Egipto condena a cinco j¨®venes ¡®influencers¡¯ por v¨ªdeos ¡°inmorales¡±
Las sentencias emitidas este mes han sido interpretadas como un reflejo de la hostilidad del r¨¦gimen hacia el uso de internet y de su empe?o por imponer su tutela moral a las creadoras de contenido
Desde comienzos de junio, las autoridades judiciales de Egipto han condenado a duras penas de prisi¨®n a cinco j¨®venes influencers del pa¨ªs acusadas de pol¨¦micos cargos como socavar los valores de la familia, tr¨¢fico de personas e incitar a la prostituci¨®n por sus contenidos visuales difundidos a trav¨¦s de las redes sociales.
Los veredictos m¨¢s contundentes, y que m¨¢s repulsa han generado, los dict¨® el domingo un tribunal de El Cairo contra Haneen Hossam, de 20 a?os, y Mowada Al-Adham, de 23, condenadas a 10 y 6 a?os de c¨¢rcel, respectivamente, adem¨¢s de a pagar una elevada multa. El 8 de junio, otra famosa influencer, Renad Emad, fue condenada a tres a?os de prisi¨®n por contenido difundido en las redes que las autoridades consideran indecente, y una semana despu¨¦s un popular d¨²o, formado por una madre y su hija, fue sentenciado a cinco a?os.
Los severos fallos contra las j¨®venes han sido criticados por grupos de defensa de los derechos humanos, que han pedido a las autoridades que garanticen el derecho a la libertad de expresi¨®n sin restricciones arbitrarias. Su persecuci¨®n ha sido interpretada como un reflejo de la hostilidad del r¨¦gimen hacia el uso libre de internet y de su empe?o por imponer su tutela moral a las creadoras de contenido en las redes sociales. Tambi¨¦n como la ¨²ltima muestra de la obstinaci¨®n del Gobierno por definir los l¨ªmites de la moralidad en un sector en auge.
¡°Como feministas, llevamos a?os alertando de que parece que el sistema quiera que las mujeres se vean de una determinada manera, por lo que, cualquiera que no est¨¦ dentro de ese [modelo], es acusada¡±, se?ala Mozn Hassan, una prominente activista y fundadora de la organizaci¨®n Nazra para Estudios Feministas. Hassan nota que la interpretaci¨®n legal de estos casos, conectados con la pol¨¦mica ley de prostituci¨®n y la trata de mujeres, es algo ¡°muy alarmante y problem¨¢tico¡± y explica las elevadas condenas.
El calvario de las conocidas como ¡°chicas TikTok¡±, en referencia a la red social de v¨ªdeos cortos en la que la mayor¨ªa de ellas difund¨ªa sus contenidos, empez¨® el a?o pasado cuando las autoridades llevaron a cabo una campa?a de arrestos durante la que fueron detenidas una decena de influencers. La mayor¨ªa se encuentra en la veintena, procede de entornos populares y han sido acusadas de delitos como atentar contra los valores familiares, promover el libertinaje y la prostituci¨®n y difundir v¨ªdeos sexualmente sugerentes.
Sus detenciones y condenas representan una de las primeras ocasiones en la que las autoridades egipcias recurren a los cargos morales que contempla una draconiana ley de delitos cibern¨¦ticos aprobada en 2018. Dos vagos art¨ªculos de la norma prev¨¦n penas de c¨¢rcel de entre seis meses y cinco a?os por contenido en internet contrario a la ¡°moral p¨²blica¡± y a los ¡°valores familiares¡±, aunque no define qu¨¦ material constituye este delito. La Fiscal¨ªa y la polic¨ªa cuentan con departamentos dedicados a estas cuestiones.
El uso de estos m¨¦todos de vigilancia y de estos cargos recientemente acu?ados tambi¨¦n son vistos como una nueva forma de controlar los cuerpos de las mujeres y su conducta en un sector emergente como el de las redes sociales. Durante las investigaciones, han sido recurrentes las referencias a sus cuerpos, a su ropa y a actividades como bailar para, luego, sugerir que se trataba de formas de incitar a actos indecentes, al libertinaje o la depravaci¨®n, seg¨²n han recogido medios locales. Adem¨¢s, aplicaciones como TikTok ofrecen oportunidades econ¨®micas a mujeres j¨®venes de entornos con limitadas posibilidades, una opci¨®n ahora cortocircuitada. Activistas y grupos de derechos humanos insisten en que su actividad se corresponde al trabajo de cualquier creadora de contenidos del mundo.
¡°La sentencia contra Mowada y Haneen pretende ser un mensaje a todas las mujeres y j¨®venes para que teman un duro castigo si creen que son libres de expresarse en internet en esas aplicaciones¡±, se?ala Mohamed Lotfi, el director de la Comisi¨®n Egipcia para los Derechos y Libertades, una de las nueve organizaciones que pidi¨® el martes la revocaci¨®n de sus condenas.
De esta manera, las autoridades egipcias han convertido este ¨¢mbito de la esfera digital en el ¨²ltimo espacio donde seguir librando su batalla por fijar los l¨ªmites de la moralidad, en l¨ªnea con la represi¨®n de quienes desaf¨ªan o no se ajustan a las r¨ªgidas normas sociales del pa¨ªs. De hecho, algunas de las detenciones se produjeron despu¨¦s de que abogados o personas a t¨ªtulo individual se quejaran de hechos que consideraban inmorales ante la Fiscal¨ªa, que ha llegado a erigirse en guardi¨¢n de las normas sociales.
Las sucesivas condenas a prisi¨®n tambi¨¦n se producen cuando, a lo largo del ¨²ltimo a?o, cada vez m¨¢s mujeres est¨¢n denunciando la arraigada cultura de la violaci¨®n en Egipto. En el camino, est¨¢n tejiendo fuertes redes de solidaridad, inusuales en el pa¨ªs, que ahora se han movilizado en buena medida para pedir que se reabran los procesos judiciales de las j¨®venes y sean absueltas.
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