Una operaci¨®n especial de EE UU en Siria acaba con la muerte del l¨ªder del ISIS
El ataque causa al menos 13 muertos, entre ellos varios menores, en el ¨²ltimo basti¨®n rebelde sirio
La cabeza del Estado Isl¨¢mico (ISIS, en sus siglas en ingl¨¦s) ha sido arrancada de cuajo poco despu¨¦s de que volviera a emerger tras su derrota en 2019. Una gran operaci¨®n de comandos de fuerzas especiales de Estados Unidos transportados en helic¨®pteros ha acabado este jueves con la vida de su l¨ªder, Abu Ibrahim al Hachem¨ª al Quraishi, seg¨²n ha anunciado el presidente Joe Biden. ¡°Gracias a la capacidad y el valor de nuestras Fuerzas Armadas, hemos retirado del campo de batalla a Al Quraishi. Todos los soldados han regresado indemnes de la operaci¨®n¡±, dijo el mandatario en un comunicado, antes de comparecer ante los medios en la Casa Blanca. El ataque fue lanzado de madrugada en Idlib (noroeste de Siria), ¨²ltimo basti¨®n de las milicias rebeldes. Un alto cargo de seguridad de la Casa Blanca asegur¨® que la muerte de Al Quraishi se produjo al hacer estallar una bomba que portaba consigo rodeado de miembros de su familia. La operaci¨®n se ha saldado con al menos 13 muertos, entre ellos, varios menores.
¡°Orden¨¦ al Departamento de Defensa que tomara todas las precauciones posibles para minimizar las bajas civiles¡±, ha explicado Biden en su posterior comparecencia. ¡°Como sab¨ªamos que este terrorista hab¨ªa elegido rodearse de familias, incluidos ni?os, tomamos la decisi¨®n de efectuar una redada de las fuerzas especiales, lo que implica un riesgo mucho mayor para los nuestros, en lugar de atacar por el aire. Tomamos esta decisi¨®n para minimizar las bajas civiles¡±. El presidente estadounidense ha a?adido, a falta de un informe definitivo, que tiene la certeza de que cuando las tropas se acercaron a ¡°capturar al terrorista¡±, este ¡°eligi¨® inmolarse, en un acto final de cobard¨ªa desesperada, sin tener en cuenta las vidas de su propia familia y de otras personas que se hallaban en el edificio¡±. ¡°Prefiri¨® eso a enfrentarse a la justicia por los cr¨ªmenes cometidos¡±. ¡°Esta operaci¨®n habla del alcance y la capacidad de Estados Unidos para acabar con las amenazas terroristas sin importar d¨®nde intenten esconderse en cualquier parte del mundo¡±, ha sentenciado Biden.
El Pent¨¢gono confirm¨® que la ¡°misi¨®n contraterrorista¡±, en la que no se hab¨ªan registrado ¡°bajas de EE UU¡±, hab¨ªa sido ¡°un ¨¦xito¡±. En comparecencia horas despu¨¦s ante la prensa, el portavoz del Pent¨¢gono, John Kirby, ha explicado que la identificaci¨®n de Al Quraishi fue posible gracias a un examen de las huellas y de su ADN.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, una ONG que cuenta con informadores sobre el terreno, contabiliz¨® al menos nueve cuerpos sin vida, entre ellos dos civiles, en la poblaci¨®n de Atmeh, en un ¨¢rea pr¨®xima a la frontera turca que acoge campamentos con decenas de miles de desplazados internos. Los denominados cascos blancos, equipos de rescate que operan en el bando insurgente, elevaron a 13 la cifra de fallecidos, en la que incluyeron a seis menores y cuatro mujeres.
Esta operaci¨®n ordenada por el Pent¨¢gono es la m¨¢s amplia desde el ataque en el que cay¨® en 2019 el fundador del Estado Isl¨¢mico, Abubaker al Bagdadi, en una zona cercana de Idlib. Varios helic¨®pteros, uno de los cuales result¨® da?ado, aterrizaron a las afueras de Atmeh a primera hora de la madrugada del jueves. Los enfrentamientos en la zona se prolongaron durante m¨¢s de dos horas, seg¨²n testigos citados por Reuters que dieron cuenta de intensos intercambios de disparos y explosiones.
El principal grupo yihadista que opera en Idlib es Hayat Tahir al Sham, que controla la mayor parte del territorio asediado por las tropas leales al presidente sirio, Bachar el Asad, con apoyo de sus aliados de Rusia. Se trata de herederos del Frente al Nusra, anterior filial de Al Qaeda en Siria, de la que tambi¨¦n deriva Hurras al Din, grupo desplegado en la zona donde se ha registrado la operaci¨®n este jueves y que cuenta con yihadistas extranjeros en sus filas.
