La desinformaci¨®n y las noticias falsas, protagonistas en la recta final de las elecciones de Taiw¨¢n
Los ciudadanos de la isla autogobernada acuden este s¨¢bado a las urnas para votar al pr¨®ximo presidente, en medio de las denuncias del Gobierno sobre las interferencias de China
Eve Chiu, veterana periodista taiwanesa de 59 a?os, tiene bastante trabajo estos d¨ªas. Dirige Taiwan FactCheck Center, una organizaci¨®n destinada a desenmascarar bulos y noticias falsas en la isla. En las elecciones que se celebran este s¨¢bado, la madeja de la desinformaci¨®n en la nebulosa de las redes sociales se ha vuelto ¡°abrumadora¡±, dice. Hasta el punto de que uno comienza a no saber qu¨¦ es cierto y qu¨¦ no. A dudar de sus sentidos. Y ya no hablamos de noticias falsas ¡°tradicionales¡±, a?ade Chiu durante una entrevista el mi¨¦rcoles en Taip¨¦i, sino de los llamados ¡°deep fake¡± (algo as¨ª como ¡°ultrafalsos¡±) generados con ayuda de la inteligencia artificial y propagados a la velocidad del rayo de m¨®vil en m¨®vil. Pero cree que es mejor no contarlo, sino ver un ejemplo.
Proyecta el siguiente v¨ªdeo: se ve a Rob Wittman, congresista estadounidense y miembro del Comit¨¦ de Servicios Armados, durante una entrevista televisiva. Un r¨®tulo en chino indica que est¨¢ ¡°haciendo campa?a p¨²blicamente a favor del PPD¡±, el gobernante Partido Progresista Democr¨¢tico, la formaci¨®n que lidera las encuestas taiwanesas y la opci¨®n que menos gusta en Pek¨ªn. China, que considera a la isla autogobernada una parte irrenunciable de su territorio y ha catalogado las elecciones como una decisi¨®n entre ¡°la guerra y la paz¡±, ve al PPD como una peligrosa agrupaci¨®n de corte independentista que puede llevar al conflicto.
El v¨ªdeo, que apareci¨® en TikTok, y de ah¨ª salt¨® a las redes sociales taiwanesas, echa sal en esta herida. Wittman habla de los candidatos de este partido a la presidencia y vicepresidencia: Si Lai Ching-te y Hsiao Bi-khim ganaran, dice, ¡°Estados Unidos acelerar¨ªa todas las ventas de armas a Taiw¨¢n, enviar¨ªa personal militar estadounidense con experiencia en combate para ayudar al entrenamiento de Taiw¨¢n e invitar¨ªa al ej¨¦rcito taiwan¨¦s a entrenarse en Estados Unidos, para reforzar las capacidades de autodefensa¡±.
El corte es impecable. La voz encaja en los labios a la perfecci¨®n. Pero no es real. ¡°Ahora te voy a ense?ar el original¡±, dice Chiu, y muestra el mismo corte, pero en este otro el congresista habla de independencia energ¨¦tica y los precios de los fertilizantes. Nada que ver. Este es del a?o pasado, dice la periodista. ¡°Y el falso de hace unas semanas¡±. El v¨ªdeo buscaba tener un impacto directo en las elecciones. No sabe el origen. Ni qui¨¦n lo ha hecho. Solo que apareci¨® en TikTok y de all¨ª salt¨® a las redes sociales taiwanesas.
Seg¨²n el proyecto sueco Varieties of Democracy, o V-Dem, que elabora todos los a?os un informe sobre el Estado de las democracias, Taiw¨¢n ha superado durante 10 a?os consecutivos a todos los dem¨¢s pa¨ªses del mundo en la cantidad de informaci¨®n falsa que otros Gobiernos difunden dentro de sus fronteras. As¨ª lo asegura tambi¨¦n el Gobierno taiwan¨¦s. Joseph Wu, ministro de Exteriores de la isla, denunci¨® el mi¨¦rcoles en una comparecencia ante la prensa internacional que las campa?as de desinformaci¨®n son una m¨¢s de las numerosas t¨¢cticas de interferencia de China en su proceso democr¨¢tico, una estrategia en la que entran desde la amenaza militar a las declaraciones pol¨ªticas ¡°desagradables¡±. ¡°La desinformaci¨®n est¨¢ dise?ada para polarizar nuestra sociedad, socavar las instituciones y degradar nuestra democracia. Y hemos visto algunos ¨¦xitos de China en ese sentido¡±, aseguraba el mi¨¦rcoles Vincent Chao, director de Asuntos Internacionales del partido gobernante y portavoz de la campa?a presidencial de Lai Ching-te, durante una entrevista con EL PA?S.
