El nuevo mecanismo de reparto de refugiados de la UE vuelve a encallar
El modelo de reubicaci¨®n de los pa¨ªses mediterr¨¢neos logra solo 500 traslados en siete meses, menos del 6% del objetivo
El naufragio de un viejo pesquero el pasado domingo a apenas 150 metros de la costa de Calabria (Italia) es la ¨²ltima de las tragedias migratorias a las puertas de un continente que no se pone de acuerdo en c¨®mo evitarlas. Los al menos 64 muertos, muchos refugiados de pa¨ªses en guerra que no pueden cruzar regularmente las fronteras europeas, han vuelto a poner sobre la mesa la incapacidad de la Uni¨®n Europea de construir una pol¨ªtica migratoria que proteja fronteras, pero que garantice tambi¨¦n v¨ªas seguras para emigrar o una acogida digna y repartida entre todos los Estados miembros.
El Pacto de Migraci¨®n y Asilo que se negocia desde 2020 no se cierra; y los sistemas que la UE ensaya para crear un modelo de reparto de los que llegan vivos fracasan. La ¨²ltima iniciativa fue el Mecanismo de Solidaridad Voluntaria, que sum¨® a principios de este verano a 23 Estados dispuestos a apoyar a los cinco pa¨ªses mediterr¨¢neos, los m¨¢s expuestos a la entrada de inmigrantes que entran irregularmente por mar. Aquel acuerdo se celebr¨® con j¨²bilo, pero siete meses despu¨¦s, se ha vuelto a demostrar la lentitud y la rigidez de estos procesos y c¨®mo las cifras esperadas quedan muy lejos de las reales. Desde aquel pacto, con el que se prometi¨® reubicar a m¨¢s de 8.000 refugiados en un a?o, solo 514 personas (menos de un 6%) han sido trasladadas a otros pa¨ªses desde Espa?a, Italia y Chipre, seg¨²n datos de la Comisi¨®n Europea. En ese tiempo han llegado irregularmente por mar casi 130.000 personas y han muerto 4.857, seg¨²n la Organizaci¨®n Internacional para las Migraciones. En un documento confidencial publicado por Statewatch, la Comisi¨®n Europea considera los resultados ¡°decepcionantes¡±.
En el caso de Espa?a, donde se est¨¢ probando por primera vez un sistema como este, ni siquiera se est¨¢n completando los cupos con refugiados venidos en patera, para quienes est¨¢ pensado este mecanismo. Ante la supuesta ausencia de estos perfiles, las autoridades espa?olas est¨¢n recurriendo al traslado de afganos que no quieren permanecer en el pa¨ªs. El ¨²nico grupo de refugiados trasladado hasta ahora, que ha viajado recientemente a Francia, ha sido de 34 personas, el 40% de ellos afganos. Seg¨²n datos del Ministerio de Migraciones, adem¨¢s de los refugiados de Afganist¨¢n, hab¨ªa guineanos, marroqu¨ªes, sudaneses y un somal¨ª. De momento, solo est¨¢ pendiente el traslado de un segundo grupo a Alemania, compuesto tambi¨¦n en gran medida por refugiados afganos, y para el que Berl¨ªn a¨²n tiene que dar su aprobaci¨®n.
Fuentes de Migraciones se?alan que Espa?a no es destino de las nacionalidades a las que los pa¨ªses de acogida dan prioridad (Sud¨¢n, Sud¨¢n del Sur, Eritrea, Somalia o Etiop¨ªa) y que, por tanto, es m¨¢s complicada la selecci¨®n de candidatos. A Espa?a, sin embargo, s¨ª llegan personas que huyen de Sud¨¢n, Mal¨ª o Siria, que tienen una alta tasa de reconocimiento como refugiados, adem¨¢s de un alto porcentaje de mujeres y ni?os que necesitan especial protecci¨®n, pero el sistema falla en identificar las vulnerabilidades de las personas que llegan a costas espa?olas y en facilitarles el acceso al sistema de asilo.
Algunos responsables del sistema de acogida y asilo espa?ol ven estos traslados como un ¨¦xito, pero otras fuentes expertas consideran un fracaso el uso que est¨¢ haciendo Espa?a de este mecanismo. Por un lado, porque Espa?a no logra derivar a otros pa¨ªses a los perfiles para los que est¨¢ pensado, refugiados que entran de manera irregular en el pa¨ªs, sino que est¨¢ trasladando a familias cuya llegada fue facilitada por las propias autoridades espa?olas. Por otro, la voluntad de tantos afganos de irse de Espa?a ¡°dice muy poco de nuestro sistema de acogida¡±, se?ala una fuente involucrada en el proceso.
