Ucrania adapta su defensa a¨¦rea para detener las oleadas de drones bomba

El cielo de Kiev se convirti¨® en las madrugadas del 1 y del 2 de enero en un espect¨¢culo aterrador. Las explosiones a baja altura, los focos rastreando en la oscuridad, el silbido de los misiles y el centelleo de las balas de gran calibre confirmaron a los ciudadanos de la capital ucrania que Rusia proseguir¨ªa en 2023 con su espiral de destrucci¨®n. Sin embargo, para cualquier analista militar, aquellas largas horas fueron una lecci¨®n a gran escala de c¨®mo adaptar la defensa de un pa¨ªs a la guerra a¨¦rea dominada por drones.

M¨¢s de 80 drones bomba Shahed fueron disparados por Rusia las noches del 1 y del 2 de enero, seg¨²n las Fuerzas A¨¦reas ucranias. Tan solo dos dieron en sus objetivos, en la madrugada del lunes. Una subestaci¨®n el¨¦ctrica y docenas de viviendas sufrieron da?os en Kiev. El concierto de bombardeos rusos para dar la bienvenida al nuevo a?o empez¨® la tarde del 31 de diciembre, con una decena de misiles de crucero dirigidos a la capital, de los cuales tres impactaron en la ciudad. La eficacia de la red de defensa a¨¦rea ucrania es muy alta, cuenta con armamento de la OTAN y tambi¨¦n con sistemas sovi¨¦ticos, en especial, los misiles tierra-aire S-300. Seg¨²n el Estado Mayor ucranio, son abatidos un 80% de los drones y m¨¢s del 70% de los misiles. La perfecci¨®n no es posible porque Rusia ataca en oleadas de m¨²ltiples proyectiles y alguno acaba superando todas las barreras de defensa.

Rusia est¨¢ utilizando masivamente los drones bomba Shahed suministrados por Ir¨¢n. Su coste de producci¨®n es de entre 20.000 y 50.000 euros, muy por debajo del coste de los misiles de crucero que Rusia dispara desde su territorio o desde el mar Negro, que oscilan como m¨ªnimo entre los 250.000 y el mill¨®n de euros. La pecuniaria no es la ¨²nica raz¨®n de la apuesta de Mosc¨² por los Shahed: tambi¨¦n lo es la reducci¨®n de su propia capacidad de fabricaci¨®n de estos cohetes de precisi¨®n debido a las sanciones y el embargo que sufre la industria rusa.

Los bombardeos rusos lejos del frente han sido recurrentes desde la pasada primavera, al mismo tiempo que se produc¨ªa el progresivo retroceso de sus tropas en el territorio que hab¨ªan conquistado. La irrupci¨®n de los drones bomba iran¨ªes fue en verano, pero no ha sido hasta la actual fase de ataques masivos, iniciada el pasado octubre con la red energ¨¦tica como principal objetivo, cuando su uso se convirti¨® en prioritario para el Kremlin.

Los misiles de crucero rusos, como los Kh-101 y Kh-55, vuelan a una velocidad cercana a la del sonido ¡ªlos Kalibr la pueden superar¡ª y cuentan con una capacidad de maniobra que hace m¨¢s dif¨ªcil derribarlos en comparaci¨®n con los Shahed. Estos no cambian su trayectoria, excepto en el momento de caer casi en picado sobre el objetivo, y vuelan a tan solo unos 170 kil¨®metros por hora. Pero los drones tienen una raz¨®n adicional en el plan del Kremlin: sirven para agotar el arsenal de misiles tierra-aire ucranio, mayormente aportado por sus aliados de la OTAN. As¨ª lo confirm¨® el propio Volod¨ªmir Zelenski, presidente de Ucrania, en uno de sus discursos de esta semana.

La estrategia diplom¨¢tica de Kiev se ha centrado en el ¨²ltimo medio a?o en conseguir la cesi¨®n de sistemas de defensa de misiles tierra-aire de sus pa¨ªses aliados. Este armamento ha tomado parte en la defensa de la capital en los primeros d¨ªas de 2023. Por lo menos una de las dos bater¨ªas Nasams en territorio ucranio, de fabricaci¨®n noruega y estadounidense, est¨¢ localizada en Kiev. Washington se ha comprometido a aportar seis m¨¢s. El sistema m¨¢s desarrollado de defensa a¨¦rea en funcionamiento en la ciudad es el IRIS-T alem¨¢n. A diferencia de este, las cuatro bater¨ªas Hawk transferidas por Espa?a a Ucrania ¡ªa petici¨®n de Estados Unidos¡ª son armas antiguas, producidas en los a?os sesenta. En las pr¨®ximas semanas tiene que llegar a Ucrania una bater¨ªa estadounidense Patriot y en el medio plazo est¨¢ previsto que Francia e Italia aporten alguna bater¨ªa Mamba, uno de los sistemas de defensa a¨¦reos m¨¢s modernos del mundo.

