La carrera por suceder a Sturgeon revela el conflicto interno del Partido Nacional Escoc¨¦s
El debate sobre la fe religiosa de los candidatos, la verdadera naturaleza ideol¨®gica del SNP o el avance hacia un independentismo m¨¢s agresivo calientan las primarias de la formaci¨®n
La renuncia de Nicola Sturgeon a seguir liderando el Partido Nacional Escoc¨¦s (SNP, en sus siglas en ingl¨¦s) ha revelado de un plumazo las divisiones internas de la formaci¨®n. Y lo que es m¨¢s grave: ha dejado claro que era sobre todo el carisma de la todav¨ªa ministra principal, a cuyo alrededor giraban pol¨ªticas y estrategias, lo que aglutinaba un movimiento independentista con escasa coherencia interna. Los tres candidatos que han logrado rebasar el umbral necesario de apoyos para competir por el puesto de Sturgeon se han enzarzado desde el primer minuto en un enfrentamiento en torno a la religi¨®n, la moralidad o la idea misma de progresismo que ha hecho que conservadores y laboristas se froten las manos.
Kate Forbes, la actual consejera de Finanzas del Gobierno Aut¨®nomo; Humza Yousaf, consejero de Sanidad; y Ash Regan, ex viceconsejera de Seguridad Municipal, se disponen a competir entre ellos durante un mes. Las votaciones de las bases tendr¨¢n lugar entre el 13 y el 27 de marzo.
El n¨²mero de afiliados del SNP era apenas de un pu?ado de miles antes del furor que desat¨® la campa?a del refer¨¦ndum de independencia de 2014. ¡°Despu¨¦s de ese refer¨¦ndum, un mont¨®n de gente se incorpor¨® al partido, porque se convirti¨® en un veh¨ªculo para lograr lo que el mismo eslogan de la formaci¨®n aseguraba: Una Escocia m¨¢s fuerte¡±, explica Ben Walker, fundador del agregador de sondeos BritainElects y analista de la revista New Statesman. ¡°Siempre han intentado ara?ar apoyos entre todo el espectro del sentimiento independentista escoc¨¦s. Y engloba mucha diversidad. Uno puede intuir que una parte importante de su base es socialmente conservadora, aunque est¨¢ claro que la gran mayor¨ªa comparte una visi¨®n progresista¡±, asegura Walker.
La gran favorita, durante las primeras horas que sucedieron a la dimisi¨®n de Sturgeon el 15 de febrero, era Kate Forbes, de 32 a?os. Nacida en Dingwall, en las Tierras Altas escocesas. Fluida en ga¨¦lico. Independentista de tradici¨®n familiar. Educada en las universidades de Edimburgo y Cambridge. Su manejo de las cuentas presupuestarias durante la pandemia le vali¨® el reconocimiento de la ministra principal, los compa?eros de Gobierno y los ciudadanos. Forbes estaba de baja de maternidad cuando comenz¨® la carrera por el liderazgo del SNP, y enseguida volvi¨® a la batalla pol¨ªtica. Sin una estrategia de comunicaci¨®n clara.
Hija de misioneros de la Iglesia Libre de Escocia ¨Dvivi¨® gran parte de su infancia en la India¨D, una denominaci¨®n calvinista de tendencia conservadora, la consejera nunca ha ocultado su fe religiosa. Tampoco nunca tuvo que justificarla. Hasta ahora. En una serie de entrevistas a los medios, cuando se decidi¨® a lanzar esta semana su campa?a, asegur¨® que, de haber sido diputada en 2014, habr¨ªa votado en contra del matrimonio de personas del mismo sexo; defendi¨® que los hijos deb¨ªan tenerse preferiblemente bajo el paraguas de una uni¨®n conyugal; y dej¨® claro que, si ocupaba el puesto de ministra principal, dejar¨ªa languidecer una ley, la Reforma del Reconocimiento de G¨¦nero, con la que no estaba de acuerdo.
Muchos de los pol¨ªticos relevantes del SNP ¨Dalgunos hab¨ªan incluso apostado por ella en un principio¨D le han dado la espalda, empezando por la propia Sturgeon, que prometi¨® mantener una escrupulosa neutralidad durante la carrera por su sucesi¨®n. ¡°Escocia es un pa¨ªs progresista de modo mayoritario. Eso es lo que creo. Y las opiniones y creencias sobre todo tipo de asuntos de quien acabe siendo ministro principal son importantes, porque los ciudadanos lo ven como alguien que va a pelear por ellos y por sus derechos¡±, ha dicho Sturgeon, en una clara toma de distancia respecto a Forbes.
