Roma, term¨®metro de la pol¨ªtica italiana

Italia medir¨¢ entre este domingo y el lunes el equilibrio de fuerzas en un pa¨ªs donde la pol¨ªtica ha quedado congelada desde que lleg¨® Mario Draghi a la presidencia del Consejo de Ministros el pasado febrero. El Ejecutivo de unidad, concentrado en una agenda tecn¨®crata, ha puesto la sordina en las habituales refriegas del Parlamento y a los intentos sist¨¦micos por derrocar al Gobierno de turno. Este fin de semana vuelve la pol¨ªtica y 1.192 ayuntamientos pondr¨¢n las urnas en la primera vuelta de los comicios para elegir a sus alcaldes. Una decisi¨®n que deber¨¢ ratificarse dentro de dos semanas en una segunda vuelta donde la derecha afronta un escenario calamitoso en las cinco principales urbes (Roma, Tur¨ªn, Mil¨¢n, Bolonia y N¨¢poles) y la izquierda se rearmar¨¢ en algunas urbes en coalici¨®n con el Movimiento 5 Estrellas (M5S). La foto que salga del 14 de octubre (fecha de la segunda vuelta), especialmente en la ciudad de Roma, permitir¨¢ descifrar algunos de los grandes movimientos pol¨ªticos que se avecinan.

La capital de Italia, segunda ciudad con mayor extensi¨®n de Europa (1.285 kil¨®metros cuadrados), un monstruo con una densidad poblacional baja y una exigua recaudaci¨®n de impuestos, atraviesa grav¨ªsimos problemas estructurales desde hace d¨¦cadas. Los temas principales siguen siendo la fallida recogida de basuras (8.000 trabajadores), unos transportes obsoletos, un mantenimiento de la v¨ªa p¨²blica deficiente o la acumulaci¨®n de retrasos en los servicios p¨²blicos (la media para enterrar a un familiar lleg¨® a ser de 35 d¨ªas en el mes de abril). Los jabal¨ªes campan a sus anchas por las calles de algunos barrios.

Roma es un monstruo que nadie ha logrado dominar desde que Walter Veltroni fue su alcalde entre 2001 y 2008. Es tan complicada que, a veces, da la sensaci¨®n de que los partidos prefieren no tener que gobernarla. En junio de 2016, Virginia Raggi y el Movimiento 5 Estrellas (M5S) acariciaban en la segunda vuelta la alcald¨ªa de Roma. Era una gran noticia. Pero una de las m¨¢ximas dirigentes del M5S, Paola Taverna, resumi¨® en una frase lapidaria lo que representa la capital de Italia para los partidos: ¡°Hay un complot para que ganemos las elecciones. As¨ª nos har¨¢n quedar mal¡±. El tiempo, en parte, le dio la raz¨®n.

Raggi, la actual alcaldesa, lleg¨® como un haz de luz hace cinco a?os para poner en marcha una ciudad con el motor gripado. Fue elegida con el 70% de los votos. Pero los resultados de la que fue punta de lanza del desembarco del M5S en las instituciones no llegaron y tiene ahora discretas posibilidades de pasar a la segunda vuelta (que se activa si nadie llega al 50,1% de los votos en la primera ronda). Su ca¨ªda explica tambi¨¦n la de su partido, que perder¨¢ la alcald¨ªa de Tur¨ªn (hoy en manos de Chiara Appendino) y la de la formaci¨®n a nivel nacional. Los grillinos, adem¨¢s, han firmado alianzas con el Partido Democr¨¢tico (PD) en muchas ciudades (N¨¢poles o Bolonia), pero los roces en Roma no lo han permitido. ¡°Virginia [Raggi] quiso presentarse y el partido no ten¨ªa en ese momento la fuerza suficiente para imponer un candidato de consenso con el PD¡±, explica un diputado del M5S. Su presumible derrota en la primera vuelta reforzar¨¢ la v¨ªa de la coalici¨®n de centroizquierda entre los grillinos y el PD como ¨²nica v¨ªa de supervivencia en las generales.

Desastre en Mil¨¢n

La coalici¨®n de derecha (Liga, Forza Italia y Hermanos de Italia) no ha sabido aprovechar ese escenario de debilidad y present¨® en Roma a Enrico Michetti, un desconocido locutor de radio con nostalgia del Imperio romano. ¡°Un error descomunal. El candidato no est¨¢ a la altura y una victoria en Roma hubiera sido crucial¡±, explica un diputado de Hermanos de Italia. Michetti es favorito para la primera vuelta, pero todas las combinaciones lo dejar¨ªan fuera en la segunda. En Bolonia, N¨¢poles y Mil¨¢n (donde lidera los sondeos el actual alcalde, el socialdem¨®crata Giuseppe Sala), los resultados ser¨¢n tambi¨¦n negativos.

El ¨²nico candidato de la derecha que parece en condiciones de seducir por s¨ª mismo al electorado y a una parte del poder econ¨®mico es Paolo Damilano, un empresario que se presenta como cabeza de lista de la coalici¨®n en Tur¨ªn. Un escenario que obligar¨¢ a comparar el ¨¦xito de los aspirantes presentados por los distintos socios de las formaciones de derechas y que, probablemente, dejar¨¢ a Matteo Salvini ¡ªl¨ªder de La Liga¡ª todav¨ªa m¨¢s tocado. Esta semana ha sido p¨¦sima para el dirigente. El ministro de Desarrollo Econ¨®mico y l¨ªder del ala centrista del partido, Giancarlo Giorgetti, destroz¨® a Salvini en una entrevista en La Stampa. Dos d¨ªas m¨¢s tarde, se supo que Luca Morisi, el gur¨² digital del l¨ªder de ultraderecha, el hombre que marc¨® su agenda en redes y lo convirti¨® en el pol¨ªtico m¨¢s seguido de Europa sobre la base de se?alar a inmigrantes o a pol¨ªticos por sus asuntos personales, hab¨ªa sido detenido por pasarle droga a dos prostitutos rumanos a quienes hab¨ªa contratado.

El ¨²ltimo dato que aportar¨¢ Roma en las municipales habla sobre la viabilidad de un nuevo camino del centro liberal en Italia. Carlo Calenda, ministro de Desarrollo Econ¨®mico (2016-2018) con Matteo Renzi como primer ministro, se presenta con una agenda pragm¨¢tica y desideologizada que ha logrado captar la atenci¨®n de los votantes pese a no tener apenas estructura de partido. Reformas, eficiencia y trabajo. Da la sensaci¨®n de que, en el fondo, es el ¨²nico que verdaderamente quiere ser alcalde de la ciudad. Y si el experimento funciona, el universo de Forza Italia, hermano menor centrista de la coalici¨®n de derechas ¡ªharto de las estridencias nacionalistas de Meloni y Salvini¡ª, y la Italia Viva de Matteo Renzi podr¨ªan dar el paso definitivo para configurar un nuevo espectro pol¨ªtico. El polit¨®logo y experto en sondeos Roberto D¡¯Alimonte cree que ¡°hay un espacio en el centro donde gravitan varios partidos desordenadamente donde Calenda podr¨ªa invertir su resultado aunque no fuera alcalde¡±. Una idea que entusiasma al establishment econ¨®mico del pa¨ªs y que enterrar¨ªa cuatro a?os de tormenta populista.

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