La captura de ¡®Otoniel¡¯ no altera el panorama del narcotr¨¢fico en Colombia
El presidente Iv¨¢n Duque asegura que el capo que estaba al mando del Clan del Golfo ser¨¢ extraditado a Estados Unidos
El presidente de Colombia, Iv¨¢n Duque, ha celebrado con grandilocuencia la captura de Dairo Antonio ?suga, alias Otoniel, como el ¡°golpe m¨¢s importante de este siglo contra el narcotr¨¢fico¡± en el pa¨ªs andino. M¨¢s all¨¢ del peso simb¨®lico de la ca¨ªda de un gran capo que durante a?os hab¨ªa escapado del cerco de las fuerzas de seguridad, la detenci¨®n del jefe del Clan del Golfo, considerada la mayor banda del narcotr¨¢fico con cerca de 3.000 hombres, abre inc¨®gnitas sobre el futuro tanto de esa organizaci¨®n criminal como de las din¨¢micas de la violencia en las regiones colombianas donde tiene presencia.
Una c¨¢rcel en Estados Unidos es el destino m¨¢s probable del l¨ªder de El Clan del Golfo, una banda que ha pasado por varios nombres, se autodefine como Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) y surgi¨® tras la desmovilizaci¨®n de los grupos paramilitares en el Gobierno de ?lvaro Uribe (2002-2010). ¡°Otoniel debe ser extraditado a la mayor brevedad. Ese proceso debe ser ¨¢gil, y una vez cumpla sus condenas por narcotr¨¢fico en los EE UU deber¨¢ responder por todos sus cr¨ªmenes en Colombia. La extradici¨®n de ese bandido es urgente para la seguridad del hemisferio, para que se conozca toda la red de v¨ªnculos entre los c¨¢rteles de los distintos pa¨ªses¡±, reafirm¨® Duque este lunes en una entrevista publicada por el peri¨®dico El Tiempo. ¡°Otoniel y el Clan del Golfo son responsables de mover m¨¢s de 160 toneladas de coca¨ªna por a?o. Cifras as¨ª nunca fueron alcanzadas por Pablo Escobar, pero adem¨¢s este bandido podr¨ªa ser m¨¢s o igual de sanguinario que el cabecilla del c¨¢rtel de Medell¨ªn¡±, insisti¨® el mandatario, al defender una comparaci¨®n que todos los observadores han considerado desproporcionada.
Analistas y pol¨ªticos han felicitado al Gobierno y las fuerzas de seguridad por el ¨¦xito de la llamada operaci¨®n Osiris, aunque su alcance sobre el terreno es dif¨ªcil de pronosticar. Es improbable que reduzca la violencia, pues este tipo de capturas a menudo llevan a fen¨®menos de fragmentaci¨®n y luchas por un relevo. ¡°Por un lado, el Gobierno se merece esta ¡®vuelta ol¨ªmpica¡¯, pero esto deber¨ªa estar invitando a una reflexi¨®n mucho m¨¢s profunda sobre la fallida guerra contra las drogas y las razones por las cuales no puede ser una victoria estructural¡±, apunta el analista Sergio Guzm¨¢n, director de la consultora Colombia Risk Analysis. ¡°En este momento no sabemos realmente cu¨¢l es el impacto, pero en el largo plazo no va a cambiar nada. En cuanto al narcotr¨¢fico, mientras los consumidores sigan consumiendo y la prohibici¨®n contin¨²e, esto no mueve realmente la aguja¡±, se?ala.
Reciclado varias veces en el mundo criminal despu¨¦s de haber sido miembro de la guerrilla del EPL y de los paramilitares de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), el prontuario de ?suga inclu¨ªa 122 ¨®rdenes de captura. Duque lo ha se?alado como un asesino de polic¨ªas, l¨ªderes sociales y centenares de personas, adem¨¢s de reclutador de menores, violador de ni?os y adolescentes y responsable de desplazamientos masivos. ¡°Otoniel es uno de los responsables de la explotaci¨®n sexual en Colombia. Lidera la trata de mujeres y ni?as, y tal vez ninguno de estos cr¨ªmenes quede en su prontuario de extradici¨®n¡±, se?alaba la periodista Jineth Bedoya, s¨ªmbolo de la lucha contra la violencia sexual en Am¨¦rica Latina, con ocasi¨®n de su captura. Aunque el Gobierno sostiene que la detenci¨®n marca el fin del Clan del Golfo, diversas voces han cuestionado esa afirmaci¨®n.
¡°Mientras Duque hace ¨¦nfasis en reclamar un lugar en la historia, en las regiones donde el Clan del Golfo es m¨¢s poderoso tienen la certeza de que con este golpe la organizaci¨®n est¨¢ lejos de quedar liquidada¡±, apunta el an¨¢lisis de La Silla Vac¨ªa, el portal pol¨ªtico de referencia. Las AGC son responsables de cerca de la mitad de la droga que ha salido de Colombia, seg¨²n las autoridades. A pesar de que el Gobierno ha logrado reducir el ¨¢rea sembrada de hoja de coca ¨Cpas¨® de 154.000 a 143.000 hect¨¢reas al cierre de 2020, seg¨²n la ONU¨C, la producci¨®n de coca¨ªna por hect¨¢rea se ha incrementado.
¡°Es un hito importante, un esfuerzo sostenido de m¨¢s de cinco a?os¡±, apunta Jorge Mantilla, experto en las din¨¢micas del conflicto armado de la Fundaci¨®n Ideas para la Paz (FIP), sobre las operaciones militares. ¡°Con la salida de Otoniel de alguna manera se acaba la generaci¨®n de las tres guerras ¨Cla gente que estuvo en EPL, AUC y despu¨¦s se reencauch¨® en AGC¨C y eso representa un s¨ªmbolo importante dentro del formato de ej¨¦rcito que pretend¨ªa montar Otoniel¡±, apunta. Con su captura se acaba tambi¨¦n ese componente de clan, identitario, asociado fundamentalmente a los ?suga, en un declive que ha incluido la ca¨ªda de varios de sus parientes en la ¨²ltima d¨¦cada. Otoniel hab¨ªa intentado crear un discurso m¨¢s pol¨ªtico y hab¨ªa pedido pista para un proceso de sometimiento que nunca cristaliz¨®.
¡°Las AGC seguir¨¢n siendo un actor determinante del conflicto en las zonas tradicionales de influencia ¨CUrab¨¢ antioque?o, sur de C¨®rdoba, Bajo Cauca, partes del Choc¨®¨C, y ah¨ª van a seguir amparados bajo la misma marca¡±, vaticina Mantilla. Esas zonas son una suerte de columna vertebral, pero tiene tambi¨¦n estructuras en otras partes del pa¨ªs, donde son m¨¢s probables los fen¨®menos de fragmentaci¨®n. ¡°El narcotr¨¢fico no se va a ver afectado. Las conexiones e intermediarios de los enclaves de producci¨®n de coca y de las rutas controladas por los mandos medios de AGC y compradores internacionales no sufrir¨¢n mayor afectaci¨®n log¨ªstica¡±, apunta. ¡°Sin embargo, el otro regl¨®n importante de la econom¨ªa de las AGC son ejercicios de control criminal asociados a la extorsi¨®n, la miner¨ªa ilegal, la captura de recursos p¨²blicos a trav¨¦s de las administraciones municipales. Ah¨ª s¨ª podemos esperar variaciones importantes¡±, matiza.
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