La vieja guardia del Partido Republicano rinde homenaje a Gorbachov y su coraje para cambiar el mundo

Las im¨¢genes de Mija¨ªl Gorbachov en compa?¨ªa de Ronald Reagan y George Bush padre parecen hoy tan distantes de la realidad rusa como de la de los republicanos de Estados Unidos, un partido que muy probablemente no se reconocer¨ªa hoy en sus mayores. Fotograf¨ªas de Gorbachov y Reagan tocados con sombreros tejanos en el rancho de este, en 1992; departiendo animadamente y sin asomo de tensi¨®n entre ellos o posando para los fot¨®grafos junto a Bush en numerosas ocasiones: momentos de concordia y posibilismo, los que dieron carpetazo al siglo XX. Los medios estadounidenses se han rendido a homenajear al fallecido l¨ªder sovi¨¦tico, pero tambi¨¦n a una forma antigua de hacer pol¨ªtica, la que implicaba pactos y compromisos, pese a las cr¨ªticas. ¡°Me apuesto a que los halcones en mi pa¨ªs y en el suyo se retorcer¨¢n cuando nos vean darnos la mano¡±, le dijo Reagan el 23 de noviembre de 1985, antes de una reuni¨®n que arranc¨® con un gran apret¨®n de manos y el cabeceo en se?al de asentimiento del sovi¨¦tico. Un gesto en las ant¨ªpodas de la polarizaci¨®n que alientan los ep¨ªgonos de Reagan y Bush: comparado con la agresividad actual, el Partido Republicano parec¨ªa entonces un club de caballeros, pese a contar entre sus filas con taimados representantes como Henry Kissinger, inspirador de alg¨²n que otro golpe de Estado.

La reacci¨®n oficial de la Casa Blanca dem¨®crata se hizo esperar. El presidente Joe Biden regresaba de un acto en Pensilvania cuando se conoci¨® la noticia de la muerte de Gorbachov, y el comunicado oficial rezuma un tono personal, apenas protocolario, dado que el mandatario trat¨® a Gorbachov cuando era senador. ¡°Pocos funcionarios sovi¨¦ticos de alto nivel tuvieron el coraje de admitir que las cosas deb¨ªan cambiar. Como miembro del Comit¨¦ de Exteriores del Senado, le vi hacer eso y m¨¢s¡±, explica Biden, que califica al estadista de ¡°hombre de remarcable visi¨®n (...) que cre¨ªa en la glasnost y la perestroika, no como meros esl¨®ganes, sino como el camino a seguir para la URSS despu¨¦s de tantos a?os de aislamiento y privaciones¡±. El comunicado finaliza recordando sus postreros encuentros, como uno en la Casa Blanca en 2009, con Gorbachov ya retirado, ¡°pero a¨²n profundamente comprometido¡±. ¡°Era f¨¢cil comprender por qu¨¦ tantos en todo el mundo lo ten¨ªan en tan alta estima¡±. Ambos hablaron entonces de reducir los respectivos arsenales nucleares, recuerda el texto.

La agencia TASS inform¨® el a?o pasado de que Biden le hab¨ªa felicitado por su 90? cumplea?os mientras subrayaba su contribuci¨®n a un mundo m¨¢s seguro. ¡°Su compromiso con la libertad y su coraje durante d¨¦cadas para tomar decisiones dif¨ªciles, aunque necesarias, han hecho del mundo un lugar m¨¢s seguro y contin¨²an siendo una fuente de inspiraci¨®n. Es mi sincera esperanza que la extensi¨®n por cinco a?os del Nuevo START sea una prueba de que EE UU y Rusia pueden continuar trabajando juntos mientras secundamos su legado¡±, dec¨ªa la felicitaci¨®n de Biden el 2 de marzo de 2021, casi reci¨¦n llegado a la Casa Blanca. El Nuevo START fue prorrogado in extremis poco despu¨¦s, pero es lo ¨²nico que queda de aquellos confiados d¨ªas en que la amenaza nuclear parec¨ªa haber pasado a la historia.

La deriva autoritaria de Vlad¨ªmir Putin, la invasi¨®n de Ucrania y seis meses de guerra a las puertas de Europa han convertido en papel mojado los prop¨®sitos de Biden, de ah¨ª que la reacci¨®n oficial de la Casa Blanca se hiciera de rogar: el momento no puede ser m¨¢s delicado. Pero a Gorbachov le sobran apologetas en Estados Unidos: antiguos altos cargos de la Administraci¨®n, todos ellos republicanos. James Baker, que fuera secretario de Estado de EE UU entre 1989 y 1992, glos¨® su figura en los siguientes t¨¦rminos: ¡°La historia recordar¨¢ a Mija¨ªl Gorbachov como un gigante que guio a su gran naci¨®n hacia la democracia. Desempe?¨® un papel cr¨ªtico en la conclusi¨®n pac¨ªfica de la Guerra Fr¨ªa por su decisi¨®n de no recurrir a la fuerza para mantener el imperio¡­ El mundo libre lo extra?a mucho¡±. El republicano Baker sirvi¨® en las Administraciones de Ronald Reagan, como secretario del Tesoro, y George Bush padre, como jefe de la diplomacia.

Quedan pocos testigos de la especial relaci¨®n que establecieron Gorbachov y Reagan, su principal interlocutor en Estados Unidos, pero la fundaci¨®n que vela por su legado ha reivindicado el momentum. ¡°La Fundaci¨®n e Instituto Reagan lamenta la p¨¦rdida del l¨ªder exsovi¨¦tico Mija¨ªl Gorbachov, el hombre que una vez fue adversario pol¨ªtico de Ronald Reagan para acabar convirti¨¦ndose en un amigo. Nuestros pensamientos y oraciones van dirigidos a la familia Gorbachov y al pueblo de Rusia¡±, dijo en un comunicado la instituci¨®n.

El todopoderoso Henry Kissinger, que fue secretario de Estado entre 1973 y 1977, pero cuya influencia en la pol¨ªtica internacional se dej¨® sentir incluso tras concluir su mandato, manifest¨® veladas cr¨ªticas al desempe?o de Gorbachov como estadista. ¡°Realiz¨® grandes servicios, pero no pudo implementar todas sus visiones¡±, declar¨® el republicano al programa de la BBC Newsnight. ¡°El pueblo de Europa del Este y el pueblo alem¨¢n, y a la postre el pueblo ruso, est¨¢n en deuda con ¨¦l por la inspiraci¨®n, por el coraje de presentar estas ideas de libertad (¡­) Ser¨¢ recordado por la historia como un hombre que emprendi¨® transformaciones hist¨®ricas que beneficiaron a la humanidad y al pueblo ruso¡±.

Con un mensaje publicado en la red social Twitter, la antigua secretaria de Estado, y experta en Rusia, Condoleezza Rice, tambi¨¦n republicana, se sum¨® al coro de alabanzas hacia el antiguo secretario general del Partido Comunista de la Uni¨®n Sovi¨¦tica (PCUS), que fue galardonado con el premio Nobel de la Paz en 1990. ¡°Era un hombre que trat¨® de brindar una vida mejor a su pueblo¡±, tuite¨® Rice. ¡°Su vida fue trascendental porque, sin ¨¦l y su valent¨ªa, no habr¨ªa sido posible poner fin a la Guerra Fr¨ªa de manera pac¨ªfica¡±. De todos los apologetas republicanos, Rice ha sido la ¨²nica que ha tenido relaci¨®n directa con Putin, durante su primera visita oficial como secretaria de Estado a Rusia, en abril de 2005. La tensi¨®n presidi¨® el encuentro.

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