Ecuador autoriza llevar armas para la defensa personal frente a la escalada del crimen
El presidente Lasso relaja la normativa y decreta que los guardias de seguridad privada apoyen a la polic¨ªa en medio de la grave crisis de seguridad que atraviesa el pa¨ªs
La violencia desborda a las autoridades de Ecuador. El Gobierno de Guillermo Lasso autoriz¨® a los civiles la tenencia y porte de armas para defensa personal como soluci¨®n a la escalada de violencia que vive el pa¨ªs. ¡°Tenemos un enemigo com¨²n, la delincuencia, el narcotr¨¢fico y el crimen organizado¡±, empez¨® su alocuci¨®n el presidente en un mensaje a la naci¨®n justo antes de anunciar la medida que esta semana ha recibido toda clase de cr¨ªticas ante la posibilidad de que cualquier ciudadano tenga en sus manos un arma.
En Ecuador, las armas estaban reguladas para uso exclusivo de militares, polic¨ªas y ciertos sectores productivos. Pero con la modificaci¨®n, a trav¨¦s de un decreto presidencial, la tenencia y porte de armas se abre a todos los civiles que cumplan con algunos requisitos, como tener al menos 25 a?os y sacar un certificado de evaluaci¨®n psicol¨®gica y toxicol¨®gica emitido por el Ministerio de Salud.
¡°Esto es parte de la mirada militarista de la seguridad que ha venido implementando el presidente¡±, se?ala el analista Luis Carlos C¨®rdova. En su opini¨®n, la medida ¡°ahora traslada la responsabilidad a la sociedad civil¡±. No obstante, aclara que el acceso estar¨¢ limitado a aquellos segmentos socioecon¨®micos que tienen la posibilidad de invertir en la compra de una arma: ¡°Esto es restrictivo para la inmensa mayor¨ªa de la poblaci¨®n¡±.
La nueva decisi¨®n gubernamental afecta tambi¨¦n a los guardias de seguridad privada, que deber¨¢n apoyar a la polic¨ªa ¡°en las tareas de vigilancia y seguridad portando sus armas en los alrededores de sus puestos de trabajo¡±. As¨ª lo indic¨® Lasso sin dar m¨¢s detalles de cu¨¢les ser¨¢n las responsabilidades civiles y penales que recaer¨ªan en quienes hagan uso de un arma de fuego. Los guardias conocen sus limitaciones. Por ejemplo, no tienen un entrenamiento como el que deber¨ªan cumplir los miembros de la fuerza p¨²blica, por lo que el anuncio ha causado rechazo y temor.
¡°Ahora ser¨¢ peor¡±
¡°Nosotros no hemos sido entrenados para eso¡±, afirma Carlos Jaramillo, un guardia certificado que trabaja en Guayaquil, la ciudad m¨¢s violenta del pa¨ªs, donde los cr¨ªmenes se acercan a los 600 en menos de cuatro meses y el 95% de los asesinatos se han perpetrado con armas de fuego. ¡°C¨®mo puede darnos esa responsabilidad si ya nos daba miedo salir a trabajar con tanta inseguridad, ahora ser¨¢ peor si nos obligan a actuar ante cualquier atentado¡±, a?ade Carlos.
La academia y los grupos de derechos humanos que trabajan contra la violencia de g¨¦nero y la ni?ez tambi¨¦n han expresado su rechazo. Critican que las medidas adoptadas por el Gobierno no contemplan ¡°atender las causas subyacentes de la violencia relacionadas con la desigualdad, la discriminaci¨®n y la pobreza¡± y le recuerda que el pa¨ªs tiene compromisos de reducir la demanda y disponibilidad de armas para prevenir la violencia en ni?os y adolescentes. En Ecuador se incautaron 9.553 armas ilegales en 2022, seg¨²n registr¨® la Direcci¨®n de Estudios de Seguridad. Y solo entre enero y febrero de este a?o se decomisaron 1.722 armas de fuego.
Semana ca¨®tica
La decisi¨®n de Lasso se da en una de las semanas m¨¢s ca¨®ticas que ha vivido el pa¨ªs. A las docenas de cr¨ªmenes diarios se sumaron los asesinatos de administradores de hospitales p¨²blicos, atentados con explosivos a diferentes medios de comunicaci¨®n y el hallazgo de cabezas. Adem¨¢s, un hombre que era guardia de seguridad de una casa de empe?o apareci¨® con explosivos amarrados en el cuerpo.
El pasado viernes tambi¨¦n fue hallado muerto uno de los principales sospechosos en una trama de corrupci¨®n que rodea al c¨ªrculo cercano del mandatario, en la poblaci¨®n costera de Punta Blanca, a una hora de Guayaquil. Hasta el momento las autoridades no han detenido a los posibles responsables, ni las bandas criminales se han atribuido la autor¨ªa de estos atentados.
Seg¨²n el analista C¨®rdova, ¡°estos elementos han ido creando un ambiente de descontrol de la violencia, de temor absoluto, sobre todo en las ¨¦lites sociales, en la gente de mayor estrato socioecon¨®mico que hizo factible adoptar esta decisi¨®n con su respaldo¡±. Otras de las lecturas es que la medida sea un gui?o al partido de derecha Social Cristiano, que ha sido el principal defensor de la tenencia y porte de armas como f¨®rmula para combatir la inseguridad y que en la actualidad apoya el juicio pol¨ªtico contra Lasso en el legislativo. Seg¨²n esta tesis, la medida podr¨ªa ser una moneda de cambio para evitar la destituci¨®n del mandatario.
En el paquete de medidas contra la inseguridad se incluye adem¨¢s un nuevo estado de excepci¨®n con toque de queda que restringe el libre tr¨¢nsito de los ciudadanos en las ciudades de Guayaquil, Dur¨¢n, Samborond¨®n y en las provincias de Santa Elena y Los R¨ªos, una medida que el Ejecutivo ha utilizado en por lo menos 14 ocasiones para intentar contener la inseguridad y la violencia en dos a?os de mandato.
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