Detecci¨®n de radar, visual y sonora

La estructura de defensa a¨¦rea ucrania es compleja por la variedad de sistemas tecnol¨®gicos utilizados y su permanente movilidad para evitar ser anulados por el enemigo. Hay diferentes l¨ªneas de radares y bater¨ªas antia¨¦reas en la geograf¨ªa del pa¨ªs, coordinados por mandos territoriales. Tambi¨¦n es importante, seg¨²n explicaron a este diario el pasado octubre unidades militares en la frontera ucrania con Rusia y Bielorrusia, la detecci¨®n visual de los drones, que vuelan a menor altura para evitar los radares. Lo confirman a EL PA?S Yuri Ihnat, portavoz de las Fuerzas A¨¦reas ucranias, y Viktor Tregubov, capit¨¢n experto en comunicaciones. Tregubov a?ade que la detecci¨®n auditiva de los Shahed tambi¨¦n es frecuente, por el ruido tan caracter¨ªstico que hacen, similar a un ciclomotor. Kiev cuenta, adem¨¢s, con informaci¨®n de inteligencia de la OTAN que le alerta del despegue de bombarderos en territorio ruso.

Desde el pasado octubre, en el momento que una ola de drones entra en el espacio a¨¦reo ucranio, los puntos de mando movilizan en su trayectoria unidades m¨®viles armadas con lanzacohetes port¨¢tiles, soldados pertrechados con fusiles autom¨¢ticos de gran calibre y sobre todo veh¨ªculos antia¨¦reos equipados con ca?ones autom¨¢ticos. Entre estos ¨²ltimos destacan los 30 carros Gepard alemanes, con dos ca?ones con munici¨®n de 35 mil¨ªmetros, que fueron identificados en las primeras noches del a?o en Kiev con sus balas surcando en paralelo el cielo.

Los expertos recomiendan que Ucrania refuerce estas barreras de defensa que no dependen de misiles tierra-aire. La raz¨®n es el coste de la munici¨®n. En un estudio de la Universidad de Ciencias Ambientales de Ucrania publicado en septiembre por la revista acad¨¦mica Political Science and Security Studies Journal, se aportaban datos esclarecedores: si un Shahed tiene un coste de unos 20.000 euros, un misil tierra-aire no baja de los 250.000 euros. En cambio, el misil de un lanzacohetes port¨¢til, como el de los famosos Stinger estadounidenses, tiene un precio de 60.000 euros.

En un informe del pasado diciembre, los expertos del Centro de Estudios Estrat¨¦gicos e Internacionales (CSIS, un instituto de Estados Unidos) Mark Cancian y Tom Karako indicaban que los misiles de un sistema Patriot cuestan cuatro millones de d¨®lares [unos 3,8 millones de euros]. ¡°Disparar un misil de cuatro millones de d¨®lares contra un misil de crucero ruso de 250.000 d¨®lares puede estar justificado si esos misiles estuvieran dirigidos a objetivos significativos. Disparar un misil de cuatro millones de d¨®lares contra un dron iran¨ª Shahed de 50.000 d¨®lares, probablemente, no¡±.

Los Shahed, a baja altura, son m¨¢s f¨¢ciles de interceptar, como se demostr¨® el pasado octubre en un v¨ªdeo que se hizo viral y en el que aparec¨ªan tres polic¨ªas de Kiev derribando uno de estos drones bomba con sus fusiles. En Ucrania se est¨¢n introduciendo de forma acelerada sistemas m¨¢s econ¨®micos y de corto alcance para detener a estos aparatos no tripulados, como otros drones que los interceptan en vuelo sin necesidad de armamento. Mientras tanto, el Royal United Services Institute (RUSI), centro brit¨¢nico de estudios de seguridad, publicaba una serie de recomendaciones de urgencia para las Fuerzas A¨¦reas ucranias, como reforzar ¡°en grandes cantidades¡± el n¨²mero de lanzacohetes port¨¢tiles, fusiles autom¨¢ticos fijos de gran calibre y veh¨ªculos con ca?ones como los Gepard, los Lvkv90 y los Skyranger. El RUSI tambi¨¦n pide que la OTAN suministre misiles aire-aire para los cazas ucranios, una munici¨®n m¨¢s econ¨®mica que los tierra-aire porque no necesitan arrancar desde el suelo. Estados Unidos ha sido hasta ahora poco proclive a suministrar cazas y armamento a¨¦reo a Ucrania por dos motivos: porque la fuerza antia¨¦rea rusa, como la ucrania, tambi¨¦n puede derribar estos aviones, y por el miedo a que sus misiles sean utilizados para golpear en suelo ruso.

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