La batalla electoral entre Lula y Bolsonaro se acerca al empate t¨¦cnico ante la segunda vuelta en Brasil

Brasil contiene la respiraci¨®n ante unas elecciones presidenciales cada vez m¨¢s ajustadas. A semana y media de la segunda vuelta, el expresidente izquierdista Luiz In¨¢cio Lula da Silva sigue liderando las encuestas, pero su rival, el actual mandatario Jair Bolsonaro, ha ido estrechando la distancia conforme avanzaban las semanas. El ¨²ltimo sondeo de Datafolha, publicado este mi¨¦rcoles, da a Lula un 49% de los votos y a Bolsonaro, un 45%. El resultado plantea la posibilidad de un empate t¨¦cnico si se tiene en cuenta el margen de error.

Bolsonaro va ara?ando puntos poco a poco. La semana pasada, el sondeo de Datafolha lo mostraba con 44% de los apoyos totales. En la de esta ha subido un punto porcentual. Si se quitan de la ecuaci¨®n los votos blancos o nulos, el ultraderechista se coloca con 48% de las preferencias, y le roba un punto a Lula, con 52%. La ¨²ltima encuesta de Ipec para Globo, la otra gran medidora de la temperatura electoral, tambi¨¦n muestra al ultraderechista ganando terreno. Bolsonaro tiene un 43% de intenci¨®n de voto, un punto m¨¢s que hace una semana, mientras que Lula baja de 51% a 50%.

Las encuestas se celebraron al calor del primer debate electoral en el que los candidatos se enfrentaban solos. Aunque volaron los insultos y las acusaciones durante el duelo, los candidatos hicieron un esfuerzo por evitar los estallidos de ira y el tono bronco que marcaron los anteriores debates. Lula critic¨® al rival por su gesti¨®n de la pandemia, mientras Bolsonaro le restreg¨® los casos de corrupci¨®n del pasado. No hubo un claro ganador.

Por otra parte, la campa?a est¨¢ embarrada en un constante flujo de videos pol¨¦micos y noticias falsas. El ¨²ltimo esc¨¢ndalo ha sido una grabaci¨®n en la que Bolsonaro sale hablando sobre una visita suya a la casa de unas adolescentes venezolanas que supuestamente se prostitu¨ªan. La campa?a del mandatario tuvo que comprar publicidad en Google que dec¨ªa ¡°Bolsonaro NO es pederasta¡±. Lula, a quien los seguidores del ultraderechista han llegado a acusar de querer cerrar iglesias, contin¨²a tratando de congraciarse con el votante evang¨¦lico y este mi¨¦rcoles ha publicado una carta en la que se declara contrario al aborto.

Con una carrera tan ajustada, los electores indecisos y aquellos que planean votar en blanco o simplemente no acudir a las urnas pueden jugar un papel decisivo. Aunque el 94% dice ya saber a qui¨¦n votar, el sondeo de Datafolha muestra que hay un 1% de indecisos y un 4% de votos en blanco. El de Ipec estima un 5% de indecisos y un 2% que no responden a las preguntas. El candidato que consiga convencerlos puede llevarse la victoria. En la primera vuelta, celebrada el 2 de octubre, hubo un 21% de abstenciones, una enorme reserva de votos que las campa?as est¨¢n buscando movilizar a su favor.

A estas alturas, nadie descarta una sorpresa el d¨ªa de la elecci¨®n. La izquierda so?aba con una victoria en primera vuelta, pero al final se qued¨® a poco menos de dos puntos del 50%. Bolsonaro logr¨® un 43%, cuando las encuestas le daban un 35%. Entre las razones que pueden explicar esa subestimaci¨®n del voto bolsonarista est¨¢n las decisiones de ¨²ltima hora y las reticencias de algunos electores a reconocer que apoyan al ultraderechista. Bolsonaro ha acusado a las empresas encuestadoras de querer favorecer a su rival. Al mismo tiempo, diputados que apoyan al Gobierno han planteado castigar con hasta 10 a?os de c¨¢rcel a las encuestadoras cuyos sondeos diverjan de los resultados reales, m¨¢s all¨¢ del margen de error.

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