St¨¦phane S¨¦journ¨¦, l¨ªder de los liberales europeos: ¡°Tenemos que dar un combate pol¨ªtico a los Estados ultraconservadores¡±

Apenas hace un mes que St¨¦phane S¨¦journ¨¦ ejerce como nuevo l¨ªder de los liberales europeos. Este franc¨¦s, nacido en Versalles hace 36 a?os, lidera un grupo en la Euroc¨¢mara de 100 diputados, Renew ¨Den el que tambi¨¦n se incluyen los representantes de Ciudadanos en Espa?a¨D, y ya tiene la oportunidad de ser el ¨¢rbitro de la partida de ajedrez que populares y socialistas europeos juegan por la Presidencia del Parlamento Europeo para la segunda parte de la legislatura. Los primeros ya tienen candidata; los segundos deshojan la margarita, pero no est¨¢n dispuestos a ceder el puesto que ahora ocupa el progresista David Sassoli a cambio de nada.

¡°El Parlamento elige un presidente y no elige otra cosa¡±, responde cuando se le pregunta si est¨¢ dispuesto a abrir el campo y negociar tambi¨¦n sobre la Presidencia del Consejo, ahora ocupada por el liberal belga Charles Michel. ¡°Estoy esperando a que el grupo socialista proponga un candidato. [¡­] Entonces tendremos un debate muy abierto en mi grupo, lo m¨¢s abierto posible y sin ninguna conclusi¨®n anticipada¡±, expone el pol¨ªtico, muy cercano al presidente Emmanuel Macron, con quien comparte su paso previo por el Partido Socialista franc¨¦s. Por sus palabras se concluye que Renew no se siente vinculado al pacto alcanzado entre populares, socialistas y liberales hace dos a?os para repartirse los puestos m¨¢s relevantes de las instituciones.

Al d¨ªa siguiente de que S¨¦journ¨¦ ocupara el cargo ¨Dque hasta hace poco ocupaba el exprimer ministro rumano Dacian Ciolo?¨D, el Parlamento Europeo advirti¨® a la Comisi¨®n de que no iba a tolerar m¨¢s dilaciones en la respuesta a Polonia y Hungr¨ªa por vulnerar el Estado de derecho. Un aviso que ¨¦l, como los grandes grupos de la c¨¢mara, apoy¨®. ¡°El miedo tiene que cambiar de bando. Hoy, Europa teme m¨¢s a la silla vac¨ªa de estos dos pa¨ªses en el Consejo Europeo que ellos a las consecuencias de [infringir] nuestros reglamentos¡±, esgrime. ¡°Por el momento, es insuficiente lo que hizo la Comisi¨®n¡±, a?ade, y no le vale como excusa el argumento de esperar a que el Tribunal de Justicia de la Uni¨®n Europea vaya poniendo las cosas en su sitio a golpe de sentencia: ¡°Hay dos campos, el judicial y el pol¨ªtico¡±. Y a ellos les corresponde este ¨²ltimo. ¡°Hay una deriva inaceptable en esos dos estados¡±, incide.

¡°Hay que poner sanciones¡±

El Estado de derecho, la libertad de prensa, la independencia de la justicia¡­ ¡°Esto es el ADN de Europa. Estos pa¨ªses aceptaron nuestras reglas [al entrar en la UE]. Eso no se est¨¢ cumpliendo. Hay que poner sanciones. No olvido el combate pol¨ªtico que tenemos que dar contra los estados ultraconservadores. Que tambi¨¦n es una lucha para reforzar nuestras reglas europeas¡±. No lo expresa abiertamente, pero cree que la llegada de los liberales alemanes al poder refuerza la posici¨®n de su familia pol¨ªtica en Europa: ¡°En los acuerdos y el programa de gobierno que hay en Alemania hay prioridades de nuestro grupo¡±.

M¨¢s ambiguo se muestra sobre la reforma del Pacto de Estabilidad, el gran debate que ha abierto la Comisi¨®n Europea este oto?o, y en el que su pa¨ªs tiene una clara postura para flexibilizar las normas. Ah¨ª parece alinearse cuando afirma que en las conversaciones se debe tratar la ¡°inversi¨®n en transici¨®n [energ¨¦tica], innovaci¨®n y nuevas tecnolog¨ªas¡±. Una partida que, seg¨²n los n¨²meros de la propia Comisi¨®n, requerir¨¢ inversiones de medio bill¨®n de euros al a?o hasta 2030 para alcanzar los objetivos marcados por Bruselas. Sobre los plazos, se limita a se?alar que por ahora ¡°las cosas est¨¢n abiertas¡± y que, aunque el primer semestre de 2022 corresponde la Presidencia a Francia, lo primero que hay que hacer es ver c¨®mo se vuelve a las reglas que se suspendieron cuando explot¨® la pandemia para evitar as¨ª un impacto econ¨®mico mayor.

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