La izquierda italiana retoma el pulso con la conquista de Roma y Tur¨ªn
La izquierda se hace con las cinco ciudades m¨¢s grandes de Italia tras la segunda vuelta de las elecciones municipales marcadas por una exigua participaci¨®n del 44, 25%
Roma tendr¨¢ un alcalde socialdem¨®crata siete a?os despu¨¦s de que el ¨²ltimo, Ignazio Marino, tuviera que dimitir por un esc¨¢ndalo de supuesta corrupci¨®n.. Roberto Gualtieri, exministro de Econom¨ªa del Partido Democr¨¢tico (PD) y exeuroparlamentario, ocupar¨¢ el sill¨®n de presidencia de la Junta de la Asamblea de Roma. Sustituir¨¢ a Virginia Raggi, punta de lanza del ascenso del Movimiento 5 Estrellas (M5S) hace cinco a?os y claro reflejo del fracaso del partido anticasta en el dif¨ªcil paso de la protesta en la calle a gobernar las instituciones. La izquierda culmina con Roma un resultado excelente en las elecciones municipales, donde se asegura el mando de las cinco principales ciudades de Italia (Roma, Mil¨¢n, Tur¨ªn, Bolonia y N¨¢poles) en los pr¨®ximos cinco a?os. La exigua participaci¨®n en esta segunda vuelta ¡ªse vot¨® durante la jornada del domingo y este lunes hasta las 15.00 horas¡ª, de un 44,25% seg¨²n los datos provisionales del Ministerio del Interior, deja la nota amarga de estos comicios, la ¨²ltima gran prueba de fuego antes de las generales de 2023.
Italia volvi¨® entre el domingo y la ma?ana de este lunes a las urnas para celebrar la segunda vuelta de los comicios administrativos, que deb¨ªan decidir todav¨ªa el destino de los ayuntamientos de 65 ciudades, tras un primer turno los pasados 3 y 4 de octubre, cuando el centroizquierda se impuso sin necesidad de esperar a la segunda ronda en Mil¨¢n, Bolonia (norte) y N¨¢poles (sur), entre otras ciudades. El resultado en cada uno de los 1.340 municipios que estaban en juego en ambos turnos traza una l¨ªnea de puntos que esboza el equilibrio actual de la pol¨ªtica italiana. Un escenario en el que la izquierda moderada se reconstruye formando un bloque con distintos partidos, incluido el Movimiento 5 Estrellas (en Bolonia y N¨¢poles ha funcionado perfectamente esta uni¨®n) para hacer frente a la potencia de la coalici¨®n de derechas (Hermanos de Italia, Forza Italia y la Liga).
La probeta de las municipales, donde se han ensayado varios experimentos, refuerza la tesis del secretario general del PD, Enrico Letta, y del l¨ªder del Movimiento 5 Estrellas, Giuseppe Conte: con la actual ley electoral solo es posible hacer frente a la derecha unidos en una suerte de coalici¨®n de centroizquierda.
Adem¨¢s, los dos principales partidos de la derecha (Liga y Hermanos de Italia) fracasan en todas sus apuestas territoriales y se consuelan con los resultados de Forza Italia, su socio menor, que salva los muebles en Trieste y Calabria (donde se eleg¨ªa al gobernador). La tendencia marcada en esta segunda vuelta habla tambi¨¦n de un regreso del votante de derechas al centro ideol¨®gico. ¡°Tenemos que reflexionar por qu¨¦ hemos dado demasiados bandazos en los ¨²ltimos meses¡±, explica un diputado de la Liga a este peri¨®dico. Los extremos, al menos en estos comicios, han dejado de ser rentables. La capital de Italia, seg¨²n el escrutinio alcanzado tras el cierre de las urnas, aporta la imagen m¨¢s n¨ªtida de la situaci¨®n pol¨ªtica del pa¨ªs. Tras cinco a?os de Gobierno de Raggi, que supuso el comienzo del ascenso en las instituciones del Movimiento 5 Estrellas y del inicio de una tormenta populista sin parang¨®n en Europa, el PD recupera el pulso perdido entre su electorado.
La rotunda victoria de Gualtieri (60,1% de los votos) en la segunda vuelta ante el candidato de la derecha, Enrico Michetti (39,9%), relanza al partido que dirige hoy Letta y lo convierte de nuevo en candidato a gobernar el pa¨ªs y en el muro ante el avance de los populismos de ultraderecha en Italia. La clara derrota de Michetti ¡ªque fue el candidato procedente de la sociedad civil elegido por la l¨ªder de Hermanos de Italia, Giorgia Meloni, para liderar la coalici¨®n de derechas en Roma¡ª deja en un aprieto a su principal patrocinadora. ¡°El centroderecha sale derrotado de estas elecciones. Pero yo no hablar¨ªa de una debacle¡±, se?al¨® la propia Meloni, que salud¨® a la prensa con un ¡°buenas tardes, por decir algo¡±. Este problema se a?ade al del fracaso de Mil¨¢n: el actual alcalde, Giuseppe Sala, arras¨® en la primera vuelta al candidato designado por Matteo Salvini. El l¨ªder de la Liga tambi¨¦n tendr¨¢ ahora que hacer cuentas internas con la derrota en Varese (Lombard¨ªa), uno de los feudos hist¨®ricos de su partido que no logra recuperar y que continuar¨¢ en manos socialdem¨®cratas.
