El silencio de Ucrania sobre la contraofensiva deja en manos de Rusia el suministro de informaci¨®n clave

Silencio. Esta es la consigna que el Gobierno y las Fuerzas Armadas Ucranias siguen desde este junio, con los primeros compases de la contraofensiva. Dos v¨ªdeos que ha distribuido el Ministerio de Defensa son elocuentes: en el primero, de la semana pasada, soldados de varias unidades militares miran a c¨¢mara y piden, con un gesto de la mano, que la gente est¨¦ callada y que nadie aporte ning¨²n dato sobre las acciones militares. El segundo v¨ªdeo, del domingo, muestra al general responsable de los servicios de inteligencia, Kirilo Budanov, mirando a c¨¢mara durante 30 segundos, sin decir una palabra y con un lema sobreimpreso: ¡°Los planes aman el silencio¡±. Ante este apag¨®n informativo ¡ªaunque en las ¨²ltimas horas las autoridades ucranias s¨ª han comunicado la liberaci¨®n de varios pueblos, sobre todo en la regi¨®n de Donetsk¡ª, los medios de comunicaci¨®n y los analistas de defensa dependen de las fuentes militares rusas.

La sociedad ucrania ha acatado la ley del silencio porque considera que el futuro de su pa¨ªs se juega en la contraofensiva. No solo las unidades militares y el Ministerio de Defensa han dejado de transmitir informaci¨®n. Medios de comunicaci¨®n nacionales, acad¨¦micos y analistas de defensa ucranios tambi¨¦n han optado por evitar incluso valorar la evoluci¨®n de las batallas. Hasta hace pocas semanas, miles de soldados ucranios en el frente ofrec¨ªan en las redes sociales v¨ªdeos y comentarios diarios sobre el escenario de guerra. Esto tambi¨¦n ha sido frenado en seco.

Medios internacionales y centros de an¨¢lisis de la guerra dependen en estos momentos de las fuentes de informaci¨®n rusas en el frente, sobre todo de las cuentas de Telegram de comandantes, de grupos de an¨¢lisis prorrusos como Rybar, RusVesna o Grey Zone, de periodistas activistas en primera l¨ªnea rusa como Sasha Kots o Semion Pegov, o de personajes como ?gor Girkin (condenado en ausencia en Pa¨ªses Bajos por el derribo del vuelo MH17 de Malaysia Airlines) o el l¨ªder del grupo de mercenarios Wagner, Yevgueni Prigozhin. Tanto la sociedad ucrania como la internacional tienen detalles de los avances de Kiev en el frente de Donetsk y de Zaporiyia gracias a ellos.

El enemigo se ha beneficiado de esto, seg¨²n admite Mija¨ªlo Samus, director del centro de estudios de defensa New Geopolitics: ¡°En la guerra moderna es un elemento clave dominar la informaci¨®n, y los rusos est¨¢n siendo muy eficientes. Por ellos sabemos que han sido destruidos tanques Leopard. Nosotros no hemos dicho nada¡±. Samus advierte de que la propaganda rusa sirve esencialmente mentiras, por ejemplo, dando un n¨²mero supuestamente exagerado de Leopard eliminados, y la clave para que el mensaje cuaje es que haya algo de verdad. El acceso de los medios de comunicaci¨®n al frente, para informar de estas cuestiones y replicar a la propaganda, ha estado severamente limitado desde el principio de la guerra (sobre todo en el lado ruso). Desde este a?o, el Estado Mayor ucranio ha introducido incluso m¨¢s dificultades.

