Bolsonaro cumple su promesa: un juez ¡°terriblemente evang¨¦lico¡± entra al Supremo de Brasil
El presidente brasile?o cumple as¨ª con un compromiso que hizo con los electores ultraconservadores y reconoce el creciente poder pol¨ªtico de esta comunidad
Brasil, un Estado laico, tendr¨¢ a partir de ahora en su m¨¢ximo tribunal un abogado que tambi¨¦n es pastor de la Iglesia Presbiteriana. Andr¨¦ Mendon?a, de 48 a?os, recibi¨® este martes la bendici¨®n del Senado (47 s¨ªes y 32 noes) para convertirse en uno de los once jueces del Supremo Tribunal Federal. Otros miembros de la corte son creyentes, pero es la primera vez que el elegido es abiertamente religioso en la esfera p¨²blica, lo que refleja el creciente poder de los evang¨¦licos. El presidente Jair Bolsonaro cumple as¨ª su promesa de nombrar a alguien ¡°terriblemente evang¨¦lico¡± para una corte que tiene un activo papel en la pol¨ªtica brasile?a.
La primera aparici¨®n p¨²blica del antiguo militar al ganar las elecciones fue un rezo en familia. Tras agradecer a Dios su nombramiento, Mendon?a ha descrito su significado: ¡°Un paso para un hombre y un salto para los evang¨¦licos¡±.
Bolsonaro, un ultraconservador de extrema derecha, se apunta as¨ª un tanto ante los evang¨¦licos, algo crucial en v¨ªsperas de un a?o electoral porque son el colectivo que vot¨® de manera m¨¢s un¨¢nime por ¨¦l en 2018. Mendon?a ha prometido, durante una larga comparecencia en el Senado, escrupuloso respeto al Estado laico y la democracia: ¡°Como me digo a m¨ª mismo, en la vida, la Biblia; en el Supremo, la Constituci¨®n¡±. El nuevo juez dice que pretende ¡°defender la laicidad del Estado y garantizar la libertad religiosa de todos los ciudadanos, incluidos los que optan por no tener religi¨®n¡±. Los ataques a las religiones de origen africano se han multiplicado.
Llegar hasta el tribunal Supremo ha sido una especie de via crucis para este abogado que hizo el doctorado en la Universidad de Salamanca (Espa?a), fue ministro de Justicia y ahora dirige la Abogac¨ªa General de la Uni¨®n. Durante cuatro meses, el presidente del Senado, Rodrigo Pacheco, le ha mantenido en un limbo porque se resist¨ªa a incluir su nombramiento al orden del d¨ªa, molesto con Bolsonaro. Los parlamentarios y pastores evang¨¦licos han hecho un enorme esfuerzo de movilizaci¨®n ante una votaci¨®n que se anticipaba re?ida y no lo ha sido.
A preguntas de los senadores, el nuevo juez del Supremo se ha comprometido a no discriminar a nadie (incluida la comunidad LGTB+ y a sus familias, a las que ha mencionado expresamente a instancias de un diputado opositor que tiene marido e hijos). Su actitud ha sido la de buscar constantemente la concordia y los puntos en com¨²n incluso con los m¨¢s cr¨ªticos, adem¨¢s de mostrarse humilde.
En Brasil, como en otros pa¨ªses, los altos tribunales han liderado la ampliaci¨®n de derechos civiles como el matrimonio homosexual, legalizado en 2013, o el derecho de las personas transg¨¦nero a cambiar de nombre oficial sin evaluaci¨®n m¨¦dica, autorizado en 2018. El aborto es legal solo en tres supuestos y en los ¨²ltimos a?os se han multiplicado las iniciativas legislativas para restringirlo a¨²n m¨¢s. Es el segundo miembro del Supremo que nombra Bolsonaro (su admirado Donald Trump nombr¨® a tres, lo que ha colocado en peligro el derecho al aborto en EEUU). Si el brasile?o fuera reelegido, se espera que impulse la llamada agenda de las costumbres.
La sociedad brasile?a es conservadora. Ning¨²n otro pa¨ªs tiene tantos cat¨®licos pero est¨¢n en franco retroceso. Si en 1980 supon¨ªan el 90% frente a un 6,6% de evang¨¦licos, estos tienen un avance imparable. Ahora la proporci¨®n es 65%- 22%. Reflejo de ese profundo cambio social, la bancada evang¨¦lica es una de las mayores del Congreso, con 127 de los casi 600 congresistas. Antes de la pandemia, se reun¨ªan una vez por semana a celebrar un culto en sede parlamentaria.
Sus parlamentarios se han movilizado intensamente para lograr la elecci¨®n del hermano Mendon?a, como se llaman entre s¨ª. Llevaron a decenas de pastores a Brasilia para reunirse con cada uno de los 81 senadores. Lo mismo hicieron en los respectivos Estados. ¡°Los senadores siempre vienen a nuestras iglesias a pedir el voto. Esta vez era nuestro turno de pedir¡±, explica el diputado y p¨¢rroco de la Asamblea de Dios S¨®stenes Cavalcante.
Su preocupaci¨®n era perder la oportunidad de poder levantar una barrera de contenci¨®n en el Supremo ante cuestiones progresistas, como el derecho al aborto, derechos de las personas LGTB+, el acceso de las iglesias a los medios o la legalizaci¨®n de las drogas o el juego. ¡°En los ¨²ltimos a?os, la izquierda sali¨® del Gobierno y perdi¨® espacio en el Legislativo. Siempre recurre al Supremo, que no tiene un juez conservador. Con Mendon?a all¨ª, tenemos la garant¨ªa de que al menos pedir¨¢ vistas sobre temas que son del gusto de los conservadores¡±, explica el diputado evang¨¦lico.
Entre los 2.000 casos que heredar¨¢ del juez que se jubila, varios ata?en a asuntos sensibles para Bolsonaro como la petici¨®n para investigar a la primera dama, Michelle Bolsonaro, por una supuesta corruptela u otros vinculados a la gesti¨®n de la pandemia., por la que el Senado ha pedido que sea procesado por cr¨ªmenes contra la humanidad. El fiscal general del Estado lleva un mes estudiando la petici¨®n.
Funcionario de la Abogac¨ªa General del Estado, defendi¨® la ruptura de las medidas de aislamiento social durante los meses m¨¢s duros de la pandemia, incluida la reapertura de los templos religiosos. Durante su gesti¨®n el Ministerio de Justicia elabor¨® un dosier sobre casi 600 personas que se declararon antifascistas y se abrieron cinco investigaciones por difamaci¨®n y calumnias contra el presidente que fueron archivadas por los jueces un detr¨¢s de otra.
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