ser¨ªa muy arrogante¡±, responde.
La pandemia como excusa para violar los derechos humanos
La francesa Agn¨¨s Callamard se ha estrenado en el cargo como nueva secretaria general de Amnist¨ªa Internacional con la publicaci¨®n del informe anual con el que la organizaci¨®n repasa el estado de salud de los derechos humanos. Este a?o, precisamente, la pandemia ha sido uno de los temas clave en el reporte. Seg¨²n el trabajo de Amnist¨ªa, que hace un seguimiento de 149 pa¨ªses, la crisis desatada por la aparici¨®n de la covid-19 ha servido de excusa a muchos gobiernos para reforzar su poder, menoscabar los derechos de los ciudadanos y entorpecer la cooperaci¨®n internacional.
¡°Lo que vimos en 2020", se?ala Callamard a este diario, "fue mucha negligencia en la protecci¨®n de los derechos humanos, en la lucha contra la discriminaci¨®n y la desigualdad, haci¨¦ndonos m¨¢s vulnerables ante la pandemia¡±. Sirva de ejemplo, Amnist¨ªa afirma en su informe que las autoridades "hostigaron o intimidaron", hasta la detenci¨®n o el despido, al personal sanitario en 42 de los pa¨ªses analizados.
Tambi¨¦n en 42 pa¨ªses, Amnist¨ªa detect¨® devoluciones de inmigrantes o refugiados que, en ocasiones, "se quedaron atrapados en campos o centros de detenci¨®n en condiciones de miseria o se vieron bloqueados por los cierres de fronteras". El informe denuncia de igual modo el "hacinamiento y las condiciones insalubres" en centros de detenci¨®n, y los desalojos forzosos, todas estas violaciones de los derechos que han dejado a los ciudadanos tremendamente expuestos al virus. La organizaci¨®n resalta tambi¨¦n el uso de la pandemia para recortar la libertad de expresi¨®n en pa¨ªses del Golfo (Arabia Saud¨ª, Bar¨¦in, Emiratos ?rabes Unidos, Kuwait y Om¨¢n), pero tambi¨¦n en Europa, como es el caso de la Hungr¨ªa de Viktor Orb¨¢n, as¨ª como el uso excesivo de la fuerza para reprimir las protestas en Oriente Pr¨®ximo, el norte de ?frica y Asia, en especial Filipinas.