¡°Patriotas¡± leen al enemigo

Lo cierto es que gracias a la informaci¨®n rusa el mundo sabe que los blindados aportados a Ucrania por sus socios en la OTAN ya est¨¢n en primera l¨ªnea de combate. John Helin, analista de la guerra en el grupo finland¨¦s Black Bird, confirma la predominancia rusa en la informaci¨®n del conflicto: ¡°Los analistas de defensa est¨¢n dependiendo mucho de esto porque informan de la evoluci¨®n de los combates, a diferencia de las fuentes ucranias. Creo que es negativo para los intereses de Ucrania, y el hecho de que se mantenga en silencio da una ventaja a Rusia en el mundo de la informaci¨®n¡±. Helin a?ade que incluso cuentas de comunicaci¨®n ucranias est¨¢n utilizando por primera vez fuentes de informaci¨®n rusas. ¡°Es una regla sencilla, cuando optas por el silencio, la audiencia empieza a escuchar a tu enemigo. Ya tenemos este problema, incluso patriotas ucranios est¨¢n empezando a hacer caso a los medios basura rusos¡±, explica V¨ªktor Tregubov, capit¨¢n del Ej¨¦rcito ucranio experto en comunicaciones.

Gracias a estas fuentes rusas, el p¨²blico ucranio e internacional sabe tambi¨¦n de los avances de las tropas de Kiev en Zaporiyia, y de las brigadas involucradas en los combates. Observadores rusos han anunciado antes que las Fuerzas Armadas Ucranias la liberaci¨®n de aldeas en las zonas lim¨ªtrofes de Zaporiyia y Donetsk. La reconquista de municipios en esta ¨¢rea es reconocida por blogueros y militares rusos antes que por el bando ucranio. Girkin anunci¨® el s¨¢bado que Neskuchne ya era ucrania, y la versi¨®n oficial lleg¨® un d¨ªa m¨¢s tarde. Con otros municipios, como Blahodatne o Makarivka (en Donetsk), ha sucedido lo mismo. Rus Vesna informaba este lunes de que una contraofensiva rusa hab¨ªa sido lanzada contra Makarivka, precisando incluso las unidades implicadas.

Olha Husieva, acad¨¦mica del Instituto para Pol¨ªtica de Seguridad de Kiel (Alemania), ha constatado que tanto ella como sus compa?eros dependen de las fuentes rusas: ¡°El bando ucranio ha asumido pagar este precio, ceder el control del relato a Rusia, a cambio de tener beneficios t¨¢cticos en el campo de batalla¡±. Husieva ve un cambio de estrategia informativa evidente por parte de Kiev, porque hasta ahora siempre hab¨ªa intentado dirigir la atenci¨®n medi¨¢tica para utilizarla a su favor; por ejemplo, en 2022, cuando enviaba mensajes de que se estaba preparando un gran ataque en Jers¨®n mientras preparaba en secreto la liberaci¨®n de J¨¢rkov. ¡°Ahora lo que hay es un apag¨®n informativo¡±, dice Husieva, porque hay muchos planes en marcha, para tantear las defensas rusas, y la presencia de observadores externos puede ser una ventaja para el enemigo. Seg¨²n la experta, el Estado Mayor ucranio ha aprendido de la experiencia en la batalla de Bajmut, cuando la prensa ten¨ªa un mayor acceso directo a las posiciones ucranias e informaba al instante de avances y retrocesos. ¡°Han aprendido que si no tienen una posici¨®n asegurada, es mejor no contar con los medios¡±.

Helin, por su parte, considera inevitable que la audiencia internacional quiera saber lo que sucede, en parte tambi¨¦n por los miles de millones de euros donados a Ucrania en ayuda militar, y defiende las fuentes militares rusas no oficiales como leg¨ªtimas, y se?ala que ¡°en muchos casos son voces opuestas¡± a las de su Ministerio de Defensa: ¡°Las fuentes rusas son absolutamente v¨¢lidas, aunque deben ser analizadas cr¨ªticamente por los medios. La informaci¨®n sobre el movimiento de tropas y qu¨¦ unidades combaten son cruciales para elaborar un mosaico m¨¢s grande. Y aunque son propaganda con frecuencia, tambi¨¦n informan de las preocupaciones de las tropas rusas y de los errores cometidos¡±. Helin, por ejemplo, pudo identificar gracias a im¨¢genes rusas que tres de los seis Leopard con equipos antiminas suministrados por Finlandia a Ucrania fueron destruidos en una misma batalla en Zaporiyia.

