Un custodio del presidente uruguayo, imputado por hacer pasar por uruguayos a ciudadanos rusos
La justicia investiga a Alejandro Astesiano por adulterar partidas de nacimiento para la entrega de pasaportes
El 1 de marzo de 2020, el Cadillac negro utilizado en Uruguay para las ceremonias de asunci¨®n presidencial surc¨® la avenida Libertador a paso de hombre, mientras el entonces flamante mandatario, Luis Lacalle Pou, saludaba a sus partidarios. A un lado del carro, un hombre robusto acompa?aba la marcha con una amplia sonrisa: el jefe de la custodia, Alejandro Astesiano, imputado esta semana por falsificar documentos oficiales para que ciudadanos rusos obtuvieran un pasaporte uruguayo.
A poco de conocerse la denuncia hecha por un funcionario de Identificaci¨®n Civil, la fiscal Gabriela Fossati inici¨® una investigaci¨®n que revel¨® que Astesiano ofrec¨ªa contactos reales con funcionarios ubicados en puestos estrat¨¦gicos (Canciller¨ªa y Ministerio del Interior) y se reun¨ªa con sus c¨®mplices en su despacho del piso 4 de la Torre Ejecutiva, donde trabajaba como jefe de custodia presidencial.
Astesiano no es el ¨²nico imputado en la causa. Tambi¨¦n lo est¨¢n el ciudadano ruso con residencia uruguaya Alexey Slivaev, due?o del grupo de Facebook ¡°Todo sobre inmigraci¨®n a Uruguay¡±, creado en 2015 y con 8.000 suscriptores; y el escribano uruguayo ?lvaro Fern¨¢ndez, al que le encontraron 77 p¨¢ginas de chats y audios mantenidos con el custodio presidencial, adem¨¢s de documentaci¨®n incriminatoria.
El modo en que presuntamente operaba esta organizaci¨®n es simple: contactaban a los rusos por medio de la p¨¢gina de Facebook, adulteraban sus partidas de nacimiento para que figuraran como ¡°ciudadanos naturales¡± uruguayos y los acompa?aban en el proceso de emisi¨®n de la c¨¦dula de identidad y el pasaporte. Se cree que la organizaci¨®n falsificaba la documentaci¨®n con datos ciertos, pero de personas fallecidas.
Fern¨¢ndez era quien gestionaba las partidas de nacimiento falsas, adem¨¢s de recibir el dinero por la operaci¨®n que, seg¨²n un testigo, pod¨ªa llegar a costar 10.000 d¨®lares. Astesiano, adem¨¢s de tener acceso a las bases de datos de Identificaci¨®n Civil, era el nexo entre los solicitantes y funcionarios p¨²blicos de los ministerios del Interior y de Relaciones Exteriores.
Consultados por EL PA?S, desde el Ministerio del Interior respondieron que esperar¨¢n el trabajo del fiscal ¡°y ¡°despu¨¦s se ver¨¢ si hay alguna actuaci¨®n administrativa para hacer¡±.
¡°Si hay alg¨²n responsable soy yo¡±, dijo visiblemente sorprendido Lacalle Pou en una rueda de prensa el martes. ¡°El hecho es desagradable, inconveniente en lo personal. En lo pol¨ªtico ni que hablar¡± pero la desarticulaci¨®n de la banda ¡°habla bien de la Rep¨²blica¡±, agreg¨®.
Luego, ofreci¨® una cronolog¨ªa de su relaci¨®n personal con Astesiano. Dijo que lo conoc¨ªa por su participaci¨®n en las campa?as desde 1999, pero que reci¨¦n ¡°gener¨® cierta confianza en 2019¡å. ¡°Era muy efectivo en el trabajo, la relaci¨®n personal era muy buena, cumpl¨ªa su funci¨®n a cabalidad¡±, dijo.
El custodio, due?o de un legajo de al menos 20 anotaciones por hurto, estafa y apropiaci¨®n indebida, fue imputado por ¡°suposici¨®n de estado civil en reiteraci¨®n real con delito de asociaci¨®n para delinquir y tr¨¢fico de influencias¡± y encarcelado en forma preventiva por 30 d¨ªas. Su detenci¨®n se concret¨® en la residencia presidencial, a manos de un jerarca de Inteligencia, el domingo por la noche, cuando el presidente estaba en el lugar.
Cr¨ªticas opositoras
¡°La sociedad entera est¨¢ azorada porque es dif¨ªcil entender que no haya habido los m¨ªnimos filtros imprescindibles para la definici¨®n de un jefe de seguridad, ni m¨¢s ni menos que para un jefe de Estado¡±, expres¨® a la prensa el senador del Frente Amplio (¨²nico partido opositor), Mario Bergara. Para el legislador ¡°hay responsabilidades de orden pol¨ªtico¡±, por tal motivo, eval¨²an crear una comisi¨®n investigadora, aunque en Uruguay no se puede interpelar al presidente en el Congreso.
La contrataci¨®n de Astesiano para trabajar a la sombra del mandatario es otro de los puntos en cuesti¨®n por estas horas, dado que el fallecido ministro del Interior, Jorge Larra?aga, hab¨ªa comunicado a Presidencia sobre las anotaciones judiciales del imputado, sucedidas entre 2003 y 2018, aunque las mismas no son consideradas antecedentes penales.
El asombro de Bergara es sincero si se tiene en cuenta que hace pocas semanas le toc¨® ser el senador interpelante del ministro del Interior, Luis Heber, y el canciller Francisco Bustillo, en otro esc¨¢ndalo que tiene que ver con un pasaporte, el que Uruguay le otorg¨® al narcotraficante Sebasti¨¢n Marset cuando ¨¦ste se encontraba detenido en una c¨¢rcel de Dub¨¢i por circular con un documento falso de la Rep¨²blica del Paraguay.
Marset, hoy pr¨®fugo y con pedido de captura internacional, fue sindicado por el presidente colombiano Gustavo Petro de ser el autor intelectual del asesinato del fiscal paraguayo antidrogas Marcelo Pecci, ocurrido en la isla de Bar¨² (Cartagena), el pasado 10 de mayo.
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