EE UU suele atacar con drones a los grupos yihadistas en Siria, salvo en los casos en los que act¨²a contra destacados l¨ªderes, cuya identidad busca confirmar mediante pruebas de ADN obtenidas de sus restos. La arriesgada operaci¨®n sobre el terreno lanzada ahora en Idlib pone de relieve que se trataba de un objetivo de alto nivel.
Un espectacular asalto de c¨¦lulas durmientes del ISIS a la prisi¨®n de Hasaka, en el noreste de Siria, para liberar a excombatientes yihadistas fue aplastado la semana pasada por las milicias kurdas de las Fuerzas Democr¨¢ticas Sirias, que controlan la c¨¢rcel en la que est¨¢n detenidos 3.500 yihadistas, con el apoyo de la aviaci¨®n y fuerzas especiales de Estados Unidos, su aliado en la lucha contra el extinto califato. Esta ha sido la mayor acci¨®n armada del ISIS registrada en Siria desde su derrota en el campo de batalla hace casi tres a?os. Murieron cerca de 300 yihadistas, entre reclusos y combatientes, m¨¢s de 70 milicianos kurdos y una decena de civiles.
Un heredero invisible
La designaci¨®n de Al Quraishi como m¨¢ximo l¨ªder del ISIS se produjo pocos d¨ªas despu¨¦s de la muerte de Abubaker al Bagdadi, en octubre de 2019. El fundador del grupo, se autoproclam¨® en 2014 ante las c¨¢maras de televisi¨®n califa del Estado Isl¨¢mico, que extendi¨® sus fronteras a caballo de Irak y Siria sobre una superficie equivalente a la del Reino Unido y una poblaci¨®n m¨¢s de 11 millones de personas. Su sucesor se ha visto forzado a vivir en la sombra, en un liderazgo sin visibilidad para eludir, hasta ahora, el punto de mira de los servicios de espionaje occidentales.
El ISIS elev¨® a Al Quraishi, un te¨®logo isl¨¢mico sin formaci¨®n militar, al nivel de ¡°emir de los creyentes y califa de los yihadistas¡±. Fue rebautizado con dicho nombre de guerra para poder contar con apellidos califales ligados al linaje de Mahoma y la estirpe tribal del profeta, acordes con su nueva dignidad
Pero su verdadera identidad era Mohamed Said Abderam¨¢n al Mawla, nacido hace 45 a?os cerca de Mosul (norte de Irak), aunque tambi¨¦n ha sido identificado como Abdal¨¢ Qardash, informa ?scar Guti¨¦rrez. Se crio en el seno de la familia de un cl¨¦rigo musulm¨¢n en una regi¨®n con mayor¨ªa de poblaci¨®n turcomana (minor¨ªa de origen turco), lo que aparentemente le rest¨® legitimidad entre el yihadismo por falta de pureza de sangre ¨¢rabe.
Tras seguir estudios de teolog¨ªa y jurisprudencia del islam en la Universidad de Mosul, se sum¨® a Al Qaeda en la insurgencia sun¨ª despu¨¦s de haber servido en el Ej¨¦rcito del Sadam Husein en la invasi¨®n estadounidense de 2003. Luego sigui¨® los pasos hacia la creaci¨®n del Estado Isl¨¢mico dados por su mentor Al Bagdadi, con quien coincidi¨® en prisi¨®n al ser detenido por las fuerzas de EE UU en 2008.
Excarcelado al a?o siguiente, Al Quraishi ha proseguido combatiendo desde entonces bajo la bandera negra del yihadismo, casi siempre desde la oscuridad. Cuando el Estado Isl¨¢mico comenz¨® a desmoronarse en 2017 con la ca¨ªda de Mosul, capital iraqu¨ª del califato, huy¨® a Siria. Ha permanecido pr¨¢cticamente invisible hasta su muerte en una operaci¨®n de fuerzas especiales estadounidenses en Idlib.
Era considerado el ide¨®logo del Estado Isl¨¢mico que justific¨® el intento de genocidio de la minor¨ªa yazid¨ª en el norte iraqu¨ª y el cerebro de operaciones de terrorismo global del ISIS. Washington ofrec¨ªa una recompensa de 10 millones de d¨®lares por su cabeza. Al Quraishi, que fue brazo derecho de Al Bagdadi y justific¨® con dogmas religiosos la brutalidad medieval del ISIS, era tambi¨¦n apodado ¡°el destructor¡±.
Sigue toda la informaci¨®n internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.