Las disidencias de Iv¨¢n M¨¢rquez se desmoronan con la muerte de ¡®Roma?a¡¯

Henry Castellanos, Roma?a, uno de los combatientes m¨¢s repudiados entre los disidentes de la extinta guerrilla de las FARC que decidieron retomar las armas encabezados por Iv¨¢n M¨¢rquez, ha muerto este martes en Venezuela, muy cerca del l¨ªmite con Colombia. Las primeras versiones apuntan a que fue asesinado en medio de la guerra territorial que libran distintas facciones disidentes del otro lado de la frontera. Roma?a, m¨¢s guerrero que pol¨ªtico, es particularmente recordado por las llamadas ¡®pescas milagrosas¡¯, los secuestros masivos que las FARC convirtieron en una de las industrias m¨¢s lucrativas de la guerra. Su muerte se suma a la de Hern¨¢n Dar¨ªo Vel¨¢squez, alias El Paisa, otro de los disidentes m¨¢s sanguinarios, que se conoci¨® el domingo, y a la de Jes¨²s Santrich el pasado mayo, tambi¨¦n en confusas circunstancias en territorio venezolano.

Fuentes de la inteligencia colombiana le han filtrado la informaci¨®n al peri¨®dico El Tiempo, que sin embargo no ha sido formalmente confirmada por las autoridades. De una manera similar a El Paisa, Roma?a fue emboscado con r¨¢fagas de fusil muy cerca de la frontera, en el Estado venezolano de Apure, donde las disidencias y grupos criminales se disputan el territorio y las rutas del narcotr¨¢fico. Las hip¨®tesis hablan de ataques de otra facci¨®n de disidentes, el frente d¨¦cimo, aunque otras versiones apuntan que El Paisa fue traicionado por sus propios hombres. ¡°Que salgan de circulaci¨®n estos s¨ªmbolos del terrorismo y del mal y del narcotr¨¢fico, la encarnaci¨®n de hacerle conejo a la paz [incumplir], es una buena noticia. Eso demuestra que los bandidos no tienen madriguera¡±, reaccion¨® este mismo martes el presidente Iv¨¢n Duque al ser consultado sobre la noticia, sin dar mayores detalles o se?alar responsables.

Tanto Roma?a como El Paisa se acogieron en un primer momento al acuerdo de paz firmado entre el Gobierno de Juan Manuel Santos (2010-2018) y las extintas FARC hace ya cinco a?os. Ambos colaboraron por cerca de dos a?os en las labores de reinserci¨®n de excombatientes en la vida civil, pero despu¨¦s abandonaron los espacios de reincorporaci¨®n donde se encontraban alegando inseguridad f¨ªsica y jur¨ªdica. Regresaron a la clandestinidad en el monte. Solo reaparecieron el 29 de agosto de 2019 en un video junto a Santrich e Iv¨¢n M¨¢rquez, quien fuera el jefe negociador de las FARC en los di¨¢logos de La Habana, adem¨¢s de otra veintena de hombres armados con fusiles, para anunciar ¡°una nueva etapa en la lucha armada¡±.

Ese fue el surgimiento del grupo conocido como la Segunda Marquetalia ¨Cel lugar donde nacieron las FARC hace m¨¢s de medio siglo¨C. Aunque en las im¨¢genes afirmaban encontrarse en alg¨²n punto del r¨ªo In¨ªrida, en la regi¨®n amaz¨®nica del sureste de Colombia, diversos observadores e informaci¨®n de inteligencia aseguran que el grupo de excomandantes estaba en territorio venezolano. Desde entonces, el Ejecutivo de Duque ha denunciado en m¨²ltiples ocasiones que las disidencias ¨Cas¨ª como la guerrilla del Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n Nacional (ELN)¨C encuentran refugio del otro lado de la frontera, amparadas por el r¨¦gimen de Nicol¨¢s Maduro.

En medio del ruido medi¨¢tico producido por la presencia de antiguos negociadores, como M¨¢rquez y Santrich, el grupo encendi¨® las alarmas. ¡°La Segunda Marquetalia est¨¢ a¨²n lejos de tener las dimensiones y capacidades de las antiguas FARC. Si bien busca evocar a esta guerrilla, se asemeja m¨¢s a una combinaci¨®n ecl¨¦ctica de facciones armadas que aspiran a tener mayores niveles de autonom¨ªa y que buscan respaldo econ¨®mico o ganar sustento ideol¨®gico¡±, se?alaba en julio un informe de la Fundaci¨®n Ideas para la Paz (FIP). La realidad es que la Segunda Marquetalia se acerca m¨¢s a un grupo con poca influencia territorial y que est¨¢ en fase de formaci¨®n, se?alaban sus expertos.

Las otrora Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, desarmadas y convertidas en un partido pol¨ªtico rebautizado como Comunes, ya no existen como grupo armado. Unos 13.000 excombatientes avanzan en su reincorporaci¨®n a la vida civil. As¨ª lo reconoce incluso Estados Unidos, que hace una semana retir¨® a las FARC de su lista de grupos terroristas extranjeros. Ese d¨ªa, en su lugar, design¨® como organizaciones terroristas a las dos principales disidencias de la disuelta guerrilla: el grupo liderado por ¡®Gentil Duarte¡¯, que se apart¨® de la negociaci¨®n, y la Segunda Marquetalia, que retom¨® las armas tras la firma del acuerdo. Iv¨¢n M¨¢rquez ¨Ccuyo verdadero nombre es Luciano Mar¨ªn¨C, el antiguo jefe negociador de las FARC que le dio la espalda a la paz, se queda cada d¨ªa m¨¢s solo. A sus socios m¨¢s visibles los ha alcanzado la muerte.

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