Exguerrilleros de las FARC llegan a la vitrina de la moda en Colombia

Aprendieron a coser en sastrer¨ªas clandestinas en medio de la selva. Durante a?os confeccionaron uniformes, chalecos, carpas e insumos para la guerra. La vida para un grupo de excombatientes de las FARC cambi¨® tanto tras la firma del acuerdo de paz que ahora se presentan en las vitrinas m¨¢s importantes de la moda en Colombia. Por primera vez, Colombiamoda y Colombiatex vieron el trabajo de Confecciones La Monta?a, Manifiesta Hecho en Colombia, Tejiendo Paz o Fariana, algunas de las marcas de ropa que crearon los excombatientes como proyecto para reinsertarse en la sociedad.

¡°Llegamos a Colombiamoda a aprender, a crecer como empresa, a relacionarnos con diversos actores, a jug¨¢rnosla por el camino que hemos escogido, pero sobre todo vinimos a dejar la guerra atr¨¢s¡±, escribi¨® Andr¨¦s Zuluaga, director de Confecciones La Monta?a Voluntad de Paz, que hace morrales, hamacas, botas para senderismo y agrupa a exguerrilleros del frente 36 de las extintas FARC, del nordeste de Antioquia.

La de estos firmantes de paz es quiz¨¢ una de las m¨¢s marcas m¨¢s conocidas. Pero de acuerdo con la Agencia para la Reincorporaci¨®n y Normalizaci¨®n (ARN), hay al menos 64 proyectos productivos de excombatientes que tienen relaci¨®n con textiles. Desde Icononzo, en el Tolima, a cuatro horas de Bogot¨¢, Juan Perea, que estuvo 14 a?os en las FARC, habla con orgullo de la Cooperativa Mulitactiva del Com¨²n Tejiendo Paz, y de la colecci¨®n Telario 2020, que lanzaron en diciembre pasado. ¡°No solo se trata de buscar ingresos econ¨®micos para vivir, sino tambi¨¦n de transmitir diversos mensajes alusivos a la paz y vincularnos con las personas de la comunidad¡±, dice Perea, m¨¢s conocido como Gonzalo, su alias durante la guerra.

Chocoano, de 45 a?os, no ten¨ªa idea de confecci¨®n pero ha aprendido desde dise?o hasta administraci¨®n. Ahora es el gerente y sue?a con posicionar la marca Avanza. ¡°Primero dise?¨¢bamos y confeccion¨¢bamos emp¨ªricamente, pero empezamos a trabajar con una dise?adora de la sociedad civil y sacamos la primera colecci¨®n, estamos preparando otra¡±, cuenta. Telario 2020, dise?ado por Daniela Castellanos, se inspira en los ¨¢rboles que ellos conoc¨ªan en la selva y que quedaron estampados en vestidos y camisas. Adem¨¢s, las etiquetas de cada prenda traen informaci¨®n de esos ¨¢rboles. Su objetivo es compartir sus ense?anzas sobre la naturaleza y la selva a trav¨¦s de la moda.

Los proyectos de moda han permitido unir a excombatientes con j¨®venes simpatizantes del acuerdo de paz. Es el caso de ?ngela Herrera y un grupo de estudiantes de ciencias pol¨ªticas que fundaron Manifiesta Colombia despu¨¦s de hacer un voluntariado con excombatientes. ¡°Nuestra apuesta es mandar un mensaje a trav¨¦s de las prendas: que la moda es una v¨ªa de creaci¨®n y puestos de empleo para personas que enfrentan discriminaci¨®n por su pasado, en un pa¨ªs tan polarizado como este, y que son nuevos en la inmersi¨®n al mercado laboral. En otras palabras, usar la moda como una herramienta para construir paz¡± dice Herrera.

En la Plaza de Bol¨ªvar, frente al palacio de Gobierno, en el Congreso y en ferias de moda se han visto sus colecciones cargadas de mensajes. Las modelos llevan tambi¨¦n carteles que piden que se implemente el acuerdo de paz o que pare el asesinato de excombatientes. Manifiesta emplea tambi¨¦n a v¨ªctimas de la violencia y a un grupo de j¨®venes que se encargan del mercadeo. Han enviado m¨¢s de 6.000 prendas por todo el pa¨ªs y en cada una de ellas cuentan la historia de quienes las confeccionaron. ¡°Para nosotros es importante la historia detr¨¢s de las prendas. As¨ª, en otras ciudades conocen la historia de Ruth, Gonzalo o Yorlenis. Es m¨¢s significativa una prenda que dice que apoya la paz y que es hecha por excombatientes, es coherencia¡±, afirma Herrera.

La pandemia ha significado un desaf¨ªo para los excombatientes que apuestan por entrar a esta industria. En el norte de Colombia, Tierra Grata y Fariana confecciones, pasaron de producir jeans, sudaderas y gorras, a confeccionar mascarillas. Janeidis Mart¨ªnez, que estuvo 19 a?os en la guerrilla cosiendo camuflados, ahora hace delantales y uniformes para enfermeros y dirige la f¨¢brica de textiles donde trabajan 10 mujeres. ¡°Todav¨ªa no nos da para vivir porque no hay un mercado seguro pero seguimos intentando¡±, dice desde La Guajira, en el norte de Colombia. Su proyecto fue seleccionado por la Misi¨®n de Verificaci¨®n de las Naciones Unidas como un Proyecto de Impacto R¨¢pido y recibi¨® apoyo financiero.

Tambi¨¦n desde el Caribe, Jhon Alvarr¨¢n, otro excombatiente, asegura que la vitrina de las ferias de moda significa un impulso que les da esperanza. ¡°No es f¨¢cil salir de una econom¨ªa en el conflicto armado a una real¡±, dice. ¡°Para nosotros es muy importante mostrar nuestros productos al mundo y generar alianzas con empresarios. Es la mejor manera de ayudarnos en la reincorporaci¨®n¡±.

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