Mao Ning, portavoz de Exteriores de China, rechaz¨® el jueves las acusaciones. ¡°Las elecciones en la regi¨®n de Taiw¨¢n son asuntos puramente internos de China que no permiten interferencias externas¡±, dijo al ser interrogada por las peticiones de Washington para que se abstenga de intervenir.
Chiu, vestida con chaleco y tocada con una boina de aire parisino, reconoce que es una lucha desigual. En su organizaci¨®n, que cuenta con 16 empleados, logran desenmascarar entre 60 y 80 bulos y similares al mes. Parte de su financiaci¨®n viene de Meta (la matriz de Facebook) y de Google. No reciben dinero de ning¨²n Gobierno. Les llegan denuncias a trav¨¦s de sus seguidores. Y se ponen manos a la obra cuando cumple con determinados criterios (el inter¨¦s p¨²blico, la difusi¨®n, el da?o a la sociedad). Su foco no es exclusivamente China, pero caer en cuestiones relacionadas es inevitable.
La organizaci¨®n Doublethink Lab s¨ª tiene el foco puesto en la Rep¨²blica Popular. ¡°Ahora mismo, China sube 200 canales de YouTube al d¨ªa para difundir desinformaci¨®n, denunciar a Taiw¨¢n y a nuestro Gobierno¡±, afirma Puma Shen, de 41 a?os, presidente de Doublethink Lab y fundador de Kuma Academy, organizaci¨®n de defensa civil sin ¨¢nimo de lucro que forma a personas en primeros auxilios, evacuaciones en caso de conflicto y alfabetizaci¨®n medi¨¢tica para combatir la desinformaci¨®n. Adem¨¢s, Shen va en las listas del PPD al Yuan Legislativo (el Parlamento).
Tal y como lo ve, el resultado de las elecciones taiwanesas son una oportunidad para que Pek¨ªn eval¨²e el ¨¦xito de sus campa?as con respecto a Taiw¨¢n. ¡°Realmente no se trata de a qu¨¦ candidato quiere apoyar [Pek¨ªn], sino de generar divisi¨®n dentro de nuestra sociedad, de hacer que la gente no crea en la democracia¡±, dice. Muchos de los v¨ªdeos, explica, buscan crear la sensaci¨®n de que China es amistosa con Taiw¨¢n, y que otros pa¨ªses como Jap¨®n y Estados Unidos no lo son.
Una madre occidental residente en Taiw¨¢n, casada con un taiwan¨¦s, cuenta que hace poco se sorprendi¨® cuando su hija mayor, de 11 a?os, se top¨® en TikTok con un v¨ªdeo titulado: ¡°La verdad que el PPD no te cuenta¡±. El algoritmo hab¨ªa escogido para ella un corte en el que se ve a un ni?o chino leyendo un poema en un libro de texto. Los versos hablan de una barca que va a Taiw¨¢n a recoger ni?os para llevarlos a jugar a un colegio en China. ¡°Mam¨¢, ?por qu¨¦ deber¨ªamos ir a por ni?os taiwaneses y traerlos de visita?¡±, pregunta el hijo. ¡°Porque los ni?os taiwaneses son nuestra familia. No solo queremos que los ni?os taiwaneses vengan a visitarnos. Tambi¨¦n queremos que vengan todos los taiwaneses. Han estado separados de nuestra gran familia durante mucho tiempo. Echan de menos su hogar¡±. La madre occidental cree que el v¨ªdeo est¨¢ espec¨ªficamente dirigido a peque?os en edad escolar. ¡°Curiosamente, en la secci¨®n de comentarios hay un mont¨®n de respuestas tipo ¡®?No, gracias! ?No quiero volver a casa!¡¯¡±
Para Eva Chiu, de Taiwan FactCheck Center, lo m¨¢s da?ino de la desinformaci¨®n es la sensaci¨®n de ausencia de suelo; al desaparecer la realidad, deja de existir una base ¡°para debatir, para discutir, para el di¨¢logo¡±, dice. Luego, muestra otro ejemplo: un pantallazo que ha circulado en redes que parece sacado de la web de Radio France Internationale, una respetada emisora p¨²blica francesa. ¡°Es muy interesante¡±, dice. ¡°Totalmente falso¡± aunque parece ¡°muy real¡±. En ¨¦l se afirma que la presidenta saliente de Taiw¨¢n, Tsai Ing-wen, ha enviado de forma secreta miles de proyectiles para ayudar a Israel en la guerra de Gaza. ¡°Trata de difundir la idea de que es una instigadora de la guerra¡±. Lo cual en este lado del mundo, donde chocan las superpotencias, tiene una lectura muy concreta. Extremadamente sensible. Busca inocular una idea, seg¨²n ella: ¡°Si votas al PPD, tendr¨¢s guerra¡±, dice Chiu.
Sigue toda la informaci¨®n internacional en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.