El ganador de las elecciones en Marruecos forma una coalici¨®n de Gobierno en sinton¨ªa con el rey Mohamed VI
El islamista Partido de la Justicia y el Desarrollo pasa a la oposici¨®n tras la debacle que sufri¨® en las elecciones del 8 de septiembre
El futuro pol¨ªtico de Marruecos comienza a perfilarse, tras el derrumbe de los islamistas en las elecciones legislativas del 8 de septiembre, que puso fin a una d¨¦cada de gobiernos encabezados por el Partido de la Justicia y el Desarrollo (PJD). El multimillonario Aziz Ajanuch, elegido por el rey Mohamed VI como jefe electo del Gobierno, anunci¨® este mi¨¦rcoles el acuerdo para formar un Ejecutivo de coalici¨®n integrado por los tres partidos m¨¢s votados: el Reagrupamiento Nacional de Independientes (RNI) del propio Ajanuch ¨Cque obtuvo 102 de los 395 diputados del Parlamento¨C, el Partido de la Autenticidad y Modernidad (PAM), con 87 parlamentarios, y el Istiqlal, con 81. Durante una rueda de prensa en la sede del RNI, Ajanuch marc¨® cu¨¢l ser¨¢ la prioridad de su Gabinete: las ¡°reformas econ¨®micas y sociales¡±.
Ajanuch no concret¨® c¨®mo se repartir¨¢n las carteras entre los tres partidos ni tampoco si su Gobierno acometer¨¢ cuestiones pol¨¦micas como la reforma del C¨®digo Penal, de fuerte calado social. Sobre todo, art¨ªculos como los que condenan con c¨¢rcel las relaciones fuera del matrimonio y las relaciones entre personas del mismo sexo.
No hay ninguna sorpresa en esta alianza para formar un Gabinete que Ajanuch, el segundo hombre m¨¢s rico de Marruecos, solo por detr¨¢s del rey Mohamed VI, defini¨® como ¡°de consenso¡±. Los islamistas del PJD dejaron muy claro, tras la debacle sufrida al pasar de 125 a 13 diputados, que pasaban a la oposici¨®n. Tras casi 10 accidentados a?os como l¨ªder de sucesivos Ejecutivos, en los que el partido ha experimentado el desgaste que conlleva gobernar pese a no disponer de todos los resortes del poder, los islamistas deber¨¢n conformarse con la modesta posici¨®n de octava fuerza pol¨ªtica de un Parlamento muy atomizado. Adem¨¢s de salir del Gobierno, el PJD ha perdido las alcald¨ªas de Rabat, Marrakech, Fez, T¨¢nger, Mekn¨¦s, Agadir, Kenitra, Sal¨¦ y tambi¨¦n las de cientos de municipios medianos. Esas grandes ciudades constitu¨ªan su principal nicho de votos.
Tambi¨¦n se queda fuera del Ejecutivo una de las grandes formaciones hist¨®ricas de la oposici¨®n marroqu¨ª, la Uni¨®n Socialista de Fuerzas Populares (USFP), partido que surgi¨® de una escisi¨®n del Istiqlal en 1959, y que obtuvo 34 esca?os en las legislativas.
Las tres formaciones del Gobierno tienen bastantes puntos ideol¨®gicos en com¨²n y es previsible que el nuevo Ejecutivo act¨²e en plena sinton¨ªa con el rey Mohamed VI, que sigue marcando las grandes directrices del pa¨ªs. El monarca nombra directamente a los titulares de varios de los ministerios de m¨¢s peso, aquellos que se conocen como ¡°de soberan¨ªa¡±, como el de Asuntos Religiosos, Exteriores e Interior. El propio Aziz Ajanuch era desde hace 14 a?os titular del Ministerio de Pesca y Agricultura, bajo distintos Gobiernos de coalici¨®n.
Tanto el RNI como el PAM, dos de los socios de la nueva coalici¨®n de Gobierno, son partidos a los que la izquierda marroqu¨ª bautiz¨® en los a?os 70 como ¡°administrativos¡±, es decir, cuya creaci¨®n fue impulsada por el palacio real. El objetivo del RNI, en principio, fue contrarrestar a la entonces pujante oposici¨®n progresista. El del PAM, combatir la popularidad de los islamistas del PJD. El RNI data de 1978, durante la ¨¦poca conocida como los ¡°a?os de plomo¡± del reinado de Hass¨¢n II, cuando la represi¨®n pol¨ªtica alcanz¨® su cenit. El PAM fue fundado en 2008 por Al¨ª Fuad el Himma, que es en la actualidad el principal consejero del monarca y que fue en su ni?ez compa?ero de pupitre del rey en el Colegio Real de Rabat.
El ¨²nico partido con raigambre hist¨®rica y base popular de los tres que conformar¨¢n la coalici¨®n de Gobierno es el Istiqlal (Independencia), una formaci¨®n nacionalista, de ra¨ªces conservadoras. La formaci¨®n naci¨® en 1943 y contribuy¨® en gran medida a lograr la independencia del pa¨ªs, en 1956, frente al protectorado franco-espa?ol.
El jefe electo del Gobierno recalc¨® que su Gabinete se guiar¨¢ por lo que defini¨® como ¡°los fundamentos del pa¨ªs¡±, es decir, las ¡°l¨ªneas rojas¡± intocables en Marruecos tanto para la oposici¨®n como para la prensa del pa¨ªs: el islam, la defensa de la unidad territorial -sobre todo en lo que ata?e al S¨¢hara Occidental- y la ¡°monarqu¨ªa constitucional¡±.
Thierry Desrues, investigador del Centro Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC), indic¨® por tel¨¦fono desde Espa?a que est¨¢ coalici¨®n de solo tres partidos marca un punto de ruptura respecto a las anteriores, que sol¨ªan integrar entre cinco y ocho formaciones. ¡°Esta coalici¨®n es m¨¢s homog¨¦nea. Habr¨¢ poca discrepancia entre ellos¡±. Aunque el Istiqlal tiene un sesgo m¨¢s conservador que las otras dos formaciones, Desrues piensa que ese aspecto no tendr¨¢ ninguna consecuencia a la hora de gobernar.
¡°Las ¨¦lites del Istiqlal est¨¢n formadas por tecn¨®cratas, igual que las del RNI¡±, se?ala el investigador. ¡°Los tres partidos tienen contradicciones internas que reflejan la complejidad de la sociedad marroqu¨ª, pero va en sus genes el hecho de adaptarse a las orientaciones del rey. Sabr¨¢n hacerlo sin ning¨²n esfuerzo¡±.
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