Las huelgas por las mejoras salariales se extienden este martes en Francia
La llamada ¡°movilizaci¨®n interprofesional¡± permitir¨¢ medir el alcance del conflicto social que empez¨® en las refiner¨ªas
Las demandas de mejoras salariales en plena subida de los precios, con la econom¨ªa a medio gas y una guerra en Europa, son el principal motor de las movilizaciones sociales este martes en Francia. Varios sectores, desde los transportes p¨²blicos hasta la educaci¨®n o la sanidad, est¨¢n llamados a ir a la huelga y a manifestarse por todo el pa¨ªs, una ampliaci¨®n del conflicto que empez¨® hace tres semanas en las refiner¨ªas de petr¨®leo.
Hay nervios en el palacio del El¨ªseo. El presidente, Emmanuel Macron, convoc¨® el lunes por la tarde a los ministros de Econom¨ªa y Finanzas, Transportes, Energ¨ªa y Ecolog¨ªa. El objetivo era abordar los bloqueos en el suministro de energ¨ªa, que siguen paralizando cerca de un tercio de estaciones de servicio y provocando largas colas en algunas regiones del pa¨ªs.
Los paros de este martes permitir¨¢n calibrar el seguimiento real del movimiento. Es decir, saber si Francia es un pa¨ªs al borde de la huelga general y la explosi¨®n social; si no hace m¨¢s que seguir una larga tradici¨®n huelguista y, por tanto, no hay nada inhabitual ni motivo de alarma para las autoridades; o si esto expresa algo propio de estos tiempos, y quiz¨¢ no exclusivo de Francia: un malestar creciente en amplias capas de la poblaci¨®n por la inflaci¨®n y la p¨¦rdida de poder adquisitivo y en v¨ªsperas de un invierno de ahorros energ¨¦ticos y posible recesi¨®n. La jornada dar¨¢ una medida m¨¢s precisa del peligro real que supone para Macron el primer conflicto social de su segundo y ¨²ltimo quinquenio como presidente.
Pol¨ªticos como Jean-Luc M¨¦lenchon, l¨ªder de la izquierda, llamaron, en una manifestaci¨®n unitaria de la izquierda el domingo en Par¨ªs, a la ¡°huelga general¡±. Seg¨²n las convocatorias previas a jornada de protesta, la huelga no deber¨ªa impedir, por ejemplo, el funcionamiento de la red de metro en Par¨ªs ni de los trenes de alta velocidad. Pero el Gobierno da por hecho que perturbar¨¢ la vida econ¨®mica y social durante este d¨ªa.
El pulso en las refiner¨ªas de TotalEnergies, donde el sindicato minoritario reclama un aumento salarial del 10% y se ha desmarcado del acuerdo de otras centrales para subir un 7%, amenaza las vacaciones escolares de oto?o. Muchos franceses se desplazan durante estas vacaciones, que empiezan este fin de semana.
Macron, lento de reflejos, tard¨® dos semanas en reaccionar a la huelga y la carest¨ªa de combustible. La semana pasada empez¨® a movilizar por ley a personal de las refiner¨ªas y los dep¨®sitos para reabrir algunas refiner¨ªas y dep¨®sitos de petr¨®leo. El martes orden¨® poner en marcha dos m¨¢s.
La defensa del derecho a la huelga frente a estas movilizaciones es otra de las reclamaciones de los paros del martes. ¡°La reivindicaci¨®n que nos une a todos es la subida general de los salarios¡±, dijo Catherine Perret, secretaria confederal de la CGT, en la cadena France Info. Los convocantes no llaman expl¨ªcitamente a la ¡°huelga general¡±, sino a la ¡°movilizaci¨®n interprofesional¡±. Entre los sectores donde se han anunciado paros tambi¨¦n figuran puertos, transporte por carretera, centrales nucleares, el comercio y los servicios. En la noche del lunes no se preve¨ªan paros en el transporte a¨¦reo.
El Gobierno, para compensar el impacto de la falta de carburante, ha anunciado que prolongar¨¢ hasta el 15 de noviembre la rebaja vigente de 30 c¨¦ntimos por litro de combustible, a la que se suma, en el mismo periodo, una reducci¨®n de 20 c¨¦ntimos por parte de la empresa TotalEnergies.
El Gobierno ha pedido a las empresas como esta ¨²ltima, inundadas de beneficios gracias a que la crisis ha disparado los precios, que suban los salarios. Al mismo tiempo, ha instado a la CGT a abandonar los bloqueos, con el argumento de que los otros sindicatos ya han arrancado aumentos salariales en las refiner¨ªas.
Divisi¨®n en los sindicatos
El conflicto en las refiner¨ªas y, este martes, en otros sectores, refleja divisiones entre los sindicatos. El primer sindicato de Francia, la moderada CFDT, no se ha sumado. ¡°El jaleo por el jaleo nunca ha sido ¨²til para nadie¡±, avis¨®, en declaraciones recogidas por el diario Midi Libre, Laurent Berger, su secretario general.
En los ferrocarriles, no participa en la protesta el segundo sindicato del sector, UNSA. Los convocantes de la huelga interprofesional son la CGT, FSU, Solidaires y Sud. Esta ser¨¢ la segunda jornada de movilizaciones tras la del 29 de septiembre.
El temor en el El¨ªseo es por ahora que las colas en las gasolineras se multipliquen, que a esto se sume otra huelga prolongada en el transporte y que el enfado de los franceses no se dirija a los sindicatos que bloquean, sino al presidente. Sobre todo, si acaban arruin¨¢ndoles las vacaciones.
¡°Yo estoy al lado de nuestros compatriotas, que las pasan canutas y que est¨¢n hartos de esta situaci¨®n¡±, asegur¨® Macron el lunes. Y prometi¨® resolverlo: ¡°Seguiremos haciendo lo m¨¢ximo¡±. Desde el Gobierno, sin embargo, nadie se atreve a anunciar una fecha para restablecer el suministro y el orden en las gasolineras.
La novedad, respecto a conflictos sociales anteriores, es el contexto internacional y econ¨®mico: la guerra en Ucrania y la inflaci¨®n. Y el contexto pol¨ªtico: desde las legislativas de junio, los macronistas no tienen mayor¨ªa absoluta en la Asamblea Nacional, aunque forman el mayor bloque de diputados. Ahora topan con el primer obst¨¢culo real en el hemiciclo: la oposici¨®n veta los presupuestos, aunque en las filas del presidente tampoco son proclives a aceptar acuerdos.
El resultado es que esta semana el Ejecutivo prev¨¦ imponer los presupuestos v¨ªa decreto, con el art¨ªculo 49.3 de la Constituci¨®n. La oposici¨®n solo podr¨ªa frenar las cuentas con una moci¨®n de censura a la primera ministra, ?lisabeth Borne.
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