Donald Trump: ¡°Voy a nombrar a un fiscal especial para perseguir a Biden si soy elegido¡±
El candidato republicano defiende su derecho a guardarse los documentos en un acto de recaudaci¨®n de fondos en Nueva Jersey horas despu¨¦s de ser imputado por los papeles de Mar-a-Lago
El primer expresidente estadounidense procesado por cargos penales federales no da se?ales de des¨¢nimo tras encajar la segunda imputaci¨®n en dos meses. Tras la de Nueva York por el caso Stormy Daniels ¡ªel pago de dinero negro para silenciar una aventura extramatrimonial¡ª, el republicano ha sido acusado en la ma?ana de este martes en Miami de revelaci¨®n de secretos y obstrucci¨®n a la justicia, entre los 37 cargos que se le atribuyen, jur¨ªdicamente m¨¢s graves que los del caso anterior, pero pol¨ªticamente indiscernibles, dado que cada rev¨¦s judicial parece propulsar su candidatura a la reelecci¨®n en 2024.
Horas despu¨¦s de declararse no culpable, el magnate ha aprovechado un acto de recaudaci¨®n de fondos para denunciar la imputaci¨®n, calific¨¢ndola de ¡°abominable abuso de poder¡± e ¡°interferencia electoral¡±; arremeter contra los dem¨®cratas por, en su opini¨®n, hacer lo mismo que ¨¦l o cosas incluso peores ¡ªinvoc¨® a Hillary Clinton, pero tambi¨¦n llam¨® corrupto a Joe Biden¡ª, y reafirmar su derecho a guardarse el material clasificado que origin¨® la imputaci¨®n: ¡°Tengo todo el derecho a tener esos documentos¡±. Tambi¨¦n corrobor¨® su intenci¨®n de llegar a la Casa Blanca el a?o pr¨®ximo, aunque se enfrenta a cargos que podr¨ªan enviarlo a prisi¨®n de por vida, y de vengarse de los dem¨®cratas si lo logra: ¡°Voy a nombrar a un fiscal especial para perseguir al presidente m¨¢s corrupto de la historia de EE UU, Joe Biden, y a toda la familia criminal de Biden si soy elegido¡±, amenaz¨®. Fue un discurso inusualmente breve, un tanto apagado en comparaci¨®n con otras ocasiones m¨¢s en¨¦rgicas.
El escenario del desahogo ha sido su club de golf en Bedminster (Nueva Jersey), un lugar destacado en la acusaci¨®n federal ¡ªaparece en dos incidentes clave mencionados en el sumario del fiscal especial Jack Smith, de quien Trump dijo que se dedica a ¡°realizar asesinatos pol¨ªticos¡±¡ª, y donde esta tarde se celebraba un acto para donantes VIP, entre ellos el empresario y te¨®rico de la conspiraci¨®n Mike Lindell, el fontanero y operador de lujo Kash Patel y Andrew Giuliani, hijo de su exabogado Rudy Giuliani. Mientras su esposa, Melania, pasaba la jornada en Nueva York, lejos del fragor medi¨¢tico y judicial, Trump llegaba en torno a las ocho y media de la tarde a Bedminster: la caravana de veh¨ªculos entr¨® en el recinto mientras sonaba por los altavoces Suspicious Mind, de Elvis Presley. Como en abril, el magnate hizo de la contrariedad virtud, intentando rentabilizar en adhesiones y donativos la nueva acusaci¨®n, al igual que hab¨ªa hecho a lo largo del d¨ªa, con correos electr¨®nicos a sus partidarios para pedirles dinero y publicaciones grandilocuentes en Truth Social, su propia red social.
El patio del club Bedminster acogi¨® decenas de sillas plegables dispuestas para los selectos invitados, muchos de ellos de tiros largos, en un ambiente de entusiasmo propio de las grandes ocasiones. A juzgar por las encuestas, la bandera del victimismo le funciona: los votantes republicanos siguen siendo abrumadoramente leales a Trump a pesar de sus cargos y el resto de procesos judiciales que afronta, seg¨²n las ¨²ltimas encuestas. En una de CBS publicada el domingo, el 61% de los participantes dijo que la imputaci¨®n no va a hacerles cambiar de opini¨®n sobre el candidato favorito de las primarias del Partido Republicano para 2024, mientras el 80% considera que los cargos contra ¨¦l son pol¨ªticos. Encuestas menos partidistas, como la que cocinan los periodistas y columnistas de The New York Times, muestran tambi¨¦n a Trump por delante de sus rivales en las primarias republicanas, con 8,2 puntos, dos m¨¢s que su inmediato competidor, el gobernador de Florida, Ron DeSantis.
No obstante, como dijo este fin de semana quien fuera su fiscal general, Bill Barr, aunque solo la mitad de los cargos que se le han imputado hoy en Miami fuera cierta, el republicano ya estar¨ªa ¡°frito¡±. Pero si las 34 acusaciones por falsificaci¨®n de registros mercantiles que el fiscal de Manhattan le imput¨® en abril lograron unificar a muchos republicanos en torno a Trump, los 37 cargos presentados este martes en Miami podr¨ªan obrar el mismo efecto entre sus fieles, y especialmente entre los congregados esta noche en Bedminster. La acusaci¨®n federal, que al menos el 60% del electorado republicano considera de ¨ªndole pol¨ªtica, puede galvanizar a¨²n m¨¢s las fuerzas.
Aunque Trump ha sido acusado penalmente, no tiene prohibido presentarse o asumir el cargo presidencial, incluso aunque fuera condenado. Siendo como es Trump, advirti¨® este martes su antigua secretaria de prensa Stephanie Grisham, ¡°va a doblar, triplicar su apuesta. Va a recaudar fondos. Va a hacerse la v¨ªctima¡±. Como demostr¨®, en olor de multitudes, en Bedminster. La pol¨ªtica de la negaci¨®n de la realidad llego a su culmen cuando el expresidente cont¨®: ¡°Mucha gente me ha preguntado por qu¨¦ ten¨ªa esas cajas [de documentos], para qu¨¦ las quer¨ªa¡±. Las cajas, explic¨®, ¡°conten¨ªan todo tipo de efectos personales, camisas y zapatos¡±.
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