La n¨²mero dos del grupo parlamentario del SNP en el Parlamento brit¨¢nico, Mhairi Black, que se identifica como lesbiana y apoy¨® en su momento la ley del matrimonio homosexual, ha sido especialmente dura con Forbes. ¡°Kate no solo ha puesto en riesgo el apoyo de un mont¨®n de activistas y afiliados, sino que ha logrado alienar a sectores importantes de la ciudadan¨ªa antes siquiera de comenzar a competir¡±, ha dicho Black, que asegura sentirse ¡°dolida¡± con las declaraciones de su compa?era de partido. ¡°Necesitamos, y deber¨ªamos aspirar, a un mejor juicio, a una mejor comunicaci¨®n y a otras habilidades de liderazgo, si aspiramos a convencer a otros de las bondades de la independencia¡±.
La conclusi¨®n general, propagada por los medios, era que Forbes hab¨ªa arruinado sus posibilidades. Pero un sondeo inesperado, realizado por la firma Opinion Matters, ha permitido a la candidata recobrar fuerzas. La consulta se celebr¨® entre el lunes y el mi¨¦rcoles, cuando ya se hab¨ªa encendido la pol¨¦mica en torno a sus declaraciones, y reflejaba que era la favorita de un 28% de los votantes del SNP, muy por delante del 20% que respaldaba a Yousaf (Regan no hab¨ªa presentado a¨²n su candidatura, y no aparece en el sondeo). Las cifras parec¨ªan confirmar lo que muchos soci¨®logos han defendido siempre: a los electores les gustan los candidatos que defienden abiertamente sus creencias. Forbes publicaba un largo comunicado de arrepentimiento en el que promet¨ªa defender los derechos de todos ¨D¡±particularmente de las minor¨ªas¡±¨D si resultaba elegida, y ha centrado desde entonces la campa?a en sus soluciones econ¨®micas frente a la actual crisis del coste de la vida, en un intento de dejar atr¨¢s el debate en torno a sus creencias religiosas.
¡°Si algo puede decirse de m¨ª despu¨¦s de lo sucedido la semana pasada es que estoy dispuesta a ser honesta y abierta, aun a costa de mi apuesta por el liderazgo del partido y de mi carrera pol¨ªtica¡±, escrib¨ªa Forbes.
El aparato del partido, pero sobre todo el equipo que a¨²n orbita en torno a Sturgeon, ha volcado su apoyo en Humza Yousaf. De 37 a?os, nacido en Glasgow y de ascendencia paquistan¨ª, el consejero de Sanidad es el primer musulm¨¢n miembro del Gobierno escoc¨¦s. A pesar de haber proclamado abiertamente su respaldo al matrimonio homosexual y a la Ley de Reforma del Reconocimiento de G¨¦nero, tampoco ¨¦l se ha librado de las pu?aladas. ¡°Yo fui el consejero que impuls¨® la ley del Matrimonio Homosexual [en 2014], y tres semanas antes de la votaci¨®n, en la que no hab¨ªa disciplina de voto, a diferencia de la ley de identidad de g¨¦nero, Humza pidi¨® permiso al ministro principal [entonces Alex Salmond] para ausentarse del Parlamento, porque, y cito, ¡®ten¨ªa mucha presi¨®n de la mezquita¡±, ha contado Alex Neil, exconsejero de Sanidad escoc¨¦s. Yousaf asegura que su respaldo a la ley fue p¨²blico en todo momento, pero el hecho de que no se cuestione su fe religiosa y s¨ª la de su rival ha a?adido m¨¢s le?a al fuego de la contienda.
Ash Regan, que abandon¨® el Gobierno Aut¨®nomo precisamente por su oposici¨®n a la ley de identidad de g¨¦nero, ha sido la ¨²nica de los tres candidatos dispuesta a tomar la antorcha del independentismo donde la dej¨® Sturgeon y elevarla varios escalones. Ha prometido abandonar la v¨ªa del refer¨¦ndum o de la negociaci¨®n con Londres, y declarar unilateralmente la independencia desde el momento en que el SNP obtenga una mayor¨ªa de votos o esca?os [en territorio escoc¨¦s] en las pr¨®ximas elecciones generales o auton¨®micas. ¡°Quiero que superemos esa sensaci¨®n constante de que tenemos que pedir permiso para hacer las cosas. Somos una naci¨®n orgullosa¡¤¡±, ha dicho Regan.
La batalla interna por el liderazgo del partido ha revelado que la solidez y unidad demostrada en los ¨²ltimos a?os ocultaba un andamiaje interno m¨¢s fr¨¢gil de lo esperado.
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