La renuncia de Scalise, candidato republicano a presidir la C¨¢mara de Representantes, sume al partido en el caos

El Partido Republicano ¨Dy con ¨¦l, la C¨¢mara de Representantes de Estados Unidos y el pa¨ªs mismo¨D se hizo este jueves por la noche un poco m¨¢s ingobernable con la renuncia del congresista por Luisiana Steve Scalise en su carrera para convertirse en speaker, puesto en el que aspiraba a suceder a Kevin McCarthy, destituido deshonrosamente la semana pasada mediante la moci¨®n de Matt Gaetz, uno de los suyos.

Scalise hab¨ªa vencido el mi¨¦rcoles en una votaci¨®n interna del partido a Jim Jordan (Ohio) por un margen (113-99) que al final se demostr¨® escaso. A partir de entonces, el congresista trat¨® de convencer entre bambalinas a sus correligionarios de que lo apoyasen antes de convocar una votaci¨®n en el pleno, en la que contaba con el pronunciamiento en contra de los dem¨®cratas. Necesitaba 217 s¨ªes entre los 222 esca?os con los que cuenta la formaci¨®n conservadora en la C¨¢mara baja. Finalmente, todo indica que desde la impotencia, Scalise renunci¨® a su candidatura. Este viernes, esa retirada ha dado una segunda oportunidad a Jordan, que ha conseguido ser elegido candidato del partido al cargo.

Varios republicanos de estridente perfil medi¨¢tico, como George Santos (Nueva York) o Marjorie Taylor Greene (Georgia), hab¨ªan anunciado que no apoyar¨ªan a Scalise. En vista de que las cuentas no acababan de salirle, el congresista, que anunci¨® en agosto que padec¨ªa un mieloma m¨²ltiple del que se est¨¢ tratando con quimioterapia, aparc¨® al final de la jornada sus aspiraciones de ocupar el puesto de la tercera autoridad del pa¨ªs y segundo en la l¨ªnea presidencial. Su enfermedad ha sido uno de los argumentos de quienes se opon¨ªan a su ascenso. El expresidente Donald Trump declar¨® por la ma?ana en el programa de radio del presentador de Fox News Brian Kilmeade que Scalise ¡°est¨¢ en serios problemas [para desempe?ar el puesto] desde el punto de vista de su c¨¢ncer¡±.

Trump apoy¨® la semana pasada la candidatura de Jordan. Es uno de los congresistas m¨¢s fieles a su liderazgo, y colabor¨® activamente en los intentos del magnate de revertir el resultado electoral de las elecciones de 2020 y de aferrarse a la Casa Blanca. Tras conocer la renuncia de Scalise, Jordan volvi¨® a la carga para recabar los 217 votos que necesita para empu?ar el mazo de speaker. No pinta bien, porque varios representantes, m¨¢s de los cinco que bastar¨ªan para hacer naufragar su elecci¨®n, declararon que no piensan apoyarlo.

Pasado el mediod¨ªa del viernes (hora local), la batalla se anim¨® con un nuevo aspirante: el congresista de Georgia Austin Scott, un pol¨ªtico de perfil bajo, en la C¨¢mara desde 2012. Se presentaba como la alternativa a Jordan y empez¨® la jornada en la CNN diciendo que todo este l¨ªo hace que los republicanos parezcan ¡°un grupo de idiotas¡±. El partido (o lo que queda de ¨¦l, tras la desbandada propia del jueves, cuando muchos representantes abandonan Washington para pasar el fin de semana en casa) se reuni¨® por la tarde y opt¨® por Jordan como nuevo candidato.

Par¨¢lisis legislativa

Hasta el 3 de octubre, Scalise era l¨ªder de la mayor¨ªa republicana en la C¨¢mara de Representantes. Tambi¨¦n era el segundo de McCarthy El Breve, que fue presidente del Congreso solo durante nueve meses, tras su elecci¨®n en enero pasado, cuando le hicieron falta 15 votaciones para vencer la resistencia del ala dura de su partido. Gaetz, uno de sus miembros m¨¢s conspicuos, promovi¨® la semana pasada una moci¨®n de censura para arrebatarle el mazo de speaker. Lo apoyaron en su misi¨®n desestabilizadora otros siete republicanos y la totalidad de los dem¨®cratas (208) presentes aquel d¨ªa en el pleno. Fue una jornada hist¨®rica: nunca en los 234 a?os del Capitolio hab¨ªa quedado vacante el cargo de presidente de la C¨¢mara de Representantes.

Aquella votaci¨®n sumi¨® al Capitolio en el caos y al pa¨ªs en la par¨¢lisis legislativa. Y eso incluye la imposibilidad de aprobar ayuda militar para Israel, por lo que las noticias llegadas desde la franja de Gaza han a?adido presi¨®n a la crisis institucional en Washington. El Congreso no puede hacer nada, ni siquiera el m¨¢s simb¨®lico de los gestos, hasta que sus miembros no escojan a un l¨ªder. Con el programa de asistencia a Ucrania congelado, tambi¨¦n se acerca sin remedio la fecha del 17 de noviembre, d¨ªa en que expira la pr¨®rroga presupuestaria firmada con los dem¨®cratas para evitar un cierre parcial de la Administraci¨®n. Aquel fue el compromiso que le cost¨® el puesto a McCarthy.

¡°Nadie me va a utilizar como excusa para frenar nuestra capacidad de lograr que la C¨¢mara recobre la normalidad¡±, dijo a los reporteros en el Capitolio el jueves por la noche Scalise tras el anuncio de su renuncia. Cuando le preguntaron si ten¨ªa pensado respaldar Jordan como candidato a presidente de la instituci¨®n, Scalise respondi¨® que no hab¨ªa hecho ¡°ning¨²n trato con nadie¡±. ¡°Estoy seguro de que habr¨¢ mucha gente que querr¨¢ ahora optar al puesto; solo espero que no lo hagan ¨²nicamente por un inter¨¦s personal¡±, a?adi¨®.

La prueba de que el Partido Republicano se ha convertido en un ente ingobernable la ofreci¨® ¨¦l mismo en una reuni¨®n en la que anunci¨® a los suyos que tiraba la toalla. Seg¨²n Punchbowl News, web de reciente creaci¨®n especializada en los intr¨ªngulis de la Colina, modo en el que Washington se refiere al Capitolio tirando de topograf¨ªa, Scalise les dijo: ¡°Nuestro partido a¨²n tiene que unirse y no est¨¢ en ese punto. Todav¨ªa hay algunas personas que tienen sus propias agendas. Yo fui muy claro: tenemos que hacer que todos dejen de lado esos intereses personales y se concentren en lo que este pa¨ªs necesita. Este pa¨ªs cuenta con nosotros para volver a estar juntos. Esta C¨¢mara de Representantes necesita un presidente; urge volver a ponerla en funcionamiento. Claramente, no todos estamos en ese punto. Y todav¨ªa hay cismas que deben resolverse¡±.

En 2017, el aspirante frustrado a speaker protagoniz¨® un tr¨¢gico cap¨ªtulo de la historia de la infamia pol¨ªtica en Washington, cuando le dispar¨® un fan¨¢tico que abri¨® fuego contra varios miembros del Congreso que participaban en un partido de b¨¦isbol de la liga que cada a?o enfrenta a los legisladores aficionados al deporte. Tard¨® meses en recuperarse de las heridas.

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