Halladas en Canad¨¢ 751 tumbas sin identificar en terrenos de un antiguo internado de menores ind¨ªgenas

Canad¨¢ vuelve a toparse con su pasado m¨¢s sombr¨ªo. La Federaci¨®n de Naciones Ind¨ªgenas Soberanas (FSIN, por sus siglas en ingl¨¦s), que representa a 74 comunidades aut¨®ctonas de la provincia de Saskatchewan (centro del pa¨ªs), ha anunciado el hallazgo de 751 tumbas sin identificar en los terrenos de un antiguo internado para ni?os ind¨ªgenas de la localidad de Marieval. El lugar est¨¢ ubicado en la reserva de Cowessess (habitada por unos 4.200 miembros de los grupos saulteaux y cree), a unos 160 kil¨®metros al este de Regina, la capital provincial. En un comunicado, la FSIN catalog¨® este descubrimiento como ¡°espantoso e impactante¡±.

El hallazgo se produce poco menos de un mes despu¨¦s de que se localizaran los restos de 215 ni?os en los terrenos donde se encontraba el antiguo internado para menores ind¨ªgenas de Kamloops, en la provincia de Columbia Brit¨¢nica. El suceso caus¨® conmoci¨®n en Canad¨¢ y reaviv¨® el debate en torno al trato dado a las comunidades ind¨ªgenas, con centros creados en teor¨ªa para integrar a sus menores, pero en los que se produc¨ªa una asimilaci¨®n forzosa con castigos f¨ªsicos.

Cadmus Delorme, jefe de la reserva de Cowessess, detall¨® este jueves en una conferencia de prensa el hallazgo. ¡°No es una fosa com¨²n; son tumbas sin nombre¡±, manifest¨®. Asegur¨® tambi¨¦n que la Iglesia cat¨®lica retir¨® las l¨¢pidas en los a?os sesenta. ¡°Quitar l¨¢pidas es un delito en este pa¨ªs. Y estamos tratando todo esto como una escena criminal¡±, agreg¨®. Delorme se?al¨® que no saben a¨²n si estas sepulturas pertenecen a ni?os, pero que desde hace tiempo han circulado historias en su comunidad sobre menores y adultos enterrados ah¨ª.

Al igual que en el caso de Kamloops, el hallazgo de Marieval fue posible gracias a un radar de penetraci¨®n terrestre. Las pesquisas comenzaron el pasado 1 de junio. Bobby Cameron, jefe de la FSIN, dijo que el ¨²ltimo hallazgo ¡ªel mayor de este tipo en Canad¨¢¡ª es apenas el comienzo de las b¨²squedas en los antiguos internados de Saskatchewan. ¡°Miles de familias en nuestros territorios han estado esperando que sus hijos vuelvan a casa¡±, indic¨®.

Kamloops y Marieval formaron parte de la red de 139 internados para menores ind¨ªgenas que oper¨® entre 1883 y 1996. Unos 150.000 ni?os fueron obligados a vivir en estos centros financiados por el Gobierno federal y administrados por comunidades religiosas (m¨¢s del 70% por grupos cat¨®licos). La negligencia, los castigos f¨ªsicos, la violencia sexual y el racismo fueron comunes en ellos. En junio de 2015, la Comisi¨®n de la Verdad y la Reconciliaci¨®n creada para revisar ese pasado entreg¨® un informe en el que catalog¨® lo ocurrido en estas instituciones como un ¡°genocidio cultural¡±. Muchos padres no volvieron a tener noticias de sus hijos. La comisi¨®n estableci¨® en 2019 que al menos 4.134 menores fallecieron en estos centros. Otros expertos calculan que la cifra supera con holgura los 6.000.

Perry Bellegarde, jefe de la Asamblea de Primeras Naciones de Canad¨¢, expres¨® en Twitter que el descubrimiento en Marieval es ¡°absolutamente tr¨¢gico, pero no sorpresivo¡±. Bellegarde a?adi¨®: ¡°Insto a todos los canadienses a apoyar a las Primeras Naciones en este momento extremadamente dif¨ªcil y emotivo¡±.

Justin Trudeau, primer ministro canadiense, emiti¨® un comunicado en el que afirm¨®: ¡°S¨¦ que este descubrimiento solo agrava el dolor que las familias, los supervivientes y todas las comunidades ind¨ªgenas sienten ya, y reafirma una verdad que conocen desde hace mucho tiempo. Canad¨¢ es responsable del dolor y el trauma que sienten¡±. Trudeau a?adi¨® que ¡°los descubrimientos de Marieval y Kamloops son parte de una tragedia mayor. Son un recordatorio vergonzoso del racismo sist¨¦mico, la discriminaci¨®n y la injusticia que los pueblos ind¨ªgenas han enfrentado y todav¨ªa enfrentan en este pa¨ªs¡±.

Una congregaci¨®n cat¨®lica gestion¨® el internado Marieval de 1899 a 1969. Posteriormente, el Gobierno federal se ocup¨® de su administraci¨®n hasta 1987, cuando lo hicieron los l¨ªderes de la reserva (en 1970, el cementerio del internado ya hab¨ªa pasado a manos de esta comunidad). El centro cerr¨® sus puertas en 1997 y el edificio fue demolido dos a?os despu¨¦s. En 2020, Robert Kakaway public¨® Thou Shalt Not Be an Indian: A Residential School Survivor¡¯s Story, libro en el que cuenta sus experiencias como alumno en este centro durante los a?os sesenta. Kakaway describe en sus p¨¢ginas el temor ante los castigos, los abusos cotidianos y la desconexi¨®n cultural que sufri¨® con su comunidad.

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