Jueces y fiscales de Guatemala anuncian desde el exilio, tras el triunfo del progresista Ar¨¦valo: ¡°Nos ver¨¢n volver¡±
La victoria en las presidenciales del candidato de izquierda alienta el retorno de una treintena de funcionarios judiciales que abandonaron el pa¨ªs perseguidos por instruir casos contra la corrupci¨®n
La noche del 20 de agosto, mientras Guatemala aguardaba con nerviosismo los resultados de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, a miles de kil¨®metros, en Estados Unidos, un grupo de jueces, fiscales y exfuncionarios judiciales reconocidos internacionalmente por su lucha anticorrupci¨®n celebraba en el exilio lo que pronto se confirmar¨ªa: el triunfo del progresista Bernardo Ar¨¦valo. Bailaron, bebieron, se abrazaron, lanzaron fuegos artificiales y lloraron. La elecci¨®n de Ar¨¦valo representa para este grupo de 38 personas la posibilidad de un cambio en un pa¨ªs con altos ¨ªndices de corrupci¨®n y donde muchas instituciones est¨¢n secuestradas por intereses empresariales, pol¨ªticos y militares. Ar¨¦valo representa una amenaza para este entramado de impunidad. La noche de su triunfo, los jueces y fiscales exiliados decretaron: ¡°Nos ver¨¢n volver¡±.
El regreso a Guatemala no ser¨¢ f¨¢cil ni pronto. Ar¨¦valo inform¨® la noche de su elecci¨®n que se opon¨ªa a la persecuci¨®n de funcionarios honestos que han llevado casos de corrupci¨®n que han apuntado en ocasiones al todav¨ªa presidente Alejandro Giammattei. El candidato progresista arras¨® en la segunda vuelta con el 58% de los votos con un fuerte discurso anticorrupci¨®n, un compromiso personal de acabar con lo que en Guatemala se denomina pacto de corruptos, una alianza mafiosa entre poderes pol¨ªticos, econ¨®micos y militares que ha saqueado al pa¨ªs.
Thelma Aldana, la exfiscal general del pa¨ªs centroamericano, explica por tel¨¦fono desde Washington: ¡°Yo veo a Bernardo Ar¨¦valo como un gobernante fuerte. Es cierto que no tendr¨¢ de su lado al Congreso, tiene un sistema de justicia que ha dado muestras de estar del lado oscuro, pero puede imponer su agenda, ser un presidente honrado y con eso Guatemala ya gan¨® bastante. ?l har¨¢ un Gobierno transparente. Esa es su fuerza¡±.
Aldana lleva cuatro a?os en el exilio en Washington, una ciudad donde se encuentra la mayor¨ªa de los exfuncionarios que abandonaron el pa¨ªs. La exfiscal logr¨® gran notoriedad con la Comisi¨®n Internacional contra la Impunidad (CICIG), que fue despu¨¦s desmantelada por el Gobierno de Jimmy Morales (2016-2020). La funcionaria lider¨® las investigaciones del llamado Caso la L¨ªnea, que involucraba a un grupo de importadores que, con complicidad de Aduanas, burlaban al fisco para pagar menos por la importaci¨®n de mercanc¨ªas. Las pesquisas forzaron la renuncia y el arresto del presidente Otto P¨¦rez Molina (2012-2015) y su vicepresidenta Roxana Baldetti. Aldana se convirti¨® desde entonces en un personaje inc¨®modo. Fue v¨ªctima de una dura persecuci¨®n y de amenazas. Dej¨® Guatemala en 2018. El Ministerio P¨²blico emiti¨® dos ¨®rdenes de captura en su contra por casos de corrupci¨®n que, ha dicho, fueron fabricados.
Otro de los exiliados en Washington es Juan Francisco Sandoval, el antiguo fiscal anticorrupci¨®n de Guatemala, quien se vio obligado a huir de su pa¨ªs de noche, escoltado en un coche diplom¨¢tico europeo por su seguridad, con rumbo hacia El Salvador. De all¨ª vol¨® despu¨¦s a Estados Unidos. Sandoval celebr¨® el triunfo de Ar¨¦valo y ya hab¨ªa advertido a EL PA?S que la poblaci¨®n manifest¨® con su voto ¡°lo que no puede hacer en las calles, porque existe un alto riesgo de criminalizaci¨®n¡±. El amplio margen del triunfo del candidato fue la herramienta ¡°para manifestar su hartazgo a la clase pol¨ªtica¡±. Una posici¨®n similar mantiene Erika Aif¨¢n, la jueza que renunci¨® a su cargo como titular del llamado Juzgado D de Mayor Riesgo de Guatemala, debido a las amenazas que sufri¨® por parte de ¡°redes pol¨ªticas y criminales¡±, seg¨²n denunci¨® a este diario. Aif¨¢n afirma que el apoyo popular es una garant¨ªa de cambio. ¡°Hoy el mejor argumento y la acci¨®n m¨¢s contundente de los guatemaltecos contra la corrupci¨®n es el voto. Guatemala puede hoy empezar a escribir una historia de democracia, justicia y paz¡±, ha dicho.
Entusiasmo frente a la realidad
El entusiasmo de estos funcionarios exiliados se topa con la realidad. Desde Guatemala llegan noticias de un sistema que intenta revertir el resultado electoral y donde el ganador ha sido amenazado de muerte. En la naci¨®n, la violencia ha silenciado a quienes desean hacer cambios profundos en el sistema. Aldana ha sido v¨ªctima de esa forma de hacer pol¨ªtica. ¡°Hace cuatro a?os iba a ser la candidata por el Movimiento Semilla [el partido que llev¨® al poder a Ar¨¦valo] y la DEA me advirti¨® de que se fraguaba un atentado en mi contra y me recomendaba no estar en Guatemala¡±, cuenta la exfiscal. La exfuncionaria denuncia que las autoridades guatemaltecas no investigaron las amenazas y responsabiliza a Consuelo Porras, actual fiscal general, no solo por ese silencio, sino por la persecuci¨®n y criminalizaci¨®n contra los operadores de justicia. Porras cuenta con el respaldo y la protecci¨®n del presidente Giammattei.
La situaci¨®n no ser¨¢ f¨¢cil para el nuevo presidente. Los 38 jueces y fiscales esperan en el exilio que logre cumplir sus promesas y que una nueva Guatemala surja para que puedan volver y continuar su trabajo contra la impunidad. Thelma Aldana explica: ¡°No se puede describir con una sola palabra el exilio. El exilio es dolor, es tocar fondo como ser humano; se conoce la angustia, la ansiedad, la soledad, la incertidumbre, el miedo. Tuve que asistir a una iglesia, empec¨¦ a leer la Biblia y fui tomando mucha fuerza espiritual hasta canalizar estos sentimientos y dar paso a la resiliencia¡±. La exfiscal concluye: ¡°Uno quiere vivir con su familia, extra?a el clima de su pa¨ªs, las costumbres. Sabemos que no es el momento de volver, porque no hay condiciones. Esperamos que el Gobierno de Ar¨¦valo nos genere esas condiciones. Nos ver¨¢n volver, ese es el sue?o que tenemos y queremos cumplir¡±.
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