El partido de Erdogan sufre una debacle en las elecciones municipales de Turqu¨ªa
Los socialdem¨®cratas del CHP gobernar¨¢n las cinco ciudades m¨¢s pobladas del pa¨ªs y ganan unas elecciones por primera vez desde 1977
El Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP), del presidente Recep Tayyip Erdogan, que ha dominado con solidez las elecciones en Turqu¨ªa durante las ¨²ltimas dos d¨¦cadas, obtuvo unos resultados desastrosos en las municipales de este domingo. Por primera vez desde su fundaci¨®n en 2001 pierde unas elecciones. No logr¨® recuperar las alcald¨ªas de Estambul o Ankara ¡ªperdidas en 2019¡ª e importantes feudos conservadores cayeron ante los candidatos del principal partido de la oposici¨®n, el socialdem¨®crata Partido Republicano del Pueblo (CHP), e incluso ante sus aliados de la extrema derecha. Con el 99,8% del voto escrutado, de las 10 ciudades m¨¢s pobladas del pa¨ªs, que suman a la mitad de la poblaci¨®n, el AKP ¨²nicamente logra mantener tres, mientras el CHP gana en seis (cinco de ellas, las m¨¢s pobladas, incluidas Estambul y la capital, Ankara) y el partido islamista YRP en una.
Hac¨ªa d¨¦cadas que el mapa electoral de Turqu¨ªa no se te?¨ªa tanto de rojo, el color del CHP, que, a nivel nacional, ha obtenido el 37,7% de los votos frente al 35,5% cosechado por el AKP. El partido centroizquierdista creado por el fundador de la Turqu¨ªa moderna, Mustafa Kemal Atat¨¹rk, no ganaba unas elecciones desde 1977. Pero venci¨®, a pesar de la divisi¨®n con que la oposici¨®n enfrentaba estos comicios: tras la dura derrota del pasado a?o, en la que Erdogan logr¨® revalidar su cargo de presidente con las encuestas en contra, la coalici¨®n opositora entre el CHP, el partido de derecha nacionalista IYI, varios peque?os partidos de derecha y el apoyo t¨¢cito de la izquierda kurda se hab¨ªa disuelto. No solo eso, sino que, adem¨¢s, el CHP hab¨ªa iniciado un proceso de renovaci¨®n de su liderazgo tras un complicado congreso que dividi¨® a la formaci¨®n centroizquierdista. ¡°Turqu¨ªa ha decidido optar por una nueva pol¨ªtica¡±, declar¨® este domingo ?zg¨¹r Ozel, l¨ªder del CHP. ¡°Es un mensaje del que hay que tomar nota¡±, dijo en una intervenci¨®n entre l¨¢grimas de emoci¨®n.
La f¨®rmula de coalici¨®n se hab¨ªa probado por primera vez en las elecciones locales de 2019, con buenos resultados: logr¨® la victoria en Ankara y Estambul tras un cuarto de siglo de gobierno municipal islamista. Sin embargo, en estas elecciones, los alcaldes del CHP se presentaban sin el apoyo de sus aliados externos. Por contra, el AKP hab¨ªa movilizado todos los recursos del Estado y el presidente Erdogan particip¨® activamente en sus campa?as. Y, sin embargo, los alcaldes centroizquierdistas han logrado aguantar el envite: en Estambul, el popular Ekrem Imamoglu venci¨® con el 51% de los votos y 11,5 puntos porcentuales de diferencia sobre su adversario ¡ªlo que lo convierte en un potencial candidato a las pr¨®ximas presidenciales¡ª y, en Ankara, la diferencia fue a¨²n mucho mayor: 29 puntos sobre el candidato del AKP. ¡°A partir de esta noche la democracia se extender¨¢ desde Sara?hane [sede del Ayuntamiento de Estambul] a las plazas, a las calles, a las universidades, a los caf¨¦s y a los comedores municipales¡±, dijo Imamoglu a los seguidores que se congregaron para celebrar su victoria.
En la tercera ciudad del pa¨ªs, Esmirna ¡ªbasti¨®n del laicismo¡ª, el CHP logr¨® mantener la Alcald¨ªa pese a perder votos. Pero la sorpresa fue Bursa, cuarta mayor ciudad y basti¨®n del AKP en las ¨²ltimas d¨¦cadas: el candidato del CHP se impuso por siete puntos. A¨²n m¨¢s: el CHP mantuvo las alcald¨ªas en la costa mediterr¨¢nea y gan¨® en todo el Egeo interior ¡ªhabitualmente feudo de los partidos de derecha¡ª e incluso en varias capitales provinciales de las muy conservadoras Anatolia Interior y Anatolia Oriental.
Pasada la medianoche en Turqu¨ªa, el presidente Erdogan compareci¨® con gesto circunspecto en el balc¨®n de la sede de su partido, donde acostumbra a dar los discursos victoriosos, si bien ante mucho menos p¨²blico de lo que es habitual. ¡°No hemos logrado los resultados que esper¨¢bamos¡±, reconoci¨® y, en un lenguaje m¨¢s conciliador que el agresivo que utiliza habitualmente durante las campa?as, dijo que ¡°los verdaderos vencedores no son los candidatos, sino la naci¨®n turca¡±. ¡°Hemos demostrado la madurez de la democracia turca. El d¨ªa m¨¢s cr¨ªtico de las democracias son las elecciones, cuando se expresa la voluntad de la naci¨®n¡±, afirm¨®. Al mismo tiempo, asegur¨® que esto no es un final, sino que ¡ªsin dejar claro si se refer¨ªa a su partido o a ¨¦l, que prometi¨® hace unas semanas que no ser¨¢ candidato en las pr¨®ximas presidenciales¡ª ¡°continuar¨¢ su camino¡± tras valorar y sacar conclusiones de los resultados. Tambi¨¦n asegur¨® que su Gobierno proseguir¨¢ con sus actuales pol¨ªticas econ¨®micas de estabilizaci¨®n e incrementar¨¢ las operaciones militares contra el grupo armado kurdo PKK en Siria e Irak.