Descontento con el sistema de acogida espa?ol
Cristina Manzanedo, abogada especialista en migraciones, explica: ¡°El elevado porcentaje de familias afganas que desean reubicarse y los motivos que aducen reflejan un descontento con el sistema de acogida espa?ol¡±. Manzanedo, que apoya a una parte de los afganos que han llegado a Espa?a en el ¨²ltimo a?o y medio, mantiene que estos refugiados ¡°agradecen que Espa?a les haya salvado la vida, pero sienten que no les ofrece oportunidades reales para integrarse y salir adelante¡±. Fuentes del Ministerio del Interior reconocen que tal y como est¨¢ desarroll¨¢ndose, el sistema no funciona. ¡°Espa?a siempre ha defendido un sistema de reparto obligatorio, y este no lo es. Necesitamos reglas claras y vinculantes¡±, mantienen.
Los pa¨ªses que acogen¡ª Francia y Alemania son los m¨¢s implicados¡ª tienen claros los perfiles y las nacionalidades que est¨¢n dispuestos a asumir. Las estrictas preferencias se deben a que son los pa¨ªses de acogida los que tienen que resolver las solicitudes de asilo y quieren asegurarse de que los candidatos cumplen con los requisitos para que se les reconozca el estatus de refugiado. Una vez hecha la selecci¨®n de personas, las autoridades del pa¨ªs de destino se desplazan para entrevistarlas y aceptar o no su derivaci¨®n. El procedimiento, que aspiraba a ser simple y predecible, es complejo, burocr¨¢tico y, por tanto, no tan r¨¢pido como se desear¨ªa. Hay ¡°cuellos de botella¡±, reconoce la Comisi¨®n en el documento donde hace balance de los seis primeros meses de implementaci¨®n. Entre varias cuestiones que se deber¨ªan mejorar, el texto se?ala la falta de recursos, las exigencias de los pa¨ªses de acogida o la lentitud en identificar y entrevistar a los candidatos, que provoca que acaben desistiendo y perdiendo la confianza en el sistema.
A la complejidad del procedimiento se suma que Francia anunci¨® que romper¨ªa su acuerdo de reubicaci¨®n con Italia, cuando, el pasado noviembre, su primera ministra, Georgia Meloni, se neg¨® a permitir el desembarco del buque de la ONG SOS Mediterran¨¦e, de bandera francesa, con 230 migrantes a bordo. Par¨ªs acab¨® aceptando que el pasaje desembarcase en puerto franc¨¦s, pero amenaz¨® con ¡°consecuencias extremadamente fuertes en la relaci¨®n bilateral¡±. Desde agosto, no se ha producido ning¨²n traslado de Italia a Francia.
Una portavoz de la Comisi¨®n Europea mantiene que el trabajo operativo de reubicaci¨®n contin¨²a y que se esperan m¨¢s transferencias en las pr¨®ximas semanas. Asegura tambi¨¦n que se est¨¢ identificando c¨®mo mejorar la implementaci¨®n del mecanismo para que sea un procedimiento ¡°m¨¢s flexible y ¨¢gil¡±.
Desde la crisis de refugiados de 2015, Bruselas busca que los Estados miembros acepten un sistema de reparto obligatorio de refugiados. Es una de las piezas clave para avanzar en el pacto migratorio que se negocia desde 2020, porque es la f¨®rmula que reclaman los pa¨ªses con m¨¢s presi¨®n en sus costas, como Espa?a, Italia, Malta y Grecia. Pero la solidaridad, mucho m¨¢s si es obligada, cuenta con la oposici¨®n frontal de cada vez m¨¢s pa¨ªses, liderados tradicionalmente por Hungr¨ªa y Polonia. Los acuerdos encallan y acaban encontr¨¢ndose f¨®rmulas que no terminan de cuajar.
Matteo Villa, investigador del Instituto per gli Studi di Pol¨ªtica Internazionale (ISP), se?ala que los pocos mecanismos que consiguen ponerse en marcha siguen siendo voluntarios. ¡°Son experimentos¡±, explica. ¡°Para que funcionen deber¨ªan ser obligatorios, pero casi ning¨²n pa¨ªs estar¨ªa pol¨ªticamente de acuerdo. En esta paradoja, la situaci¨®n acaba siendo siempre la misma: el limbo de las buenas intenciones europeas¡±.
El ¨²ltimo mecanismo de reparto se lanz¨® en verano de 2018, cuando Italia y Malta se negaron a abrir sus puertos a los barcos de ONG que rescataban migrantes y refugiados en el Mediterr¨¢neo. En cuatro a?os, menos de 3.000 personas han sido trasladas desde Italia y Malta con ese procedimiento. Est¨¢ por ver si este nuevo proyecto piloto, que podr¨ªa inspirar un modelo definitivo, logra cumplir su objetivo. Y si la nueva pol¨ªtica migratoria de la UE conseguir¨¢, alg¨²n d¨ªa, evitar que todos los a?os miles de personas se dejen la vida intentando cruzar sus fronteras.
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