Roma no es la ¨²nica gran ciudad que vuelve a la izquierda. El progresista Stefano Lo Russo, con un 59,2%, ha logrado hacerse con la alcald¨ªa de Tur¨ªn sobre su contrincante, Paolo Damilano, que habr¨ªa logrado recabar un 40,8% de los sufragios. ¡°Es un resultado m¨¢s all¨¢ de nuestras expectativas¡±, un logro ¡°importante¡± que conlleva ¡°mucha responsabilidad¡±, celebr¨® el nuevo regidor, que sustituye a la grillina Chiara Appendino. La capital piamontesa fue tambi¨¦n una de las banderas del M5S para demostrar que era capaz de gestionar uno de los motores econ¨®micos de Italia. Tal y como sucedi¨® con Roma, los ciudadanos terminaron hartos de su alcaldesa, que ni siquiera ha optado a la reelecci¨®n.
Trieste, ¨²nica a la derecha
La izquierda logr¨® tambi¨¦n la mayor¨ªa de capitales de provincia como Caserta, Cosenza, Isernia, Latina, Savona y Varese, mientras que en Trieste seguir¨¢ el actual alcalde, el derechista Roberto Dipiazza, tras una fren¨¦tica remontada (51,3%). Esa es la ¨²nica alegr¨ªa de la derecha, que afronta un catastr¨®fico resultado para la coalici¨®n que forman Hermanos de Italia, la Liga y Forza Italia y que en t¨¦rminos ten¨ªsticos podr¨ªa resumirse en un 6-1. La victoria en la capital de la regi¨®n de Friuli-Venezia Giulia (a manos de un candidato de Forza Italia que no comulga con las tesis ultras de Meloni y Salvini) deja al menos alg¨²n argumento donde agarrarse ante un horizonte sin grandes citas electorales ¡ªm¨¢s all¨¢ de la sucesi¨®n en la Presidencia de la Rep¨²blica, que elige el Parlamento¡ª hasta los comicios generales de 2023.
La participaci¨®n ha sido la peor noticia de esta segunda vuelta. Ciudades como Tur¨ªn han marcado su peor registro hist¨®rico, con un 42% de afluencia a las urnas. Pero el dato general habla tambi¨¦n de un votante medio de derechas que se ha quedado en casa en esta segunda vuelta ¡ªlos distritos en Roma con m¨¢s participaci¨®n, por ejemplo, son de los feudos de la izquierda¡ª y que, en unas elecciones generales, podr¨ªa volver a ser m¨¢s activo. Un dato que mantiene abierto un partido al que todav¨ªa le queda un a?o y medio para llegar a su desenlace.
Los retos de Gualtieri en Roma
Roma, donde la izquierda se impone con claridad, ser¨¢ una gran prueba de gesti¨®n para su nuevo alcalde y la demostraci¨®n de fuerza del PD para exhibir su capacidad de administraci¨®n de una ciudad que parec¨ªa ingobernable en los ¨²ltimos a?os. La capital de Italia, segunda ciudad con mayor extensi¨®n de Europa (1.285 kil¨®metros cuadrados), un monstruo con una densidad poblacional baja y una exigua recaudaci¨®n de impuestos, atraviesa grav¨ªsimos problemas estructurales desde hace d¨¦cadas. Los retos que deber¨¢ afrontar Gualtieri desde el primer minuto de su mandato ser¨¢n la fallida recogida de basuras y la colosal empresa p¨²blica que los gestiona (8.000 trabajadores), unos transportes obsoletos, un mantenimiento de la v¨ªa p¨²blica deficiente o la acumulaci¨®n de retrasos en los servicios p¨²blicos (la media para enterrar a un familiar lleg¨® a ser de 35 d¨ªas en el mes de abril).
Roma comenz¨® una dram¨¢tica ca¨ªda en la calidad de sus servicios p¨²blicos desde que Walter Veltroni, alcalde del PD, abandon¨® el cargo en 2008. Desde entonces, los casos de corrupci¨®n y mala gesti¨®n se han sucedido y la ciudad ha entrado en una espiral de bloqueo sin precedentes. Raggi alcanz¨® el cargo con la promesa de revertir la situaci¨®n, pero todas las encuestas se?alan que los romanos consideran que que las cosas no han mejorado en los ¨²ltimos cinco a?os. Gualtieri tendr¨ªa una misi¨®n muy complicada en los pr¨®ximos meses.
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