Al AKP de Erdogan le ha hecho mucho da?o el presentar a candidatos sin demasiado renombre, de perfil tecnocr¨¢tico y como simples extensiones del Gobierno central. Y, sobre todo, la situaci¨®n de crisis econ¨®mica que vive el pa¨ªs, con unos precios disparados (la inflaci¨®n no baja del 60%) que han puesto en aprietos a las familias, adem¨¢s de las constantes acusaciones de corrupci¨®n que pesan sobre sus dirigentes.
Tambi¨¦n ha da?ado a los islamistas la competencia dentro de su propio campo. Aunque, en muchas provincias, el AKP se ha presentado en alianza con sus socios de los partidos ultraderechistas MHP y BBP, en otras han participado por separado, y all¨ª los socios del partido de Erdogan han salido ganando, rob¨¢ndole varias alcald¨ªas provinciales. M¨¢s hiriente para Erdogan es la competencia que le ha salido a la derecha con el partido islamista YRP, fundado por Fatih Erbakan, hijo del mentor pol¨ªtico de Erdogan. El YRP se ha hecho con la Alcald¨ªa metropolitana de Sanliurfa ¡ªoctava mayor ciudad del pa¨ªs¡ª y con la de la capital provincial de Yozgat, ambas anteriormente del AKP, y ha cosechado el 6,2% de los votos, convirti¨¦ndose en el tercer mayor partido del pa¨ªs.
Dos muertos e irregularidades en el sudeste kurdo
La jornada electoral se desarroll¨® en medio del Ramad¨¢n, en un pa¨ªs donde entre la mitad y dos tercios de los adultos hacen el preceptivo ayuno del mes sagrado musulm¨¢n. En torno al 78,5% de los electores acudieron a las urnas, seis puntos menos que en la anterior cita municipal. En general, el voto se desarroll¨® en calma y sin problemas, excepto en algunas localidades del sudeste donde se produjeron enfrentamientos. El m¨¢s grave ocurri¨® en la aldea de ?irnik (Diyarbakir). All¨ª, una disputa entre los partidarios de dos candidatos a alcalde termin¨® en una pelea a palos, pedradas y disparos en la que muri¨® un delegado del partido prokurdo DEM y otras 11 personas resultaron heridas. Tambi¨¦n en la provincia de Siirt hubo un enfrentamiento similar, en el que muri¨® una persona y otras cuatro resultaron heridas. En la vecina Sanliurfa hubo varias peleas con m¨¢s de una docena de heridos.
Adem¨¢s, en estas provincias se denunciaron diversas irregularidades. Por ejemplo, la Asociaci¨®n de Derechos Humanos (IHD) afirm¨® que un candidato del gobernante AKP firm¨® la compra de 1.200 votos de cuatro aldeas en Diyarbakir por 57.000 euros o que en Halfeti (Sanliurfa) un grupo de personas armadas vot¨® en grupo ¡ªsin permitir el voto individual y secreto¡ª y tambi¨¦n intent¨® hacerlo un candidato del AKP junto a un centenar de personas (en algunas de estas provincias kurdas, los clanes familiares son a¨²n muy influyentes y los candidatos negocian el voto directamente con ellos).
Pero la mayor¨ªa de las denuncias de irregularidades se refirieron a la amplia afluencia de soldados y polic¨ªas a las urnas en estas provincias, lo que la portavoz del partido DEM, Ayseg¨¹l Dogan, denunci¨® como ¡°un intento de subvertir la voluntad popular¡±. Seg¨²n la ley turca, los miembros de las fuerzas de seguridad pueden votar en las elecciones locales en aquel municipio donde est¨¦n desplazados ejerciendo sus funciones, aunque no est¨¦n inscritos en ese censo, pero el DEM (las nuevas siglas con las que se presentaba la izquierda nacionalista kurda) sostiene que se abus¨® de esta disposici¨®n para alterar los equilibrios pol¨ªticos. Seg¨²n este partido, que public¨® numerosos v¨ªdeos de cientos de hombres j¨®venes haciendo cola para votar ¡ªsupuestamente soldados y polic¨ªas¡ª, cerca de 47.000 miembros de las fuerzas de seguridad votaron como ¡°desplazados¡± en la regi¨®n kurda. En algunas capitales provinciales como Kars, Igdir o Siirt, donde la izquierda kurda se impuso en los comicios de 2019 al AKP o a su aliado ultraderechista MHP por entre 1.200 y 1.600 votos, el n¨²mero de miembros de las fuerzas de seguridad que votaron este domingo equivale al 10% del censo. En otros, como Sirnak, llega incluso al 20%.
Pese a ello, el DEM logr¨® imponerse en la mayor¨ªa de las alcald¨ªas del este y el sudeste, excepto en Sirnak y Kars, donde perdi¨®, respectivamente, frente al AKP y el MHP por unos pocos miles de votos. La inc¨®gnita ahora es si el Gobierno les permitir¨¢ asumirlas o las intervendr¨¢, como ha ocurrido en anteriores ocasiones, alegando los lazos del partido con el grupo armado PKK.
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