Este experto finland¨¦s corrobora que la campa?a de silencio en Ucrania ¡°ha sido claramente un ¨¦xito, sobre todo entre la poblaci¨®n civil, que no aporta ning¨²n testimonio de lo que est¨¢ sucediendo¡±. Esto es especialmente evidente en los bombardeos contra ciudades, en los que est¨¢ terminantemente prohibido tomar im¨¢genes de explosiones o de cualquier objeto a¨¦reo. En las redes sociales es habitual que usuarios ucranios denuncien a los servicios de inteligencia a aquellos que comparten im¨¢genes, aunque no supongan ning¨²n riesgo de identificaci¨®n de objetivos o de armamento.

Habitual en cualquier ej¨¦rcito

Samus defiende sin fisuras la estrategia de las autoridades ucranias porque lo que est¨¢ en juego son vidas de soldados y la propia existencia de Ucrania: ¡°Cualquier ej¨¦rcito del mundo deja de informar cuando hay operaciones militares en marcha, sobre todo si son ofensivas. Cualquier informaci¨®n puede servir para localizar a tus unidades; por eso, si se informa se hace sobre sucesos que son de hace dos o tres d¨ªas¡±. El director de New Geopolitics asegura que en la contraofensiva de noviembre que liber¨® la parte occidental de la provincia de Jers¨®n se sigui¨® la misma pol¨ªtica informativa.

El Alto Mando Ucranio para el Frente Sur, donde se engloba Jers¨®n, se ha significado como el m¨¢s restrictivo para el trabajo de los periodistas. La semana pasada provocaron numerosas quejas por parte de los medios las enormes limitaciones que impuso el ej¨¦rcito en el sur para cubrir las inundaciones en el r¨ªo Dni¨¦per provocadas por la destrucci¨®n de la presa de Nova Kajovka. Ucrania ha denunciado que la presa fue saboteada por el ej¨¦rcito invasor, posici¨®n que han apoyado sus aliados europeos. Pese a ello, el ministro de Exteriores, Dmitro Kuleba, asegur¨® el d¨ªa 6 en sus redes sociales que estaba ¡°furioso¡± porque los medios internacionales inclu¨ªan en sus art¨ªculos la versi¨®n rusa de los hechos ¡ªesta ser¨ªa que la infraestructura hab¨ªa sido saboteada por los ucranios, o bien que se hab¨ªa derrumbado tras meses bajo fuego de artiller¨ªa¡ª. Kuleba estaba indignado porque la prensa ¡°pon¨ªa los hechos y la propaganda al mismo nivel¡±.

Las palabras de Kuleba contrastan con el hecho de que el ministro sabe de las dificultades que tiene la prensa para obtener informaci¨®n de primera mano. Un vecino de Berislav, un pueblo a cinco kil¨®metros de la presa, a orillas del Dni¨¦per, contact¨® el d¨ªa 6 con el enviado especial de EL PA?S invit¨¢ndolo a visitar el municipio para ofrecer pruebas sobre la autor¨ªa rusa de la cat¨¢strofe. La entrevista no pudo producirse porque el ej¨¦rcito impidi¨® al periodista acercarse a menos de 30 kil¨®metros de Berislav, alegando motivos de seguridad en el r¨ªo.

Samus, Helin y otras fuentes gubernamentales ucranias coinciden en una convicci¨®n: que a medida que las tropas ucranias avancen y afiancen la contraofensiva, se levantar¨¢n parte de las restricciones. ¡°Creo que m¨¢s de dos semanas no pueden mantener esta estrategia¡±, indica Husieva, ¡°de lo contrario, perder¨¢n el control del relato de la guerra¡±.

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