Arranca a puerta cerrada el juicio impulsado por los militares contra la depuesta l¨ªder de Myanmar
Aung San Suu Kyi, que el s¨¢bado cumple 76 a?os, afronta cargos que pueden costarle al menos 15 a?os de prisi¨®n
A puerta cerrada y sin im¨¢genes de la procesada, al menos por el momento. As¨ª comenz¨® este lunes el juicio contra Aung San Suu Kyi, l¨ªder de facto del Gobierno civil depuesto por los militares en Myanmar el pasado 1 de febrero. Est¨¢ previsto que el proceso dure hasta finales de julio. Ser¨¢ juzgada por hasta siete delitos que sus abogados consideran fabricados por los militares para apartarla de la pol¨ªtica. El m¨¢s grave de ellos es el de corrupci¨®n, con penas m¨¢ximas previstas de hasta 15 a?os. La dirigente, que cumple 76 a?os el s¨¢bado, aspiraba a consolidar la transici¨®n democr¨¢tica de Myanmar a la que ha dedicado su vida.
¡°Deseamos que ocurra lo mejor, pero estamos preparados para lo peor¡±, advirti¨® uno de sus abogados, Khin Maung Zaw, citado por la agencia France Presse, antes de que comenzara el juicio este lunes en la capital, Naypyid¨®. Durante la sesi¨®n, que dur¨® cinco horas, la pol¨ªtica ¡°parec¨ªa algo indispuesta, pero sigui¨® los testimonios con atenci¨®n¡±, a?adi¨® el letrado. El equipo legal de la Nobel de la Paz de 1991 ¨Cpremio concedido entonces por su papel en el movimiento democr¨¢tico que estall¨® en el pa¨ªs en 1988- solo ha podido reunirse con ella dos veces desde que fue detenida el 1 de febrero, cuando los militares dieron el golpe de Estado.
El proceso que comenz¨® este lunes ver¨¢ solo parte de los cargos en su contra: la supuesta incitaci¨®n a la agitaci¨®n p¨²blica; importaci¨®n ilegal de dispositivos electr¨®nicos (unos walkie-talkies) y una infracci¨®n de las normativas impuestas contra la propagaci¨®n del coronavirus durante la campa?a electoral de los comicios del pasado noviembre. Las acusaciones m¨¢s graves, entre ellas violar la ley de secretos oficiales (que acarrea un m¨¢ximo de 14 a?os de c¨¢rcel) o la presunta corrupci¨®n (hasta 15 a?os de prisi¨®n), ser¨¢n juzgadas aparte. Se prev¨¦ que todo el proceso dure hasta finales de julio, con audiencias cada lunes.
¡°Hay una voluntad innegable de mantenerla fuera de la escena pol¨ªtica y desprestigiarla¡±Khin Maung Zaw, del equipo de abogados de Suu Kyi
¡°Hay una voluntad innegable de mantenerla fuera de la escena pol¨ªtica y desprestigiarla¡±, denunci¨® Khin Maung Zaw la semana pasada, cuando se anunciaron los cargos de corrupci¨®n. La Comisi¨®n Anticorrupci¨®n, controlada por los militares, la acus¨® de aceptar ilegalmente 600.000 d¨®lares (unos 493.000 euros) en met¨¢lico y alrededor de 11 kilos de oro.
Suu Kyi, que pas¨® 15 a?os bajo arresto domiciliario durante el anterior r¨¦gimen militar (que gobern¨® Myanmar entre 1962 y 2011), ha estado incomunicada y arrestada desde el golpe, y solo se la ha visto en una vista previa al juicio el 24 de mayo. La pol¨ªtica, conocida como La Dama¡±, gan¨® las elecciones el pasado noviembre al frente de la Liga Nacional para la Democracia (NLD, por sus siglas en ingl¨¦s), que ayud¨® a fundar en 1988 y que la junta disolvi¨® el mes pasado. Alegando fraude electoral, los militares dieron el golpe el d¨ªa en el que se ten¨ªa que constituir el nuevo Parlamento, lo que habr¨ªa supuesto la segunda legislatura con Suu Kyi al mando.
Las desavenencias entre los militares y Suu Kyi, a¨²n muy sometida al poder castrense por la Constituci¨®n actual ¡ªredactada por los uniformados en 2008¡ª, fueron uno de los motivos de la decisi¨®n del ej¨¦rcito de tomar el poder por la fuerza. Cada vez m¨¢s arrinconado por Suu Kyi y la NLD, el Tatmadaw ¡ªcomo se conoce a las fuerzas armadas¡ª, con Min Aung Hlaing al frente, declar¨® el estado de emergencia y detuvo a la Nobel y a parte de su Gabinete, desatando multitudinarias protestas en el pa¨ªs, que a¨²n perduran.
En esas manifestaciones se pide la liberaci¨®n de Suu Kyi y el retorno de la transici¨®n democr¨¢tica (2011-2021). Phil Robertson, subdirector para Asia de Human Rights Watch, denuncia en un comunicado que ¡°todos los cargos contra Suu Kyi deber¨ªan retirarse y ella ser liberada de forma inmediata e incondicional. Pero, tristemente, el hecho de que el proceso est¨¦ controlado por la junta militar hace muy poco probable que se haga justicia¡±.
Myanmar lleva sumido en el caos desde que los militares dieron el golpe, con al menos 862 fallecidos a manos de las fuerzas de seguridad y m¨¢s de 4.500 detenidos, seg¨²n la Asociaci¨®n para la Protecci¨®n de Presos Pol¨ªticos.
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