La crisis del fentanilo obliga a la DEA a modificar la lista de los criminales m¨¢s buscados

La crisis del fentanilo en Estados Unidos ha sacudido la lista de los criminales m¨¢s buscados. La Drug Enforcement Administration (DEA), la agencia antinarc¨®ticos del pa¨ªs, ha prescindido de capos hist¨®ricos en los primeros lugares de su lista de fugitivos. Estos puestos han sido ocupados por los operadores mexicanos que ayudan al cartel de Sinaloa a introducir el potente opi¨¢ceo sint¨¦tico al pa¨ªs norteamericano y por los delincuentes chinos que embarcan la sustancia desde Asia. La DEA pone el foco en el grupo criminal de los hijos de Joaqu¨ªn El Chapo Guzm¨¢n, conocido en M¨¦xico como Los Chapitos.

En la cabeza de la lista figura ?scar No¨¦ Medina Gonz¨¢lez, el jefe de sicarios y mano derecha de Iv¨¢n Archivaldo Guzm¨¢n Salazar, uno de los hijos del l¨ªder del cartel de Sinaloa, quien purga una cadena perpetua en una prisi¨®n de m¨¢xima seguridad de Colorado. De acuerdo al Gobierno de Estados Unidos, Medina Gonz¨¢lez, conocido en la banda criminal con el apodo de Panu, tiene entre sus responsabilidades proteger las rutas de exportaci¨®n del fentanilo, asesinar a rivales de otras organizaciones, conquistar nuevas plazas para el tr¨¢fico de drogas y atacar a las fuerzas de seguridad. Washington ofrece cuatro millones de d¨®lares a quien pueda colaborar para su captura.

En la segunda posici¨®n se encuentra Kun Jiang, un ciudadano chino que abastece al cartel de Sinaloa de precursores qu¨ªmicos que son empleados en la fabricaci¨®n clandestina del fentanilo. Jiang, por quien se ofrece un mill¨®n de d¨®lares, trabaja en la farmac¨¦utica Suzhou Xiaoli, una empresa que envi¨® 25 kilos de precursores qu¨ªmicos a Guadalajara (M¨¦xico) en septiembre de 2021. Las sustancias ilegales fueron incautadas entonces por funcionarios mexicanos. La DEA cree que el cartel sinaloense hizo la compra.

Washington responsabiliza a las dos grandes organizaciones criminales mexicanas, la de Sinaloa y el Cartel Jalisco Nueva Generaci¨®n, de inundar decenas de comunidades con el potente opi¨¢ceo. Los Chapitos, sin embargo, han puesto en duda esta versi¨®n en una carta de mayo hecha p¨²blica por sus abogados. ¡°Nunca hemos trabajado con fentanilo¡±, afirman en el documento, donde se dicen v¨ªctimas de una persecuci¨®n.

El fentanilo ha provocado una epidemia que el a?o pasado dej¨® 107.000 muertes por sobredosis. La DEA inform¨® en mayo los resultados de un operativo vigente por un a?o que dej¨® 3.330 detenidos y la incautaci¨®n de 44 millones de p¨ªldoras de fentanilo y dos toneladas de precursores. Esto es suficiente para fabricar una dosis mortal para 193 millones de personas.

La lista de la DEA pretende atacar todos los ¨¢ngulos del tr¨¢fico de fentanilo. Desde su origen en China hasta los capos que operan las rutas que llevan la droga al interior de Estados Unidos, donde las dosis son vendidas a trav¨¦s de traficantes adheridos a bandas locales. Entre los m¨¢s buscados destaca tambi¨¦n Liborio N¨²?ez Aguirre, conocido en el bajo mundo como El karateca.

El karateca, quien pertenece al Cartel de Sinaloa, es uno de los principales traficantes de fentanilo. Es capaz de introducir al pa¨ªs hasta medio mill¨®n de dosis en una sola operaci¨®n. Entre marzo y abril de 2022, de acuerdo con el relato de las autoridades, negoci¨® un cargamento de 70.000 p¨ªldoras que pertenec¨ªan a los Chapitos. Estas entraron a EE UU a trav¨¦s de Oceanside, al norte de San Diego (California) y fueron incautadas por agentes de la DEA.

San Diego es un puerto de entrada muy socorrido por los traficantes. Luis Javier Benitez Espinoza, alias El Catorce, utiliza esta garita para introducir miles de dosis de la droga. Estados Unidos ofrece un mill¨®n de d¨®lares a quien aporte informaci¨®n que lleve a la detenci¨®n de Espinoza, otra pieza a las ¨®rdenes de los Chapitos que tambi¨¦n integra la lista de los m¨¢s buscados. Lo mismo sucede con Alan Gabriel N¨²?ez Herrera, quien opera el trasiego en el ¨¢rea de Los ?ngeles.

Otros de los que aparecen en la lista ya han sido capturados gracias al amplio despliegue que Estados Unidos ha puesto en marcha para disminuir la cantidad de droga que llega a sus calles. Es el caso de Carlos Omar F¨¦lix Guti¨¦rrez, quien operaba los laboratorios clandestinos que el Cartel de Sinaloa usaba para convertir los precursores qu¨ªmicos en fentanilo. Guti¨¦rrez fue detenido en marzo de este a?o por autoridades de Colombia minutos despu¨¦s de haber aterrizado en Bogot¨¢ proveniente de M¨¦xico. En ese mes, la DEA captur¨® a siete integrantes de los Chapitos en operativos conjuntos llevados a cabo en Guatemala y Grecia.

Las autoridades estadounidenses afirman que los Chapitos utilizan las redes sociales como una herramienta para mover las drogas en las ciudades. ¡°Es alarmante¡±, afirm¨® hace algunos meses Ann Milgram, la directora de la DEA. ¡°Los carteles usan estos medios y otras plataformas encriptadas para llevar a cabos sus operaciones y llegar a las v¨ªctimas, y cuando sus productos matan a estadounidenses, simplemente siguen adelante¡±, dijo en mayo. Entre las redes sociales empleadas por los traficantes est¨¢ Facebook, Instagram, Tik Tok, Snapchat, WhatsApp, Telegram, Signal, Wire y Wickr.

La lista de la DEA es un reflejo de los nuevos tiempos que se libran en la guerra contra las drogas. El compendio estuvo casi siempre encabezado por capos como Ismael El Mayo Zambada, uno de los viejos criminales del C¨¢rtel de Sinaloa o Rafael Caro Quintero, otro de los criminales a los que los agentes estadounidenses siguen la pista. Tambi¨¦n Nemesio Oseguera, conocido como El Mencho, el l¨ªder del sangriento cartel que opera en Jalisco y responsable de buena parte de la violencia en ese Estado y en el occidente mexicano. Estos criminales no han abandonado la lista. Aparecen entre los 600 objetivos de caza de las fuerzas del orden en este pa¨ªs. Pero s¨ª han sido desplazados por una crisis m¨¢s urgente.

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